DREWMi plato de fideos se encuentra a medio comer en la barra dela cocina.El de papá está intacto. Nunca bajó, y cuando subí a ver cómo estaba, lo oí roncar.Hay una copa de vino sobre el mostrador frente a mí, la tomo y bebo el contenido cuando mi teléfono suena.La sonrisa tonta de Ruby aparece en la pantalla, y lo recojo.—Es muy temprano para que me llames.—Tacha a Timber de la lista. — Oigo el ruido de los armarios de fondo y el chirrido de un corcho —. Él quería que lo llamara Falstaff.—¿Porque es un gordo alcohólico?—Dice que es divertido y una mala influencia. —Oigo como vierte el líquido —. Salud.Levanto mi copa.—Justo a tiempo. Finalmente abrí el Pinot que compramos enNapa.—Dios, eso fue hace tanto tiempo
GREYLa fuerza de la explosión me golpea contra la ventana. Mis oídos sesienten como si estuvieran llenos de algodón. No puedo oír a los hombres gritando. Sólo siento el ruido de los pies corriendo y el temblor del motor del camión.Un chillido agudo se instala en mi cabeza, y mi corazón late fuera de mi pecho. Jadeo por respirar, luchando por orientarme a través del caos.El camión se encuentra sobre el lado del conductor, donde mi cabeza chocó contra la ventana. Subo sobre el asiento, haciendo lo mejor que puedo para maniobrar a través de las olas de mi conmoción cerebral.Salgo por la ventanilla del lado del pasajero y salto. En el momento en que golpeo el suelo, caigo sobre mis manos y rodillas y vomito en la arena.Es todo espuma y bilis. Me limpio con el dorso de la mano y con mi manga, usando el parachoques delantero me arrastro para poder ponerme de pie.¿Dónde está él? Estoy desesperado buscándolo por todas partes. Mi corazón late más rápido, el dolor se hace más intenso.—¡
—Su cita está programada para las nueve. Tienes 15 minutos.—¡Dotty! ¡Café, rápido! —Grita Ruby y entra en mi oficina justo detrás de ella —. ¿Cuál es el de soja baja en grasa?Dotty gira la bandeja y Ruby toma el vaso de papel con la R negra marcada en él. Dotty se apresura a mi escritorio.—Les pedí que añadieran un poco de canela al tuyo hoy.—Gracias, Dotty. —Estoy haciendo todo lo posible para encender mi laptop rápidamente.Lo último que necesito es ser analizada por el personal, sentada en mi sillón. Aún así, ambas están paradas al otro lado de mi escritorio mirándome con los ojos muy abiertos.Me rindo.—De acuerdo, acabemos con esto.—Grayson Cole ha vuelto y ha reabierto el taller de su tío. Yo envié a ese joven Billy James, ¿conoces al de ascendencia hispana? Lo envié esta mañana a primera hora.—Es mexicano, Dotty. —Ruby interviene. —Está bien decir que es mexicano.Los ojos preocupados de Dotty vuelan hacia ella.—No pretendía ser provocadora.Me froto una mano sobre los
DREWCuando los frenillos salieron de los dientes de Ralph Stern yconsiguió lentes de contacto, dejó de vestirse como un friki y obtuvo su título en negocios. Nunca perdió su enamoramiento por mí, pero al menos ahora no es tan espeluznante. Él es en realidad lo que la mayoría de las chicas considerarían guapo.La mayoría de las chicas que no lo conocen.—Esto revolucionará la economía de Oakville. —Saca una mano del bolsillo de sus jeans oscuros y la abre —. Los almendros de Hall producen excelentes frutos, y son muy resistentes al frío.Miro la pálida almendra que está en la palma de su mano y asiento con la cabeza, cayendo en un Dotty-ismo.—¡Que bárbaro!—¡Sí, lo hará! —Sus ojos brillan con emoción —. ¿Quién dice que California deber acaparar el mercado teniendo estos pequeños? Vamos a poder darle competencia aquí en Carolina del Sur.—Bueno, está bien, entonces. —Le brindo una sonrisa forzada y tomo un sorbo de sidra tibia, deseando que estuviera adulterada.La expresió
mostrador de cerámica.—Mamá siente pena por él. Ella dice que él no tuvo suficientes amigos mientras crecía.—Teníamos nuestras razones.Las voces se elevan en la otra habitación, y me estremezco. He estado ansiosa y nerviosa desde que entré por la puerta. ¿Qué haré cuando lo vea de nuevo?—Ralph es un buen chico. —La Sra. Banks me da palmaditas en el brazo para que me mueva.—Si usted lo dice, Sra. B.Ella levanta la tapa de un vapor de bambú.—Bien.Veo como ella da vuelta rápidamente las albóndigas y se me hace agua la boca. La mamá de Ruby es una de las mejores cocineras de la ciudad, y he estado viviendo de comida para llevar durante semanas.—Tal vez deberías salir con Ralph. —Le doy un codazo a mi amiga en la cintura —. No es asiático, pero si el negocio de las almendras funciona, podría revolucionar la ciudad. — Imito su voz.—Ni siquiera lo digas. Eres malvada. —Mi mejor amiga frunce el ceño —. De todos modos, no salgo con hombres tan inexpertos.—Podrías entrenar
Su frente se arruga sobre esos ojos tormentosos, y cuando se encuentran con los míos, no puedo contenerme. Me adelanto, pegando mi cuerpo al suyo, dejando que su familiar olor a cedro, jabón y Gray me envuelvan.Sus brazos fuertes me rodean y casi lloro. Mi cuerpo se derrite, agarro su camisa. Estoy justo donde pertenezco, pero el momento se hacortado. Él endereza su espalda y se aleja, agarrándome la parte superior de los brazos con ambas manos.—No podemos hacer esto.Los fragmentos de vidrio llegan a mi corazón, cortando dolorosamente.—¿Qué pasó?Deja caer su mentón.—Ya no soy la misma persona.—Bueno pues, yo tampoco. —Tengo lágrimas en la voz —. ¿No recibiste ninguno de mis mensajes de texto?Las líneas alrededor de sus ojos se profundizan.—En el accidente… mi teléfono se rompió. No compré uno nuevo hasta hace un mes.La frustración me quema por dentro. No soporto este dolor.—¿Todavía tienes mi número?Duda demasiado antes de admitirlo.—Sí.Ya no puedo quedarme aquí. Agarra
GRAYOtra noche inquieta y de nuevo, me despierto en el sofá. Algoacerca dormir en la cama de Mack no está registrado en mi cerebro. Tengo sábanas nuevas, almohadas nuevas. Arreglé los muebles. Nada funciona.Probablemente no ayudó que anoche tuviera que volver a beber por Drew. Viéndola allí, tan bonita, con esos leggings negros abrazando sus curvas, y con Ralph Stern hablándole, tocándola como si fuera su dueño. Recuerdo todas las veces que la animé a salir con otros chicos, y quiero patearme el trasero.Ella dijo que no está saliendo con él. ¿Alguna vez lo hizo? Él parece ser muy cercano a ella. Me preguntó si había visto sus mensajes.¿Intentaba hablarme de él mientras yo estaba escondido en Dover, cuidando a mi tío?Todo sobre la noche anterior se arremolina en un tornado de ira y frustración en mi mente. Ralph Stern dejó de ser el nerd espeluznante con frenillos, y en realidad ahora, parece el tipo de persona que el padre de Drew aprobaría para ella. Tiene un apellid
DREW—¿Pero no tuviste sexo con la niñera? —Aclaro, tomando notasen el cuaderno.Riley Sturgiss es una paciente nueva, una pequeña adolescente, con cabello rojo brillante y ojos oscuros. Ella reveló que su problema es la ansiedad social, pero estoy empezando a pensar que podría ser más una mentirosa compulsiva.Además, todavía estoy muy molesta por lo que sea que haya pasado en el taller de Mack esta mañana.O supongo que ahora es el taller de Gray.Sus mejillas se ponen rosadas y sacude la cabeza.—No quería ir a la casa de campo y sabía que, si estaba castigada, tendría que quedarme en casa.—Podrías haber puesto en peligro la reputación de tu niñera…o algo peor. Podría haber sido interpretado como violación de menores.—¡Oh, Dios