Después de alimentar a la bebé, Sam regresó al dormitorio de su supuesto esposo, Daniel estaba sobre la cama, sólo llevaba una toalla envuelta en su cintura, tal parece se bañó y se durmió sin alcanzar a secarse por completo.
- Se veía cansado… quizás que hizo todo el día.. no secó su cabello apropiadamente.- lo tocó de forma inconsciente.
Daniel despertó con el toque y le dedicó una mirada profunda que le quitó la respiración. Cogió su mano y la tiró hacia su cuerpo, quedaron cara a cara.
- Es tarde, necesitas dormir….- le acomodó el cabello detrás de la oreja.
- Sólo vi que tenías el cabello húmedo… no malinterpretes…- reconocía la habilidad de Daniel de trastornar sus nervios. Se movió hacia su lado de la cama.
- S&iac
Estaba perdida en la intensidad de esa mirada, ¿ qué tendría de malo un beso? ¿ qué tendría de malo?- Sólo uno… y…-No pudo continuar la frase porque Daniel ya le había silenciado, sus labios eran suaves y calientes, su aliento olía a café, se sentía dulce, los brazos de su esposo la estrecharon con más fuerza y la levantó dejándole en punta de pies.Samanta se sujetó del cuello de Daniel, disfrutaba del beso, recordaba como besar, sacó la punta de lengua para su asombro, él hizo lo mismo, lo recibió sin dudarlo, su interior era suave y dulce.La mano traviesa de Daniel se movió a un glúteo y lo apretó con fuerza, el ambiente se estaba calentando, la mujer abrió los ojos y un sonido extraño emanó de su garganta, esos dedos seguía
- ¿ Vienes aquí a jugar?- Le preguntó mientras caminaba hacia ella con sus largas piernas.- Sí… necesito distraerme un poco.- encestó una canasta.- Jugar sola no debe ser muy entretenido.-- No es lo mismo que un partido.-- ¿ Por qué dejaste el basquetbol?-- Soy el reemplazo oficial de mi hermana mayor en la empresa.-- ¿ Eso es desde siempre?-- Desde que se casó.-- Entiendo…-- Me gusta jugar pero no soy tan buena como para representar una selección.-- Tengo curiosidad… ¿ qué tal una apuesta?- se quitó la chaqueta de deporte.-- ¿ Dinero? Paso.- siguió encestando sin fallar.- ¿Qué tal ésto? si tú ganas haré lo qué quieras.-- ¿Me harás los trabajos de fisiopatología?- se arriesgo a pre
Pensó su respuesta unos segundos.- No pareces ese tipo de persona.- se masajeo los hombros.- Necesito dormir… despertaré a las cinco a estudiar.-- ¿Quieres que te despierte?-- ¿Te quedarás estudiando?-- Tengo una presentación de caso a primera hora.-- Eso suena complejo.-- Más o menos, ¿ cómo sigue la señora Braun?-- Ya está en casa de su esposo, le dieron el alta pero no puede volver a sus actividades regulares.-- Es esperable, el accidente fue grave, ¿ encontraron al conductor del auto?- tenía excelentes modales para comer.- Sí, mi cuñado ya puso a sus abogados a trabajar en el litigio.-- Ojalá pague con cárcer.- deseó el chico.- Sería lo justo, mi hermana casi muere y su hija se salvó de milagro.- recordar esos días, era revivir una pesadilla
- Daniel… verás…-- Tranquila… no estoy enojado contigo, es conmigo mismo, puedes recordar a un hombre que viste en un viaje, pero a mí… - pasó rápidamente de estar enojado a una expresión de desolación.-- Ni yo misma sé, por qué no recuerdo nada de ti y esta casa, por eso quería recuperar mi teléfono y buscar información entre mis contactos.-- No sé como reacciones a las noticias de internet, algunas son verdad otras son falsas…- trató de justificar su sobreprotección.- Daniel, soy una adulta, te agradezco que me quieres proteger, pero necesito pistas para que mi memoria se restablezca.-- ¿ Pistas dices? ¿ Sabes los celos qué siento de ese hombre que puedes recordar?-- ¿ Celos? ¿ Tú?- no lo recordaba, pero algo en su pecho le decía que esas palabras eran la
La expresión melancólica del hombre que le tenía abrazada le puso inquieta.- Disculpa…me vine muy rápido…no es normal que yo…- más que triste estaba avergonzado.- Quería que fuese un poco más largo pero estaba tan emocionado dentro de ti que perdí la concentración.-- Esta bien… me gusto… puede ser esperable… ¿ estabas nervioso?- era imposible, pero quiso indagar al respecto.- Lo estoy… no sabía si me rechazarías…- se sentó para que hablaran- Aunque legalmente estemos casados, nunca te he obligado a tener relaciones conmigo, no podría hacerte eso.-- ¿ Yo te obligué alguna vez?- le preguntó Sam.La pregunta le sacó una carcajada a Daniel- Eres tan frágil que te habría inmovilizado sin problemas, no te gustaba hacerlo por obligación, incluso
- ¿Podemos hablar un momento madre?- Daniel se escuchaba nervioso.- Claro.- se sentó en el sillón.Daniel se sentó a su lado.- Quiero que volvamos a tener la relación de antes, Samanta te necesita, quizás no recuerda la relación de ustedes, pero eras alguien importante.-- ¿ Me dices que puedo ir a visitarlos ?-- Sí.-- ¿ Sigues creyendo que yo mandé a matar a Lisbeth?-- No tengo pruebas, sólo el relato de Lisbeth, hay información confusa a su alrededor, cambio su apellido de mansilla a Jones, desapareció por tanto tiempo.-- Daniel, yo no sabía del accidente, me sorprendió tanto como a ustedes verla con vida.-- Todavía estoy investigando madre, sólo quiero que Samanta se sienta cómodo, por eso te permito que nos frecuentes.-- Gracias Daniel, deseo ver a mi nieta, sólo l
Daniel estaba inclinado hacia ella, con un brazo a cada lado, la pregunta le dejó pensando unos segundos.- No es mi problema, sólo si quieres traerla a casa, te dije que está prohibido traer mujeres o las fiestas.-- Lo recuerdo perfectamente, ¿ sólo es por eso?-- Sí…- se quedó pegada mirando los labios de Ariel, recordó ese beso en el cuello en ese momento, aún así, se atrevió a tocarle los labios.Ariel sabía que estaba bajo efecto del medicamento para dormir, era como si estuviese ebria, esos ojos fijos en sus labios era una tentación.- ¿En qué piensas?-- Tus labios son muy bonitos…-- ¿Te gustan?-- Un poco… ¿no me diste un beso en la boca por qué no sabes besar?-- ¿Piensas qué fue por eso?- Eres tan estirado que no debes besar bien…
- Lo siento, no lo sabía.- no esperaba esa respuesta de la joven.- Tranquilo, es normal que no lo sepas, siempre fui muy acelerada, despertaba al borde de la hora y me atrasaba para ir al colegio, me regañaba porque no comía lento.-- Debió ser difícil para las tres vivir solas.- manifestó el moreno.- Al principio nos costó organizarnos, mamá asumió ambos roles y tomó el cargo de la empresa como presidenta, después de que mi hermana se casó le entregó todas las responsabilidades a Samanta, tiene una depresión mayor, así que decidió jubilarse y disfrutar la vida.- ¿ Cuántos años tenía la señora Samanta cuando asumió la compañía?-- 20 años, apenas terminaba la licenciatura, entre medio sacó el doctorado.-- Era muy joven.- abrió los o