— Mi hijo no está en peligro y ustedes tampoco, lo juro Cielo, mientras estes conmigo nada le sucederá. — porque estarás conmigo por siempre, se dijo, pero no lo diría en voz alta, al menos por ahora.— Aun luego de todo lo que te he contado ¿no me echaras de tu lado? — pregunto incrédula.— Jamás,
La noche más larga de su vida, eso era lo que Gabriel estaba transitando, luego de llevar a Cielo a su habitación, bajo la negativa rotunda que de que no permitiría que compartiera habitación con Pamela, pues para el supuesto doctor eso era algo inaceptable y claro que no le diría que tenía más habi
— Gr- GGracies, Gracias. — casi grito lo último ante su lengua adormecida y Gabriel solo podía sonreír.Una sonrisa que guardaba muchas cosas, Gabriel salió de su edificio como un ser muy distinto al que había sido, sintió que al fin tenía mucho más, a pesar de tener a Ian en su vida, Gabriel tenía
— Bien ya me pongo a trabajar. — fue lo último que dijo Alan antes de cortar la llamada.Si que lo haría, Gabriel estaba seguro de eso, todos harían lo que fuese por mantener feliz a Azazel, o el infierno se desataría en la tierra.Cielo ingreso casi con miedo al gran baño que su jefe poseía en su c
Gabriel ingreso en la residencia Zabet-Ángel, la mansión era tan enorme que se asemejaba a un castillo moderno, en el fondo la pequeña casa que su padre Hades había construido se veía desolada, pero bien cuidada, el escáner de retina funcionaba a la perfección y eso evitaba que dependieran de extrañ
— Primo. — dijo de forma agitada el ruso.— ¿Estas follando? — pregunto casi riendo Azazel.— ¿Tú que crees? busque a mi mujer por 10 años y durante ese tiempo solo mi mano fue mi amiga, tenemos que recuperar el tiempo perdido ¿Qué rayos quieres? — pregunto agitado por ver y sentir como su esposa en
Cielo despertó tan temprano como de costumbre y no puedo evitar avergonzarse al percatarse que tenía las bragas completamente mojadas, por lo que corrió al baño, quitada de la pena por ocupar un lugar que no era suyo, y ni sentirse abrumada al ocupar las cosas de higiene personal de su jefe, porque
— No me molestas Cielo, es todo lo contrario. — si le hablaba de amor estaba seguro de que lo electrocutaría, aunque no tuviera su picana a mano, seguro y salía a comprar una. — Tu… tu presencia me tranquiliza. — por alguna razón ella le creía, quizás porque el tenerlo cerca, ella también sentía cie