Corre y corre muchísimo más, no se detiene ¿Por qué hacerlo?
Está agotada, sus pies duelen y sangran, su mirada perdida no sé hace esperar, su pecho sube y baja con ferocidad. ¿Cómo fueron capaces de hacerle algo así? Ella no puede más, pero sabe que si se detiene lo lamentara, le cuesta mucho trabajo seguir, pero lo consigue.
Gritos a lo lejos… La sangre de su cuerpo no ha dejado de salir, se contiene nuevamente de seguir, pero no se para pensarlo, ella sigue en su camino hacia la libertad, hasta que…
— ¡Suéltame! — grita ella con desespero.
— ¡La encontré! — la sostiene con tanta fuerza que sus extremidades duelen, pero no se queja, no llora, simplemente se queda quieta.
Caminan de regreso hacia la oscura cabaña, la sangre le hierve de rabia, sus pupilas están dilatadas y las ganas de acabar con todo a su paso son seguras y enormes.
Lo hará, terminará con ese sufrimiento, pero solo deberá esperar un poco, debe planear bien su plan sin desatar a la bestia en el transcurso de este.
Por unos breves segundo no puede mantener el control cuando ve el cuchillo cerca de su rostro, solo deberá tomarlo entre sus dedos… Y ya estará, lo dejará salir, podrá acabar con ellos. Se queda quieta esperando, pero la maldad en su interior derrumba la barrera que por años había formado, ya no hay límites que la detengan.
La oscuridad la consume poco a poco, la toma y la hace suya, sus manos cosquillean por proseguir, tiene una sonrisa escalofriante sobre su rostro.
Ya no hay cuchillo, pero si una navaja, la roza con la yema de sus dedos, es su única escapatoria, pero también la peor de todas. Sabe que una vez que la tenga entre sus manos no habrá marcha atrás, una vez que se deje dominar por la bestia tomará el control por completo.
Una macabra sonrisa se extiende sobre sus labios, está casi por completo dominada, solo falta un poco más y ya estará. Sostiene la navaja con fuerza, la tiene, la quiere, ya no hay vuelta atrás. Se acerca al sujeto con sigilo, no se ha percatado que ella sostiene aquello, no la ha visto, pero eso solo es un punto a su favor.La ira la recorre, el odio la sostiene, la furia la envuelve, está cegada, el monstruo la consuela y la toma de la mano para proseguir con su acto.Lo taclea y lo deja en el frío suelo, se desestabiliza, su sonrisa se ensancha mucho más. La navaja recorre su cuello, está lista y preparada, se siente extasiada al ver el miedo en el rostro del hombre.La sangre comienza a escurrirse por sus manos, el rojo carmesí la baña y ella tiembla ante el contacto con esta. Cierra los ojos y deja que la navaja actúe por sí misma, no hay marcha atrás.Ha liberado al monstruo, lo ha dejado salir de su jaula.El monstruo desea más, anhela mucho más, no es suficiente solo con eso.El monstruo le exige y le pide.Hace lo que el monstruo quiere, se deja llevar por completo, se envuelve en un frenesí de sensaciones inefables. Lo tiene, lo toma, lo destroza, lo acaba. Sonríe, su sonrisa es aterradora, está dominada.Toca la sangre, la estudia y analiza, la lleva a su boca, sonríe con suficiencia, el monstruo le pide y pide más ¿Cómo oponerse a este? Le da lo que desea, sigue con su acto. Los gemidos de dolor han dejado de salir de la boca de la víctima, está feliz, está tranquila, ha logrado su cometido.Su mente está inundada con el rojo intenso de la sangre, no puede dejar de pensar en esta, la mira, la prueba, su sabor metálico se mezcla con su saliva, sonríe, parece desquiciada, es su momento, no le importa. La oscuridad en sus ojos es mucha, su mirada tan gélida y profunda podría dejar a cualquiera sin habla.Se levanta con apresuro toma la navaja que había dejado en el suelo, da un último vistazo y sale de allí corriendo. No mira atrás, no espera nada más, toma una ruta diferente a la anterior, y corre porque sabe que su vida está dependiendo de eso. La oscuridad de la noche es mucha, árboles y muchos árboles más la rodean, decidida se esconde detrás de uno. Está agotada y muy agitada, pero la sonrisa de su rostro no se borra.Nota como las personas entran en la oscura cabaña, los escanea y memoriza sus rostros, eso será una herramienta que la ayudará más tarde...Con determinación se gira para seguir su camino, parece algo perdida, pero camina y camina más para poder salir de allí, ve la poca luz de la luna a lo lejos, un gran lago se extiende allí. Camina este ese lugar y se sienta con su mirada fija en el agua. Sonríe viendo su reflejo.Ella se ha liberado... ¿El monstruo? Jamás existió, solo era ella misma tratando de ocultar y persuadir lo que en realidad era.— ¿Me estas escuchando? — se gira para verlo con arrogancia. — Esto no es un puto juego. — pero si lo era, era su juego y estaba ganando.
— Cállate tengo todo listo. — le sonríe y sale de allí meneando sus caderas.Es hermosa, sensual y lo sabe.— Cómo me encanta esa jodida mujer. — sisea entre dientes mientras acomoda su erección.— ¡Muévete! — le grito desde abajo.
El deseo en su interior era tanto que él solo buscaba desatarlo por completo, tomarla entre sus manos y acariciarla como tanto había deseado por años. La deseaba, la lujuria reinaba en su mente, pero era de esperarse, ella era exquisita, perspicaz y tan malditamente controladora y eso era lo que más le fascinaba y excitaba, el control que ella podía ejercer sobre él.
A nadie se lo permitía, pero a ella… Era otra historia completamente diferente. Y se dejaba dominar, aunque no lo dijera y él no lo aceptaba, pero ella lo sabía.
— ¡Que bajes! — quiso gruñir, pero el simple grito de ella hizo que los vellos de su cuerpo se erizaran.
Ha caído en su juego, todos caen..."Quién con monstruos lucha cuide a su vez de no convertirse en monstruo."– Friedrich Nielsen.— ¿Fue lo mejor que se les pudo ocurrir? — grita con tanta desesperación que los demás retroceden.Se quedan callados, quietos, se sumen en un silencio gutural, es tenebroso y el lugar tampoco da una sensación estable.— La quería, lo sabes, no se anda con juegos. — dice uno de ellos. — Hablamos de esa pandilla, la más temida.— ¡Joder! — sus manos tiemblan, sus nudillos están blancos y su mandíbula muy rígida.— Los cobra nos ganan solo por unos pasos. — no responde, no los mira, la rabia en su interior es mayor.— Nos buscará. — su voz tiembla. — Lo hará. — su respiración se agita.— Tenemos eso controlado.— miente, nadie podría controlarla, no a ella, jamás a ella.Pero dudan, por primera vez están atascados, la oscuridad en la que se sumergen es como si estuvieran en un gran hoyo negro, sin aire, sin nada. Lo saben, están seguros de lo que ocurrirá, aunque nadie lo dice, saben que cuand
"Cuando miras largo tiempo a un abismo, el abismo también mira dentro de ti."— Friedrich Nielsen.Chanel:Estoy sentada sobre mi cama, tengo tanta pereza de bajar, con el simple hecho de saber que debo estar rodeada de más personas y ponerles buena cara... No, no y no, que se jodan.Unos toques en la puerta me irritan al instante.— ¿Por qué no bajas? — menudo idiota ¿Quién le dio permiso de entrar?— ¿No leíste el letrero de la puerta? — el ríe, provoca golpearlo. — Dice no ingreses a menos de que quieras sufrir ¡En mayúsculas!Rhett me mira divertido mientras relame sus labios, me gustaría que esa lengua estuviera sobre los míos, definitivamente.— Es más divertido molestarte. — me levanto para sacarlo de la habitación, pero él es más rápido y me taclea hacia la pared.— Tu olor es putamente embriagador.— mete su rostro en mi cuello y un escalofrío me recorre al instante.Lleva sus manos a mi feminidad y la roza de manera lenta.— No andes con juegos.— siseo entre dientes.— Con es
"La maldad puede ser fácilmente absorbida cuando se está en contacto constante con ella."— Desapareciste. — escucho a mis espaldas, no me giro, sé perfectamente quién es.— No es tu asunto. — digo sin mirarlo, es mejor que se mantenga al margen. — Aléjate.— Oh vamos, dulzura. — dice mientras roza su nariz con mi cuello, ese simple acto causa escalofríos en mi cuerpo.— Rhett es mejor que te apartes. — lo tomo de la muñeca muy fuerte y él solo se ríe.Quiero golpearlo en ese hermoso rostro, el condenado sabe que está bueno y con eso intenta manipularme.— Dulzura... — se acerca al lóbulo de mi oreja. — Sabes que no puedes resistirte a mí. — me río en su cara.— En tus sueños. — sentenció apartándolo de mí. — Tus juegos de conquista y manipulación pueden servir con cualquiera, excepto conmigo y lo sabes. — me toma de la cintura y me pega a su cuerpo, su aliento se choca con el mío y comienzo a sentir la humedad entre mis piernas.— Eso ya lo veremos. — ríe una última vez y se aparta p
" Los monstruos son reales, viven dentro de nosotros, y a veces, ellos ganan."— Stephen King.¿?Porque la oscuridad jamás se ha conocido como tal, porque ella puede ser luz y al mismo tiempo abismo. Con sus labios púrpura te engaña y te lleva en sus redes, es hermosa, lo sabe, su belleza es atrapante, atrayente a la vista. Su sensualidad te envuelve, te hace desearla, mirarla y jamás soltarla, cuando eso sucede ya has caído en su juego y para volver atrás, será demasiado difícil...¿Mujer frágil? Nunca ha sido así, su determinación y fortaleza es tan grande como sus pechos, claro, eso es si me piden un ejemplo.La miro desde la lejanía, sé perfectamente lo que hace, sé lo que quiere, ella es así, le encanta envolver a las personas en su juego y solo soltarlas en el último momento, pero no para nada bueno. Por eso me fascina...No es tonta, su manipulación y forma calculadora de ver las cosas me pone tan duro en muchas ocasiones, sabe lo que quiere y hace hasta lo inimaginable para c
“Todo el que crea un monstruo, tarde o temprano ha de destruirlo, o el monstruo lo destruye a él.”Chanel:Me miro al espejo, me veo jodidamente preciosa; un vestido con cuello en forma de V me acompaña, resalta mis pechos y es lo que más me encanta. Este es largo, con una abertura en la pierna derecha y ajustado en la cintura, seré el centro de atención, como debe ser siempre. Mi melena cae en hondas, amo mi hermoso cabello largo, un cobrizo demasiado hermoso para ser real, pero que se puede hacer, yo soy así.Me retoco por última vez el maquillaje y cuando me siento lista agarro mi pequeño bolso junto con las llaves de mi camioneta, había pensado en llegar en compañía de Rhett, pero hoy no estoy para soportar a nadie y solo quiero hacer mi aparición por mi cuenta, es lo único que deseo.Salgo de mi apartamento y voy directamente al estacionamiento, al llegar me subo a la camioneta y me encamino directamente al psiquiátrico Northwestern, hoy es la gran primicia y como invitada especi
“Los monstruos que salían de sus tumbas no son nada comparados con los que llevamos en el corazón.”— Max Brooks.Cinco de la mañana, me despierto y siento la emoción recorrerme el cuerpo, hoy será mi primer día en el psiquiátrico, podré verlo de cerca, sentirlo y sobre todo estar ahí mirando cada cosa que me rodea.Me alisto con tranquilidad, aún tengo mucho tiempo, me gusta levantarme temprano para poder rendir. Tomo una ducha algo larga, lavo mi cabello y mi cuerpo con paciencia, hoy tengo más energía que cualquier otro día y eso realmente me agrada. Salgo del baño envuelta en una toalla, elijo mi ropa, prefiero hoy colocarme un lindo vestido color Vinotinto, realza mis curvas y me queda bastante bien.Así que me visto con tranquilidad, me coloco mis tacones y me dispongo a terminar de arreglarme, no uso mucho maquillaje, solo algo de mascara de pestaña, mi labial púrpura que jamás puede faltar y me coloco perfume.Mi móvil suena en la mesita de noche, pero lo ignoro, busco mi bols
“El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer, y en ese claro oscuro surgen los monstruos.”Chanel Maxwell:Caminamos por el largo pasillo, este espacio es silencioso, no hay muchos enfermeros cerca, ya me va agradando la idea de estar aquí. Lo sigo de cerca, no menciona palabra alguna, ambos nos mantenemos en silencio, se frena, saca las llaves de su bata y abre la puerta frente a él.— Es aquí. — pronuncia sin mirarme, no digo nada. Ambos ingresamos en esta, no es tan grande, pero si es espaciosa. — Puedes decorarla a tu gusto y como lo desees.— Muchas gracias. — recorro la habitación, es tan gris, definitivamente necesita mi toque aquí. — Eso haré.— Ahora quiero enseñarte la sala de descanso. — me entrega las llaves de mi oficina y luego caminamos hacia la sala que mencionó.Ambos ingresamos en esta, adentro está Rhett, Jake y Daniel, los tres hombres posan sus ojos sobre mí y me escanean por completo, puedo notar como sus ojos se desvían mucho más hacia mis pechos y mis c
Narrador Omnisciente:Sus tacones suenan por toda la estancia, su vestido blanco realza sus curvas, su cabellera cobriza la hace lucir divina. Sube las escaleras y llega al segundo piso, no hay nadie allí, está vacío, una sonrisa cínica se forma en sus labios.— Justo como lo predije. — dice mientras se ríe, parece una desquiciada, se encuentra sola, se queda unos segundos observando el lugar.Hace días que él escapó, lo sabe, y eso solo la llena de energía, porque detonó lo que verdaderamente estaba esperando, su personalidad real. Su trastorno se hizo presente y eso solo la deja extasiada, al saber que ella fue su detonante.Su teléfono suena, lo agarra de inmediato y al ver de quién se trata la hace cantar victoria internamente.— Ich habe es bei mir. — pronuncia aquel hombre, la sonrisa que se forma en sus labios es notable.«Lo tengo conmigo.»— Gerade rechtzeitig. — sale de la habitación, baja las escaleras, y se encamina a la puerta trasera del lugar. — Voy en camino. — le dice