Capítulo 26 Luna
Hoy es el último día en el plazo que me dio mi padre, después de esto ya no hay marcha atrás. No lo he llamado, no tengo que hacerlo, se consiente mente que él sabe que el compromiso es hoy, su padre organiza la seguridad. No se trata de forzarlo a hacer algo, es que lo haga por voluntad propia, y espero que lo haga porque este tal Henry me cae realmente mal, es algo así como el príncipe encantador, no tiene nada que ver con mi Gabriel, como digo mío, ni que en realidad lo fuera.
- ya es hora de irnos al salón - aviso mi padre de pie en el marco de la puerta
- ¿él no va a venir cierto? - mi padre hizo una mueca que jamás lo vi hacer
- no lo sé Luna, pero pienso que si en realidad quisiera venir, lo habría hecho antes - asentí, sé que tiene razón en lo que dice
- vamos
El salón que escogió mi padre es hermoso, si el hombre que me está esperando fuera otro. En este momento sería la
PrólogoTodos creen que nacer millonario resuelve los problemas que se pueden crear durante toda tu vida, pero eso no es real, yo soy Luna; hija de uno de los magnates más grandes de la transportación, ya sea aérea, marítima o terrestre. Vivo una vida de lujos, sin contemplar el precio de lo que quiero, solamente debo nombrarlo; excepto una cosa, no puedo tener libertad. Cuando tenía cinco años mi madre y yo fuimos secuestradas, por desgracia, mi madre no tuvo tanta suerte como yo y falleció ese día, desde entonces mi padre tiene sobre mí un control estricto y casi enfermizo que no me deja respirar, tengo veinte años y nunca he podido salir de casa sin un guardaespaldas, o más bien, un séquito completo de ellos. Desde ir a la escuela, hasta salir al jardín, todo, tengo que hacerlo rodeada de hombres que no me hablan. Mi padre apenas me presta atención, desde que murió mi madre, se encerró en sí mismo sin remedio. Me criaron entre las nanas de turno y el servicio de casa. P
Capítulo 1Llegue a casa de una amiga de la universidad que me recibiría por unos días, vivía en un piso común en las afueras del campus, quedamos en que pagaría la mitad del alquiler, cosa que me parece perfecta porque mi presupuesto en este momento es limitado, más que eso, bastante escaso, casi todo lo que tenía era la matrícula de la universidad.- está es tu habitación me mostró Estefanía. El lugar era realmente pequeño, solo cabían la cama y el escritorio que ya tenía dentro, ni decir del clóset, no cabría ni la mitad de mi ropa, tendría que adaptarme- sé que no tiene nada que ver con tu casa, pero es toda tuya- está es ahora mi casa, es cierto que no es igual al lugar donde vivía antes, pero ese lugar no es mío, es de mi padre.- entonces vivamos felices- dijo ella sonriendo- hablé en el lugar donde trabajo para conseguirte un puesto, el dueño quiere verte mañana al mediodía.- no sé cómo podré pagarte todo esto Estefanía, no tengo a nadie más que a ti par
Capítulo 2- por Dios, debería ser ilegal - dijo Estefanía - límpiate la baba- dijo al darse cuenta de que yo también lo estaba mirando- ese tipo es irreal - ella ni me escuchó. Ya iba a medio camino de encontrarse con él.- hola, vecino- dijo ella para llamar su atención -¿puedo ayudarte en algo?- bueno - dijo él sonriendo con esa dentadura que parecía mandada a hacer - puede que sí. Por como estas vestida puedo ver que trabajas aquí. Estoy buscando al señor Rafael Farrel, ¿crees que puedes ayudarme? - pude ver las bragas de Estefanía abandonar su cuerpo por la forma en que él le habló. Yo creo que las mías le siguieron.- si claro que puedo ayudarte - le tomó la mano - sígueme - no es que tuviera intención de competir con Estefanía por este chico, pero si me atreviera a hacerlo, estaría pérdida. Ella era toda sensualidad, yo para nada, de hecho nunca he tenido mucha suerte con los chicos. La vi a ella regresar sola de la oficina del jefe.- por dios, por poco v
Capítulo 3Después de hacer el viaje más tormentoso de mi vida, comprendí por qué las personas siempre están apuradas, para mí; ir a la universidad siempre fue tan simple como tomar mi bolso, salir, subirme en un auto e indicar el destino que quería. Pero la realidad es que la vida es diferente, la mayoría de las personas hacen, ese viaje de la forma en que lo hice yo hoy. En transporte público, de pie, rodeados de personas sudorosas. Aún tengo en mi nariz, el hedor del sudor, huelo mi ropa y me parece que soy yo. Cosa más que probable.- deja de olerte, pareces un perro - me dijo kyla otra de mis amigas con la que nos topamos a la entrada del edificio de lenguas.- creerás que es mentira, pero me parece que huelo feo- estas loca de remate- me dijo fany- ya te dije muchas veces que no tienes mal olor- estábamos de pie frente al edificio, esperando la hora de entrar-¿tenemos que estar paradas aquí? Parecemos locas.- pregunto kyla- si, la verdad no pienso ir a nin
Capítulo 4Cuando logré recuperarme por completo del impacto de las palabras de Gabriel, entre al salón- señorita Smith- llamo mi atención el profesor Jackson- gracias por honrarnos con su presencia, pero creo que debería acomodarse ahora para que sus compañeros puedan seguir aprendiendo- mire mi reloj y pude comprobar que en efecto era tarde.- lo siento señor Jackson- me apresuré y tomé asiento, el profesor Jackson, Erick, era muy joven. Por eso nos trataba tan recio, apenas nos lleva como cinco años, a mi entender lo hacía para qué lo respetarán a pesar de su edad.- amo a ese hombre, un día voy a conseguir que me haga caso - Estefanía está enamorada, o eso dice- de él; desde el primer día que nos dio clases, hace más de un año. Pero cada vez que hace un intento con él. Déjame pensar una palabra adecuada, él la declina amablemente, digo esto por ser condescendiente, un día le preguntó que si tenía algún problema de carácter, que para él estaba siendo algo ligera. Tod
Capítulo 5Al día siguiente me levanté de mal humor, fui a la cocina y fani estaba sentada en la pequeña mesa que teníamos en el centro de la estancia- ¿y esa cara de perro a que se debe?- me pregunto nada más mirarme- anoche me acosté un poco molesta, y para colmo me levanté tarde, recuerda que tengo que llegar antes al café- me detuve de preparar el café y la miré- tú por el contrario, te ves muy fresca.- le dije, de verdad se veía reluciente. Parecía una persona diferente de la que deje en la universidad -¿alguna buena noticia?- bueno, puede que tenga algunas buenas noticias, pero tú no puedes escucharlas- me dijo-¿y eso por qué?- señaló el reloj que había en la cocina, recordé el que tenía que hacer- mierda- dije y salí corriendo, tomé mi bolsa de dónde la había dejado la noche anterior. Cuando salí del edificio, el auto de Gabriel estaba aparcado en la entrada, el arrecostado a la puerta del copiloto, el sol le daba de frente, tenía puestas gafas para
Capítulo seisDecir que me he pasado todo el día detrás de Estefanía para que me diga el motivo de su alegría sería poco. Pero ella pasa de mí por completo.- ya basta, ahora si vas a decirme- le dije en la sala de descanso, estábamos preparándonos para ir a la universidad.- bueno, está bien- se sentó frente a mí, en la pequeña mesa- tiene que ver con el profesor Jackson, ¿cierto?- ella asintió eufórica- entonces cuenta- anoche, cuando me dejaron en la universidad, fui a verlo- hizo una pausa - lo vi sin camisa- comenzó a aplaudir como una niña de kínder, no podía creer que ese fuera el motivo de su alegría.-¿y pasó algo más?- le pregunté con la esperanza de no tener una amiga demente- pues no, eso es todo - respondió poniendo cara de lástima- me he pasado todo el día detrás de ti, para que me digas que viste a Jackson sin camisa.- me levanté y tome mi bolsa- eres frustrante- salí a esperarla fuera, me reí, porque tenía un poco de gracia pensar en l
Capítulo 7- de verdad no sé cómo me dejé arrastrar aquí - me quejé, estábamos en una discoteca, cuando salimos de la Universidad a Estefanía se le ocurrió que como era viernes, debíamos de ir a celebrar, nada más y nada menos, que estar vivas. Ahora estoy aquí, el hedor del sudor que ahora me persigue a todos sitios. Antes, cuando iba a una discoteca, mis guardaespaldas no dejaban que nadie se acercara a mí, y luego me metían en un reservado, eso las pocas veces que lo hacía. - donde quiero estar es en casa, durmiendo- pero eso no puede ser- me pellizco un cachete, ya estaba medio achispada- eres muy joven Lunita, si te quedas encerrada, te pones viejita - se rio compulsivamente - además, te tengo una sorpresa - empujo mi hombro para que me volteara hacia la puerta - mira quien acaba el llegar, hace un rato me llamó por teléfono, preguntando por ti - lo dijo con intención - así que le dije donde estábamos y vino corriendo.- se calló por un momento-Después de maldecir,