Irina intentó salir huyendo, pero se estrelló de frente contra el cuerpo de su hermano, lentamente giró la cabeza y al darse cuenta de quien se trataba, apretó los labios y negó con su cabeza.

—No, por favor tú no, déjame ir, recuerda que soy tu hermana, si nuestro padre ha perdido la cabeza, lo mínimo que espero de ti es que no me ataques, no me obligues a estar con alguien que claramente tiene intenciones de hacerme daño.

»En el fondo eres una buena persona, nuestro padre fue quien se encargó de hacer de ti lo que ahora eres, dime, ¿acaso eres feliz actuando de esta manera, actuando como él te ha hecho pensar que es lo mejor?, no tienes libertad, simplemente haces parte de sus hombres.

»Si fueras importante para él tu situación sería diferente, solo mírate eres uno más de sus esbirros que en cualquier momento se va a deshacer de ti, como hoy lo está queriendo hacer conmigo —Irina buscaba convencer y hacer entrar en razón a su hermano.

—Mejor cierra la boca, porque nada vas a logra