Los rayos de luz ingresaron con fuerza a través del cristal de la ventana golpeando de frente contra el rostro de Irina, lentamente abrió los ojos, estiró su cuerpo, luego de aquella fogosa terapia que había recibido se sentía agotada, giró la cabeza en búsqueda de su amado, al instante exhaló con fuerza.Levantó las dos manos y las llevó sobre la cabeza, en aquel momento se sintió molesta, lo mínimo que llegó a esperar era que él se encontrara a su lado una vez que despertara, apretó los labios preparándose para aquella nueva vida, aquella donde su esposo sería eso, un esposo frío y vacío sin detalles para ofrecer.Luego de unos pocos minutos más tarde la puerta de la habitación se abrió, Irina levemente levantó la cabeza, sus ojos se abrieron de golpe sintiendo culpa por haber pensado de aquella manera sobre Dmitriy. —Hola preciosa, me levanté siendo cuidadoso para traerte un detalle, claro está que mereces muchas cosas más, pero esto era lo mínimo que podría ofrecerte luego de tod
Una semana más tarde. La propiedad se encontraba decorada como nunca antes, las niñeras se habían hecho cargo de hacer que los dos pequeños vistieran de manera elegante; en cuanto a Dmitriy, bueno, él ni siquiera había dormido pensando en lo que se vendría. Todo era un alboroto, pero finalmente estaban listos para salir, Dmitriy subió en uno de los autos acompañado de sus hijos, había soñado con que llegara este momento, pero el hecho de estarlo viviendo hacía parte de un sueño. Dmitriy tomó el móvil y se comunicó con su mano derecha, se mostraba impaciente, necesitaba estar al lado de su esposa, tomar su mano y saber que estaba sana y salva.—Sí —respondió Ivan.—No quiero mostrarme impaciente, solo estoy llamando para estar al tanto, ¿cómo se encuentra ella, como van las cosas? —Ivan llevó la mirada atrás, se brindó una leve sonrisa a la esposa de su jefe indicando que todo estaba bien. —Todo va según los planes señor, están haciendo los últimos retoques, te aseguro que la prote
Dmitriy trataba de mantenerse calmado, los invitados comenzaban a hacer comentarios nada agradables, no era para menos, ya que el retraso era bastante notorio y difícil de ocultar.El teléfono móvil sonó, Dmitry al instante llevó la mano al bolsillo y dio respuesta.—Señor, algo grave ha sucedido —al escuchar aquellas palabras el rostro de Dmitriy cambió al instante, llevó la mirada hasta el lugar donde se encontraban sus hijos, ellos estaban allí tomados de la mano en espera de su madre, tragó saliva tratando de tomar aquella noticia con responsabilidad.»No puedo dejar a mis hijos a la deriva en este lugar, iremos a casa, nos veremos allí —Dmitriy terminó la llamada, se dirigió hasta donde se encontraban sus hijos, indicó a las niñeras que fueran a los autos, ellas al instante obedecieron su orden. Dmitriy salió por la puerta de atrás junto con sus hijos y el resto del personal que se encontraba a su disponibilidad; los autos a toda prisa se dirigieron hacia el lugar más seguro, Dm
Nikolay se encontraba en la propiedad de Andrei, luego de la muerte de su padre las cosas no sucedieron como se tenían planeadas; fue puesto bajo las órdenes de Andrei, allí era tratado como uno más de sus hombres.Lo peor fue que todo lo que le pertenecía a Fedor ahora se encontraba en las manos de Andrei, lo que Nikolay había soñado manejar como heredero, solo tuvo que ver como aquel despiadado hombre arrasaba con todo. Mientras que Andrei se mostraba desesperado y ansioso dando vueltas en la sala, Nikolay de manera cautelosa se dirigió a la habitación principal, al abrir la puerta Irina se asustó, a su alrededor no había nada para defenderse, así que solo intentó salir huyendo.Para su desgracia, el único lugar disponible era el baño, pero al darse cuenta que se trataba de su hermano, frunció el ceño y se acercó a él lentamente. —¿Qué haces aquí? —indagó Irina con sorpresa, lentamente levantó el brazo y colocó la mano sobre el hombro de su hermano.—Solo vine a verte antes de que
Irina se encontraba justo al lado de la ventana disfrutando del brillo de la noche, las lágrimas rodaban por sus mejillas, mientras recordaba a sus hijos y por supuesto a Dmitriy, finalmente estaba feliz porque había encontrado el amor verdadero, y era la madre más orgullosa del mundo. Su única escapatoria era su hermano, pero al ver que simplemente se había dado vuelta comprendió que estaba sola y su destino era morir a manos de Andrei, el frío de la noche era intenso anunciando la desgracia, el sueño había desaparecido.Irina lo único que deseaba era estar de vuelta en su hogar junto a sus seres queridos, poder contraer matrimonio con el hombre que amaba, vivir junto a ellos felices y lejos de tanta maldad.La puerta se abrió de golpe, Irina dio un pequeño salto, Andrei nuevamente ajustó la puerta y se quedó estático observándola fijamente, Irina comenzó a temblar, no quería morir, pero esa era su única salida. —Por favor Andrei, no me hagas daño, no te he hecho nada malo, el culp
Nikolay sabía perfectamente que al haber cometido aquella estupidez su vida la había perdió, pero en el fondo de su corazón el amor de hermanos fue más fuerte; sentía miedo, al estar frente de aquel hombre sin rostro.Andrei nuevamente llevó el pasamontañas cubriendo sus heridas profundas, sosteniendo en la mano aquel arma cortopunzante, dio unos cuantos pasos en dirección a dónde se encontraba Nikolay.—Sabía que eras una basura, igual que tu padre, solo son unos cobardes, unos traicioneros, tu fin será tan doloroso que te arrepentirás de haber permitido que Irina saliera de la habitación —Amenazó Andrei.—Tú mismo te has buscado este final, como si fueras el puto amo tomaste todo lo que dejó mi padre, y no suficiente con ello me has tratado como si fuese el perro leproso, el cual solo recibe desprecio y siempre está excluido. »Devuelve lo que era de mi padre y luego saldré de este lugar como si nunca te hubiera visto, de aquella manera los dos saldremos ganando, tú podrás ir tras d
Dmitriy, el amo de la mafia.Moscú/ RusiaLuego de un largo viaje Dmitriy se encontraba de regreso en su país, estiró el cuerpo y acomodó su traje una vez que descendió del avión. Los autos al igual que sus guardaespaldas esperaban por él, debido a su oficio lo único que lo hacía feliz era estar al lado de su esposa.A la distancia su hombre de confianza se acercaba velozmente mostrando en su rostro preocupación, en la mano sostenía el móvil.—Señor...—¿Qué sucede?, ¿por qué actúas como si fueras un novato? —indagó mostrando su frialdad mientras se acercaba a uno de los autos. —He recibido una terrible noticia —Dmitriy continuó avanzando sin mostrar importancia, lo único que deseaba era estar en su casa y abrazar a su esposa—. Señor... Se trata de tu esposa —al escuchar aquellas palabras él sé detuvo.—¿Qué sucede con ella? —Dmitriy giró su cuerpo quedando frente a su hombre de confianza.—Yendo de regreso a la casa fueron interceptados, acabaron con los hombres a cargo de su segur
En cuestión de segundos en la entrada principal de la casa de Fedor se había desatado una terrible balacera; Dmitriy un experto a mano armada con sus dos pistolas derribaba hombres sin temor a morir. Dmitriy ingresó a través de la puerta principal quedando frente a unos cuantos hombres que apuntaban directo a su cabeza con armas de largo alcance. —Quietos, quietos todos —ordenó Fedor con aquel tono de voz ronca. Dmitriy con la mirada lo buscó, allí se encontraba él sentado cómodamente en el sofá disfrutando de una botella de whisky. —Maldito hijo de puta, ¿cómo pudiste acabar con mi esposa?, ¿por qué lo hiciste maldito desgraciado? —cuestionó Dmitriy mientras que su cuerpo temblaba de coraje. »Ya habíamos repartido el territorio, habíamos quedado que ninguno se pondría en el camino del otro, pero lo que has hecho ha condenado tu vida al igual que la de toda tu familia, porque juro que hasta que no vea al último integrante de tu familia tirado en el piso sin vida no me iré de