Malú

Después de una larga conversación con Lorenzo, estaba más tranquila y empecé a darme cuenta de que no tenía ningún sentido que me descontrolara, porque lo que se había hecho y decidido no cambiaría nada. Vincenzo ya había tomado su decisión sin decírmelo ni importarle mi opinión. Así que no tenía sentido que yo intentara discutir con él, porque nunca me daría la espalda como siempre hacía, y nunca asumiría todo lo que había hecho mal. Así que le pedí a Lorenzo que me recogiera a los niños en casa de su madre y se fue rápidamente.

Aproveché para darme una ducha e intentar recuperar el control de mí misma, ya que los niños estarían aquí y no deberían notar nada diferente. Me puse la ropa de casa y fui a la cocina a por algo de comer, tenía hambre, no había comido nada desde ayer... Así que me preparé un bocadillo con todo lo que tenía derecho, no me importaba hacer dieta ni nada, tenía hambre de leona y nada light iba a saciar ese hambre....

Me senté en la cocina a comer cuando oí