Luego de desayunar juntos, Ethan y Kate se quedaron en silencio, ambos sin saber qué decir. Ethan se sentía mal por haberse aprovechado de la situación, según él, y obteniendo placer sin antes haber resuelto las cosas, pero Kate no pensaba lo mismo. Las hormonas del embarazo la tenían vuelta loca, y aunque sabía que Ethan se sentía culpable y que además tenía razón en que deberían resolver su relación antes, ella la verdad no sentía ganas de esperar, no quería esperar, quería tenerlo otra vez. —Ethan… hagámoslo de nuevo. —Soltó sin miedo, dominada por las hormonas, demasiado envalentonada para echarse atrás. —¿Q… qué? ¿Y nuestros hijos? ¿Y el trabajo?—Eso se resuelve fácil. —Tomó su celular y le marcó a Rachel para que no dejara que sus hijos los buscaran, que inventara que estaban ocupados o algo así. Rachel no era tan dulce e inocente como Marie, de inmediato entendió todo, le mandó el emoji de un guiño y le deseo que se divirtiera mucho. —En cuanto al trabajo, Mirian me
Aun después de otra ronda, Kate e Ethan no sentían ganas de parar y ahora Kate quería jugar a un juego que tenían de novios, uno que de hecho Ethan no recordaba muy bien.—Disculpa, tendrás que repetirme de nuevo de qué se trataba eso, Kate…—Bueno, es que teníamos un pequeño juego aparte cuando jugábamos este juego en particular… en el celular o en la consola, que a ti no te gustaba mucho jugar juegos pese a ser tan bueno pero a mí me encantaba así que tenemos un nivel parecido y el juego es más justo, así que… creo que podríamos repetirlo ahora que tengo una consola aquí.Ethan alzó su otra ceja, comenzando a sospechar de qué se trataba ese pequeño juego aparte, y sin poder negar su curiosidad y sus ganas de comprobar si lo que creía era cierto.—Imaginó que esto es algo que sí me puedes decir, ¿o no?Ella abrió los ojos con sorpresa, aparentemente sin haberse esperado su interés en el tema.—Bueno… —Carraspeó con fuerza—. Pues es simple. El ganador puede hacer lo que quiera con el
Cuando ambos se despertaron, ya más calmados de las hormonas y de tanto haber recuperado el tiempo perdido en eso años que estuvieron separados y además odiandose el uno al otro, llenos de frustración, entonces ahora que sentían el ardor y desesperación del deseo bajar, ahora empezaron a sentirse un poco avergonzado por todo lo que habían hecho. Incluso habían faltado al trabajo solo por quedarse a… recuperar el tiempo perdido, algo que en el pasado hubiera sido totalmente impensable e inaceptable para los dos en el pasado. Los dos siempre fueron personas muy profesionales, ambos siempre fueron muy trabajadores y responsables con su trabajo, y ahora se comportaban peor que cuando eran adolescentes, ya que en su adolescencia eran más responsables con la escuela y los trabajos de medio tiempo que tenían, más por que Ethan era el más responsable de todos los que conocía y siempre le contagió a Kate su sentido de la responsabilidad y la inspiró a hacer tan profesional como él, aunque…
Pasaron unos días y ya todo estaba arreglado para que Ethan y Kate fueran a terapia. Irían a terapia tanto cada uno por su lado como en pareja, esto utilizando al mismo terapeuta, aun que Kate tenía sus dudas respecto a esto, pero la terapeuta que Ethan consiguió parecía muy profesional, ya la habían conocido y de verdad que inspiraba mucha confianza. Fueron a verla antes de decidir que ella sería la que se encargaría de su caso, y la mujer les dijo que era decisión de ellos si querían tener distintos terapeutas para cada uno y un terapeuta para la terapia en pareja, o sí querían un terapeuta distinto para cada caso en particular, que ella tenía una gran experiencia con parejas y que estaría encantada de recibirlos a ambos, pero que era decisión de ellos. Para mantenerse coordinados y para que el terapeuta tuviera todo en mente a la hora de aconsejarlos, Ethan y Kate decidieron que tendrían la misma terapeuta para todo. Kate iba a ser la primera en ir con la licenciada Jessica
Kate no le contó todo en el primer día a la terapeuta Jessica, pero sí pudo desahogarse bastante y sí pudo comunicarle su deseo de sanar mentalmente, deseo que estaba por encima de querer retomar una relación con Ethan, cosa d e la que no estaba nada segura en verdad. Y al día siguiente fue el turno de Ethan. Como él estaba algo ocupado por su trabajo, la terapeuta fue a su empresa, ya que en el área de recursos humanos tenían un lugar designado a tratar problemas de índole de salud mental, y en su descanso él fue a hablar con la terapeuta. La oficina era pequeña, pero no por eso menos bonita para atender a sus empleados.Las paredes estaban pintadas de un suave tono de azul claro, evocando una sensación de calma y serenidad. La decoración era mínima, con solo algunos cuadros de paisajes naturales y colores suaves que invitaban a la relajación. En una esquina, una pequeña estantería de madera exhibía algunos libros sobre psicología y bienestar emocional, junto con una colección d
Era el día, el día de su primera sesión de terapia juntos, y claro que Ethan y Kate estaban bastante nerviosos al respecto, los dos, aunque en diferentes medidas. Ethan estaba mucho más nervioso que Kate, eso era algo que ella pudo descifrar con bastante facilidad al ver su rostro normalmente serio embargado de un profundo sentimiento de angustia. Mientras esperaban frente al despacho de la terapeuta, él no dejaba de abrir y cerrar los puños, gesto nervioso que Kate había visto muy pocas veces en él, como cuando se la pasó toda la noche sentado en una incómoda silla de hospital mientras ella tenía ciertas complicaciones en su primer embarazo. Sin estar muy segura de sus acciones, estiró lentamente su mano y tomó la mano de Ethan lentamente en una de las suyas, sorprendiéndolo y haciendo que volteara a verla con confusión, a lo que ella le dio una pequeña sonrisa tranquilizadora que finalmente l o hizo tomar aire y recostarse contra la silla, comenzando a esperar con más tranquil
Mientras Ethan y Kate iban a terapia de pareja, sus hijos tenían sus propios problemas. Kitt había sido oficialmente nombrado el futuro capitán de su equipo de futbol, así que ahora estaba muy obsesionado en cuidar su salud para no tener que volver a enfermar y así no faltar a las practicas y partidos, aunque por el clima invernal eran pocos partidos, pero él se estaba esforzando al máximo para no faltar y estar sano y fuerte para cada uno. Iris notaba todo eso en su hermano y lo apoyaba al máximo. Como sus padres estaban tan ocupados con sus cosas, era ella la que iba a todos los partidos de Kitt y lo apoyaba en todo lo que necesitaba, pero la verdad era que tenía sus propios problemas, y esos problemas tenían nombre y apellido… Rich Vogelsberg. Aunque, para ser sincera, él no era su único problema. Su hermana, Rita Vogelsberg, también le resultaba muy molesta, siempre pegándose a Erick, siempre queriendo unirse a comer con ellos en el almuerzo, y claro que, al ver a su h
—Bueno, fue todo un placer pasar esta tarde juntos —habló Rich una vez los tres bajaron del auto, bajando la ventanilla para sonreírle a Iris que se detuvo a mirarlo con cansancio—. El baile será pronto, así que tus respuestas también vendrán pronto… y es curioso que tus primos hablaran de regalos y buena salud… lo que tengo que decirte tiene un poco que ver con eso… —¿De qué hablas, hermano? —preguntó Rita, pero Rich le dijo que no era nada importante y luego le guiñó un ojo a Iris. —Nos vemos en el baile, mi lady. Estoy segura de que esperaras el momento con muchas ansias. —Sin más se fue junto con su hermana para llevar a los primos de Iris a su casa, dejando a Iris resoplando, pero sin poder negar que en verdad sentía muchas ansias por esas respuestas. Vio la mirada confundida de Erick, vio que quería hacerle preguntas, además de seguramente querer reclamarle por, según él, “llevarse bi en con ese niño rico insoportable” pero rápidamente lo paso de largo y corrió a su casa.