Un cliente inesperado.

Mansión Robinson. Semanas después.

—¿Que haces dando vueltas como león enjaulado Adele?—La señora Robinson baja las escaleras y ve en el semblante de su hija una enorme frustración.

—¿Por qué estoy así? ¿Por qué madre? ¿Te parece poco que hayan pasado semanas desde que mi novio pidió mi mano y no nos hayamos vuelto a ver?—objeta cruzándose de brazos muy enojada. Entonces se deja caer al sillón. La señora Robinson respira hondo.

—Si, a mi también me parece muy raro. Y esta maldita criada que no aparece.

—¿Crees que están juntos mamita?—Adele hace un berrinche de padre y señor nuestro.

—No digas estupideces Adele. ¿Acaso no me conoces? Investigué dónde está tu prometido, está fuera del país, trabajando. La criada no está con él. Solo que me parece una falta de interés estando recién comprometido. Es todo. Mi preocupación por la criada no tiene que ver con la ausencia de Brown.

—¿Estás segura mamá? ¿No estará con ella?—dice mordiendo su labio.

—Muy segura. Ahora lo que quiero es a
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo