Narrador: Robert salió del hospital con una determinación renovada: sorprender a Rafaela y conquistar su corazón. Ya no iba a dejar pasar un día más sin hacer algo al respecto. Conocía todas sus rutinas, y esta vez no se le escaparía, ella sus días libres solía visitar una montaña, amaba la naturaleza, no era de sus actividades favoritas pero por ella estaba dispuesto a cambiar sus gustos. Pero, antes de enfrentarla, necesitaba el outfit perfecto. Era Robert Landon, después de todo,estar a la moda era su religión. Se dirigió a un centro comercial de alta gama, en l sección de deportes donde compraría un conjunto que haría que Rafaela se derritiera incluso si esta era solo ropa de senderismo mientras probaba una y otra cosa esperando encontrar la combinación perfecta, se miró en el espejo y se rió de sí mismo. , se dijo conforme con lo que adquirió: - Un par de botas de senderismo impermeables y resistentes - Un pantalón de trekking ligero y flexible -
AXEL: Estos meses han sido un remolino de emociones con todo lo que les ha tocado vivir a Thomas y Helena, por ello ahora prácticamente vivo en Nueva York, haciendo que la sucursal de mi empresa también vaya creciendo, no me quejo del éxito que vamos teniendo. Suspiro en el trayecto al aeropuerto, escuchando música de Pablo Alborán, hoy es de esos días en los que suspiro y pienso que nunca me he enamorado, pues soy un alma libre, no me considero mujeriego ya que siempre hablo con la verdad, no me gusta ilusionar a mujeres, que piensan que por una buena noche de pasión soy de los que se enamora. Por mi alma dura y mi actitud implacable me conocen en el mundo de los negocios como el CEO de Hielo, quizá tengan razón y sea porque mi corazón quedó congelado, desde que perdí a mis padres en un trágico accidente, apenas tenía 17 años y tuve que madurar para que me tomaran enserio y no permitir que robaran el imperio que mi padre creó. Soy hijo ún
AXEL: Aunque siento que le molestó mi comentario mantuvo su postura de niña mimada con su primo, Derek la abrazó, con ella en brazos me dijo: —Axel te invitamos a cenar— dijo muy animado. La pequeña en sus brazos me miró retándome. — Gracias, con gusto aceptaré— le dije sonriendo. — Emily está por llegar y vamos los cuatro— dice. — Vicky vas a conocer a mi novia te encantará— le dijo muy emocionado. — si la elegiste tú es porque es una buena mujer Dek, ya quiero conocer a mi prima— dijo también feliz, dándole una mirada de ilusión, una muy sincera. Al cabo de poco tiempo llegó Emily, al conocerla quedó encantada. —Eres muy hermosa Emily— le dijo otra vez mostrando sinceridad, la conocía poco tiempo pero ya podía identificar cuando se mostraba realmente sincera. Cabe recalcar que desde ese momento Derek y yo fuimos completamente ignorados. Derek y yo fuimos en mi auto mientras que las rubias fueron en el de Emily. Llegamos primero al restaurante Japonés,
49. El pequeño Robert Narrador: Robert se sentía en las nubes al ser correspondido por Rafaela. Le encantaba pasar por ella las mañanas para ir juntos al hospital. —Buenos días, cariño —dice al llegar al auto, para dejar un suave beso en sus labios. —Buenos días, hermosa, me encanta verte cada mañana —le dice Robert muy cariñoso. Siempre fue delicado y suave con las mujeres, pero con Rafaela era realmente sincero. Un hombre cambia, no por dar gusto a una mujer cualquiera, sino por poder estar a la altura de la mujer a la que ama. —El amor nos hace mejores personas —era la frase que alguna vez escuchó de su madre y que ahora cobraba mucho sentido. Rafaela era una mujer muy fuerte, pero bastante humana. No es que tuviera mucha experiencia en cosas del amor, o que esperara un príncipe azul, pero lo que sí estaba segura es que se daría cuenta cuando llegara su verdadero amor, solo con la mirada, esa en la que podía reflejar su imagen y hacerla sentir como la joya más h
Narrador: Ver a la pequeña familia reunida esperando a su primer hijo, a pesar de haber vivido muchas dificultades que hasta hoy han superado, fue el mejor de los espectáculos para quienes han vivido con ellos de cerca el amor y la tristeza. Con un aplauso emotivo, uno a uno ingresaron a la habitación de Helena: Timothy y Elizabeth, padres de Thomas; Emily y Derek, acompañados de Victoria, a quien llevaban de lado a lado como una pequeña niña; Robert de la mano con Rafaela; y el solitario Axel junto a la tierna anciana Carmelita. Todos aplaudían con alegría. Entre risas y lágrimas, Thomas agradeció a todos por su ayuda y por cuidar tan bien de Helena. Con impensable gratitud, miró a Robert. —Gracias, Robert, por salvar la vida de mi bebé. No le pondremos tu nombre, pero te has ganado el derecho a ser llamado tío —dijo con humor. Todos rieron con alegría. —¡qué mal! —respondió Robert, fingiendo pena. —El mundo necesita otro Robert, tan atractivo como yo— dijo con t
Thomas Todo lo que he vivido en estos últimos meses ha sido una montaña rusa de emociones. Una hermosa tarde de otoño, el 2 de noviembre para ser exactos, experimenté la mayor alegría de mi vida: el nacimiento de mi hijo con Helena, el amor de mi vida. Es increíble cómo al ser padre, el amor evoluciona a muchos niveles. Cuando piensas que no podrías amar más, llega tu hijo y te demuestra que el amor aún sigue siendo infinito. El susto que viví al ver a Helena inconsciente y pensar que podría perderla me enseñó a valorar y vivir con más intensidad cada minuto que tengo la dicha de respirar y ver a mis dos seres más amados, Helena y Eliot. Fui yo quien le dio el nombre a mi hijo, buscando un hermoso significado a todo lo que él representa en nuestras vidas. Lo llamé: ELIOT CARSON, mi primogénito, mi heredero, quien tendrá la sabiduría y el liderazgo para ser un gran hombre y continuar con el apellido CARSON. Es un guerrero, de espíritu inquebrantable. Lo demo
AXEL: El trabajo en mi empresa está yendo de maravilla, estoy con nuevos diseños de autos a los cuales aplicaré tecnología de la empresa de Thomas, quien me ayudará para posicionarme como el mejor diseñador de autos. No puedo dejar de mirar por mi ventana la movida ciudad de Nueva York. Me siento como si estuviera atrapado en un remolino de emociones, y no sé cómo escapar. Victoria ha sido una presencia constante en mi vida, aunque no siempre hemos tenido un contacto directo. Pero basta con que esté cerca para que mi mente se vuelva un caos, he llegado a pensar bien si más que molestarme sus bromas me molesta su indiferencia y el trato tan frío que me da como “señor” , aunque le he dicho mil veces que me llame Axel. Esos ojos verdes, ese rostro angelical... me hacen sentir como si estuviera flotando en una nube de fantasía. Y cuando se ríe, es como si el sol hubiera salido en mi mundo. Me hace sentir vivo, me hace sentir que hay algo más allá de la rutina diaria y las v
Narrador:El Hospital Derek era un hervidero de actividad constante, un escenario perfecto para los mejores talentos médicos. Entre esos talentos brillaban Robert y Rafaela, dos estrellas en ascenso. Ambos, destacados no solo por su pericia médica, sino por la conexión que compartían, eran la envidia de sus colegas. Siendo médicos destacados cada uno en su área, sus jornadas eran maratónicas, pero encontraban en el otro una especie de bálsamo para las tensiones de sus días.Aunque Rafaela era todo lo que Robert alguna vez pensó que no necesitaba era inteligente, seria, íntegra y con una paciencia inquebrantable, además de extremas atractiva, ella había hecho lo impensable: había conquistado al hombre más mujeriego del hospital.Robert, el mismo que antes coleccionaba conquistas como si fueran trofeos, ahora solo tenía ojos para Rafaela. No fue una transición fácil; los chismes en el hospital no ayudaron, pero Robert estaba decidido a demostrar que ya no era el mismo. Rafaela lo compl