Empezó a respirar rápido, su pecho subía y bajaba , hacia parecer que su espalda era más grande de lo que era, sus ojos se oscurecieron y ese azul calmo se transformó en una tormenta a punto de desatarse.

"Es él " pensó furioso. Soportaría cualquier cosa de ella menos que pensara en otro hombre y menos Pablo Mendoza.

_Que te sucede? Que es todo esto Elizabeth?

Ella seguía hecha una pelota contra la pared sin poder responder porque se ahogaba en llanto.

_nada.. es solo que...

El ya se desesperó

_solo que quiero volver a mi casa_espetó

"Que sea lo que Dios quiera" pensó si quiere matarme, por mi está bien.

El ya no se contuvo, la levantó de un tirón y le sacó las flores tirándolas a la basura sin miramientos.

_Eso no va a suceder_dijo apretandole la muñeca, no medía su fuerza.

_Fede, si esto se va a terminar, porqué alargar la agonía? _lloraba sin parar._déjame ir por favor

El llanto de Elizabeth pidiéndole que la dejara ir, le rompió el corazón, se estaba desmoronando por dentro,