★Scott.

Salí muy molesto de la oficina, Dylan es un maldito idiota.

Subí a mi auto y me moleste al ver a Montserrat.

“Maldito, imbécil, me sacó sangre de la nariz.” Comenté mientras Montserrat se miraba en el espejo.

“¿No sabes dónde está esa mujerzuela?” Preguntó mientras se aplicaba el labial color mierda en la boca.

“No, pero lo averiguaré, cariño, ese labial no te queda, mejor usa el rojo.” Ella sonrió y se desmaquilló, aunque ninguno le va bien, ella no es Hanna. Suspiré profundamente y puse en marcha el auto.

“¿Sabías que mi hermano y Hanna estarán viviendo juntos?” Preguntó ella mientras se aplicaba el nuevo tono en los labios.

“¿Ella está aquí?” Ella frunció el entrecejo por mi pregunta, si ella ya sabe que solo es una mujerzuela no sé de qué se ofende que pregunté por Hanna.

 “Sí, ¿No lo sabías?, Viajó con Dylan y tú ex suegra, que también es mi ex suegra, la muy zorra pidió vacaciones.” ¿Hanna de vacaciones? Eso es imposible, es una adicta al trabajo cuando me casé con ella