— Tienes razón, cuando nos casemos le diré que puede renovar la cocina a gusto de ella, creo que le gusta cocinar, ¿o debería contratar una cocinera? Quizás, comprar una mansión, creo que le gustara tener jardín. — Ian comenzaba a preocuparse por su padre, no sabía lo que era el amor, o como se cons
— Mientras nuestros padres acomodan todo, podrías mostrarme tu habitación como lo deseabas anoche.— Si.La pequeña era un alma libre, cargada de energía, desde que se levantaba hasta que se dormía, eso quedo más que claro cuando tomo la mano de Ian y corrió por el pasillo, hasta su cuarto.— Esto e
— El tío hizo gritar a mamá como cuando tiene sueños feos, y la hizo llorar… me dio mucho miedo. — Ian abrazo mucho más fuerte a la niña, y su mano subió y bajo por la pequeña espalda, de manera tosca, pero, aun así, trato de imitar lo que su padre hacia cuando él no se sentía bien y funciono.— ¿Sa
Cielo quito los panques de arándanos de la mesa y los llevo a la heladera, lo que menos queria la joven es que Ian pudiese usar el desayuno de Pamela como medio para deshacerse de ella, estaba tan concentrada en ello, que no se percató que Gabriel seguía cada uno de sus pasos, pues la joven no solo
— Si pasas toda un anoche llorando, no puedes pedirme que no me preocupe. — un león, silencioso y audaz, eso era su jefe, pues no lo vio acercarse, hasta que el pecho de Gabriel choco con sus brazos frente a ella, solo sus brazos impedían que Gabriel se amoldara a su figura y nuevamente su corazón c
Gabriel:El móvil continuaba vibrando en mi saco y poco me importaba, mi secretaria podria pasarse todo el día llamando, no pienso atenderla, Teo&Ely se podía ir al mismo infierno, el mundo en general podria arder en llamas y me importaría una m****a, porqué alguien había lastimado a mi mujer, y tod
— Mejor revíseme aquí en su sofá, me coció la cabeza ayer en este mismo lugar. — eso me enfada, no que ella se rehusé a ir a mi cuarto, aunque ya había pensado como devorarla, lo que me molesta es que en menos de 24 horas mi bollito de azúcar esta herida nuevamente.— De acuerdo, solo si me dices la
— ¿Él te golpeo? — no lo podía posponer más, debo saber si tengo que desempolvar solo mis cuchillos y arma o si también debería ir por mis juguetes de tortura, un taladro, unas pinzas, aunque también podria hacer pequeños cortes y llenar la habitación de ratas, dejar que lo devoren vivo y deleitarme