Florencia:El mes que llevamos en el campamento paso realmente rápido, es algo irónico que Alexander se hiciera amigo de Javier, pero supongo que Amara tiene mucho que ver en eso, los he encontrado más de una vez en una que otra situación muy comprometedora, también me sirvió para entablan un vínculo más cercano con mi padre, aunque claro él siempre me vio como su hija, para mí fue distinto, lo quiero no lo voy a negar, pero no sé si podrá ocupar algún día el lugar de Andrés, él me crio y jamás hizo algo que me hiciera pensar o creer que no era su hija, ese fue uno de los motivos por el que decidí no entrar en este tipo de vida, no juzgo a mi padre ni mis amigos, nunca lo hice, pero no es algo que quiera para mí, por más que mi padre me diga que puedo manejar todo bajo la protección de una identidad falsa, no, no es lo mío, jamás he matado a alguien y nunca podría dar la orden para hacerlo.— ¿En qué estás pensando? — la voz de Alex en mi oído me provoca un corriente que atraviesa mi
Florencia:Las horas transcurren y cada segundo que nos manteneos en marcha son kilómetros que me separan de mi hija, de Alexander, de las personas que amo y que estoy segura que no volveré a ver, me gustaría decir que he luchado, o así sea llorado, pero la verdad es que no es así, los sigo en silencio, con total sumisión, porque sé que lo que Manuel Villa Nueva tiene preparado para mi es el mismo infierno, sé que se tomara su tiempo para torturarme, y quizás lo merezca, no por huir de él, si no por matar a mi hijo, su hijo, pero en ese momento no lo soportaba, no quería algo de él creciendo dentro mío, luego me arrepentí y me castigue, mi bebé, también era mío, tarde lo entendí, ahora el cuervo me hará pagar físicamente por eso, y como ya dije, quizás lo merezco.— Espero que tu cabecita no esté pensando en nada raro mi Florcita, porque ahora sí que antes de dejarte ir te mato. — giro mi rostro carente de emociones y observo al animal que está sentado a mi lado.— No escaparía, aun
Florencia:Por lo que pude averiguar, pasamos casi dos días viajando, despistando a la gente de mi padre, me detengo en ese pensamiento, el gran Don de Colombia, mi padre, el mismo que juro que mientras estuviera a su lado nada me sucedería, sin embargo, aquí estoy, en un sótano, oscuro, húmedo, a la espera de lo que el cuervo quiera hacer conmigo, y en parte eso es bueno, porque quiere decir que mi hija vivirá, que Alexander está bien, y aunque sé que todo el cartel de Colombia debe estar buscándome, mi confianza está en Alexander, sé que él me encontrara, mi corazón así lo siente.Un ruido en la puerta me informa que mi verdadera pesadilla está a punto de comenzar, por un momento la luz que entra por ella me impide ver quién es el que está ingresando, pero pronto su voz tan característica me lo hace saber.— Florcita, el cuervo requiere de tu bella presencia. — Chemo, el perro guardián de Manuel.— Siempre me pregunte si solo estabas con Manuel por dinero o miedo, pero ahora entiend
Observo mi rostro en el espejo, pensando en lo increíble de todo lo que he pasado, crecí con nos padres maravillosos, tuve una infancia hermosa, pero era una mentira, los que creía mis padres en realidad eran mis tíos, mi madre murió protegiéndome, y mi verdadero padre es el jefe de jefes, ya que el cuervo al fin murió.— Este labial realzara aún más tus hermosos labios. — la mujer a mi lado llama mi atención y solo afirmo con mi cabeza.El cuervo, ese bastardo que tanto mal me hizo, convirtió años de mi vida en un verdadero infierno, provocando que huyera, de país en país, alejada de todos y de todo, llegue a pensar que lo merecía, que era mi culpa, pero ahora sé que no era así, yo no pedí nada de eso, ni tampoco lo busque, aun así, cada paso, cada error que cometí me llevo a Leonardo.— Tu cabello es muy largo, me gustaría hacer un muño alto, para que se luzcan tus hombros.— Me gusta esa idea.Mi Leo, el hombre que ame y me amo, quien me dejó lo más maravilloso que pude pedir, Agus
Leonardo.Cierro los ojos y respiro profundamente disfrutando del aire puro y los rayos de sol que bañan mi cuerpo, este lugar siempre me gustó, es un remanso de paz, donde venía cada vez que mi mente se convertía en un caos, cuando me sentía acorralado y abatido, mi lugar favorito, mi refugio.— Nunca terminé de entender ¿por qué de todos los lugares del mundo en los que posees propiedades tu destino favorito es este pequeño pueblo? en un país tan...— Ten cuidado con lo que dices, los argentinos se destacan por defender su patria ante todo insulto, créeme son personas pasionales, no solo con su patria, su equipo de fútbol e incluso con su forma de pensar, te puede salir caro menospreciarlos, además, mira a tu alrededor, montañas con cumbres nevadas, bosques casi vírgenes, lagos que guardan un encanto especial y a cada paso una leyenda que oír de sus indígenas, te enseñan a ver la naturaleza de otra forma. El Bolsón es un lugar mágico, toda la Patagonia lo es. — Trato de que mi amigo
Leonardo: — Dime ¿qué te parece? — espero que el lugar sea del agrado de Kevin.— En verdad, la bebida y la comida es muy buena, aunque si la camarera supiera hablar inglés sería mejor, odio usarte como traductor, en especial porque estoy seguro de que no le pediste su número telefónico, mi castellano es escaso no lo hablo, pero lo entiendo.— Vamos, es solo una niña, si te gustan jóvenes ve por Amara, no ha dejado de coquetearte.— ¡Estás loco! ¿Sabes quién es su hermano? Alexander Scott, fue nuestro compañero en la universidad ¿acaso lo olvidaste?— No podría olvidar a un maldito como él, es por eso mismo, que te digo que ligues con Amara, él se burló de tu hermana, págale con la misma moneda. — y una vez que lo dije me avergoncé, ¿Cómo pude darle tal idea? Pobre chica, no tenía la culpa de que su hermano sea un desgraciado.— Suena tentador, pero todavía recuerdo la paliza que me dio cuando lo confronte por lo de Lisa, dicen que está aún más loco y violento desde que su prometida m
Florencia:No podía despegar mis ojos del hermoso hombre que tenía en frente, es como si me hubiera embrujado.— ¿Leonardo? ¿Qué haces aquí? — parecía agitado como si hubiera corrido ¿caso, salió tras de mí?— Solo Leo, dime Leo por favor y la verdad… te seguí, no lo tomes a mal, pero te vi salir alterada y me preguntaba si estabas bien. — luce avergonzado por seguirme, se ve… tierno.— Sí, estoy bien o mejor dicho lo estaré, están en temporada alta, aún puedo conseguir trabajo, ya después veré, si me quedo o me voy.— ¡¿Acaso te despidieron?!— Renuncié no es lo mismo, algunos no estamos dispuesto a doblegarnos a los caprichos de los demás, algunos todavía tenemos dignidad.— No comprendo, ¿acaso mi invitación te causó problemas? — se ve realmente preocupado.— No, nada de eso, es por Elio, es el sobrino del dueño, no entiende que no es no, creo que se parece a tu amigo en ese sentido. — su rostro adquiere un tono sombrío, que incluso da un poco de miedo... ¿pero qué rayos hago hablan
Florencia:Pase toda la noche dando vueltas sin poder dormir, cada vez que cerraba los ojos veía el rostro de Leonardo, esa barba recortada a la perfección, sus labios que tentaban a besarlos, ¡demonios! ¡¿Que me pasa?! Me levanté temprano para salir a buscar trabajo, tomé mi guitarra, si no conseguía nada tendría que ponerme a cantar en la plaza, no me iba nada mal cuando lo hacía, pero necesitaba un sueldo fijo para ayudar con la renta de la cabaña.Estuve caminando un largo tiempo, estaba sumida en mis pensamientos cuando alguien tocó mi hombro, al girarme lo vi, Dios todo poderoso, ¿acaso podía ser aún más hermoso con la luz del sol? Creí que lo había visto bien anoche, pero no fue así, Leonardo es el hombre más hermoso que he visto.— Hola. — Me mira con una hermosa sonrisa Blanca y yo por unos segundos no sé qué contestar.— Ho— Hola Leo. ¿Qué haces aquí? — Parezco tonta hablando así.— Vine por ti, quisiera pedirte, mejor dicho, quisiera contratarte por el fin de semana, a parti