Sebastián.
Estoy en la biblioteca, escucho como abren la puerta es mi hijo Iván, entra y se sienta en el sillón frente a mi, trae una cara de fástidio.
-Que tienes Iván.
-Tengo que viajar a México.
-Y no es la primera vez que te mandan hablar ¿Cuáles el problema?
-Me asignaron a otra secretaria y tengo que ir por ella, no se por que se empeñan en darme una yo solo puedo con el trabajo.
-Es solo una ayuda hijo.
-Son un estorbo solo se quejan es mucho trabajo, asé frío, porque no puedo ir, quiero salir sola, puras quejas.
-Y que quieres que yo aga.
-¿Quieres ir con migo?
Iván ya es un adulto pero se sigue quejándo como un niño. Seré mi libro y me levanté, empese a caminar a la salida.
-Te espero en el auto.
En todo el camino solo tuvimos conversaciónes triviales. Al llegar al aeropuerto nos espertaban barios agentes, se nos asercaron.
-Buenas tardes señores lo sentimos por aserlos venir asi tan rápido, solo quiero decirles que las cosas de su nueva secretaria ya están en la camioneta, los llevaremos a su hotel.
-No, recresaremos hoy mismo a Rusia.
-Si señor Iván. Por favor sigan nos.
Los empesamos a seguir al auto, cuando Iván subió le dieron una carpeta, supongo que es la información de su nueva secretaria. Abrió la carpeta y los empeso a leerlos, solo voltio los ojos y dio un suspiro, me les extendió yo los tomé y también los miré.
Nombre del agente: Anastasia Montilla.
Puesto asignado: secretaria.
Edad:28. Nacionalidad: mexicana
Solo eran cosas básicas, nada para destacar, ni incluyeron foto en el archivo, talves Iván tenga razón solo será una más que renunciara. Lo voltie a ver.
-Dale una oportunidad aquí dice que sabe barios idiomas y sabe usar la computadora.
-Todas sabían aser eso padre y todas terminaron igual.
El auto se detuvo frente al gran edificio, yo lo miro por la ventana no puedo creer que mi hijo sea un embajador de mi gran y poderosa Rusia, estoy lleno de orgullo, todo mis hijos aman a su nación cada uno lo demuestra a su manera. Iván me saca de mis pensamientos al bajarse del auto, al bajarme miro a una pequeña dama que se dirije así nosotros.
Es bastante bajita pero tiene un bonito cuerpo, su cabello es risado, corto y de color café. Mi hijo nos presenta y ella asé lo mismo, yo tomo su mano y beso sus nudillos ella se sonroja y miro sus ojos son de un hermoso verde oscuro. Iván se va y la deja hay parada, el se sube al auto, tendré que hablar con él más tarde, le abro la puerta a la dama, el camino de regreso es callado, ella se queda dormida en el avión.
Anastasia.
Me despierto cuando siento que alguien me tocó un hombro, abro los ojos y lo primero que miro es al señor Iván, se mira un poco molesto, que le habré hecho para que se enoje conmigo.
-Ya hemos llegado toma tus cosas y baja.
Miro cómo se retira por el pasillo, intento tomar mis cosas pero por lógica no las puedo alcanzar para mi suerte el señor Sebastian todavía no se retira, él me da mis cosas.
-Muchas gracias señor Sebastian.
-Descuide señorita por favor.
Destiende su mano hacia el pasillo y me deja pasar a mi primero, al salir del aeropuerto estaban tres camionetas negras iguales estacionados, miro como varios hombres se acercan la señor Iván y empiezan a hablar entre ellos, pero no les entiendo han de estar hablando en ruso, al parecer da varias indicaciones, el me voltea a ver y me indica que me aserque.
-Bueno todo están listo ya vamos.
Okay subo al auto y miro como los demás suben mis maletas, el señor Iván sigue sin hablarme, el auto empieza su marcha, solo miro por la ventana, se ve la plaza roja, muchas tiendas así es durante un buen rato, es cuando empiezo a ver árboles estaremos saliendo de la ciudad, entramos a una vereda y llegamos a una gran casa, el señor Iván se baja yo me bajo por el lado del señor Sebastian.
El señor Iván se dirige a la puerta y la abre para nosotros.
Anastasia.Entró a la casa junto con ellos y miro cómo empiezan a quitarse los zapatos, esto me parece extraño y solo me les quedó viendo, el señor Iván se percata de mi curiosidad por lo que están haciendo y se aclaro la garganta.-Señorita Anastasia aqui én está casa hay ciertas reglas que usted siempre debe de seguir la primera y más importante cuando usted salga y entre de nuevo a esta casa se debe de quitar los zapatos eso es una costumbre rusa ya que muchas de las calles no están en muy buen estado hay lodo, barro y a veces nieve eso aruina los pisos y hay muchos cuartos que tienen alfombra, se quitará los zapatos y los pondrá en este estante de aquí y se pondrá estas pequeñas pantuflas entendido.Este hombre que grosero es, yo asiento con la cabeza y me empiso a quitar también las zapatillas las puse donde me indico y me puse las pantuflas.-Segunda regla de la casa señorita Anastasia no quiero gritos ni ruidos fuertes de ningún tipo. Usted trabajará d
Anastasia.Después de esas agradables palabras que me ha dicho mi nuevo jefe miro cómo sale de la oficina, cuando lo pierdo de vista doy un suspiro de frustración y pasó mis manos por mi cara, este hombre es un fastidio, es grosero, es idiota, es desesperante que se cree la quinta deida o algún duque, un rey, es odioso.No es tiempo de darse por vencida querída, arriba esos ánimos, agarré esos papeles los firmare y se los métere por la garganta, me dirijo al escritorio y efectivamente hay estan el juego de papeles nuevos, los tomé y los firmo claro después de leerlo, después de eso dirijo mi atensión hacia los grandes estantes, me acerco a ellos y empecé a revisar los libros decidí empezar a arreglar este lugar por aquí.Sebastián.Miro como Iván se lleva a la pobre señorita, me siento en la sala y doy un suspiro, eso de ir y venir en avion es un poco cansado o será mi edad, no lo creo es cansado, sigo siendo joven, dirijo mi atención a Iván qué vienes
Anastasia.Me despierta la alarma de mi celular, me retuerzo entre las cobijas de mi cama son tan suaves y calientitas, es cuando abro los ojos me siento en la cama y pongo mis manos en mi cabeza, aguarden a qué horas subí a mi habitación no recuerdo haber subido. Hay dios espero que no me haga encontrado el señor Iván si de por sí me odia y ahora con eso doy un suspiro, me tallo mis ojos y me estiró un poco, decido levantarme y hacer mi rutina diaria.Al salir de mi habitación un delicioso aroma a comida hace que mi estómago ruja así que decidió bajar las escaleras para entrar al comedor, me encuentro con el señor Sebastián leyendo un periódico y a Natacha en la estufa cocinando, llegó me siento y saludo amablemente.-Buenos días señor Sebastian.El baja el periódico lo dobla y lo pone en la mesa.-Buenos días señorita Anastasia.Natasha pone un plato en frente de mí, se mira realmente delicioso el desayuno, voltei hacia ella y le sonrío.-
Anastasia.Sigo trabajando hasta que me percató de que ha empezado a bajar el sol, me levanto del asiento y me dirija al comedor, tengo hambre al llegar hesta el señor Sebastian sentado comiendo llegó y me siento.-Disculpe la tardanza.-Descuida supuse que seguías trabajando.Llega Natacha y me pone un plato en frente le sonrío de nuevo y empiezó a comer.-El señor Iván no ha vuelto.-No él por lo general se toma muy enserio su trabajo aveces no viene, o se encierra en su oficina y se olvida que tiene que alimentarse como un ser humano normal.-Oh ya entiendo.-Lo necesitabas para algo.-No solo era curiosidad.La cena transcurre normalmente el señor Sebastián se levanta y se despide yo termino de comer y vuelvo a mi oficina, sé que mi hora de salida es a las 4 solamente pero quiero terminar la mayor cantidad de trabajo posible.Sigo trabajando miro mi reloj las 10 creo que esto será suficiente por hoy, me leva
Anastasia.Todo este tiempo se me ha hecho largo y un poco tedioso en verdad, ya tengo el mes. Estoy comiendo de nuevo sola con Sebastián es rara la vez que su hijo come con nosotros hoy es mi dia de descanso el señor Sebastián llama mi atención.-¿Dígame señorita Anastasia qué va hacer esta tarde?-No mucho señor creo que leeré un libro oh mirare una película.-No le parece un poco aburrido que le parece si sale a pasear conmigo.Es extraño el señor Sebastián es educado pero nunca me había invitado a salir algún lado, sonrío la sola idea me gusta.-Señor me parece bien.-Después de comer nos iremos le parece bien.-Me pareció espléndido señor.-Por favor no me llames señor me hace sentir más viejo llámame Sebastian.-Está bien en ese caso solo llámame Anastasia.-Así lo haré.Después de la comida nos levantamos y nos dirigimos los dos a la puerta al abrirla como siempre estaba alguien de seguridad parado, parec
Sebastián.Voy a pasear con Anastasia es muy agradable, alegre y relajada creo que es asi cuando no está en el trabajando, le gustan mucho los libros, la cultura y el arte es una mujer muy culta.Sé que esto que voy aser no está bien pero espero poder controlarlo esta vez. Me detengo enfrente de un bar, ella voltea y me mira raro.-Quiero celebrar que has durado con nosotros.La convencí y bajamos, al entrar está un ebrio cerca de la puerta, se le queda viendoa Anastasia de pies a cabeza pone una cara lujuriosa.-Pero mira que nos ha traído el gato una linda ratoncita, bonito cuerpecito chiquita.Anastasia solo se le queda viendo, no me gusta que se dirijan haci a las mujeres pongo mi mano en su espalda y la adentro más en el bar, quiero alejarla de ese tipo es repugnante. Al sentarnos en la mesa le hago una seña al mesero que nos traiga una botella, le sirvo a ella y me sirvo yo, doy el primer trago y se siente tan bien, volver a probar el vodka,
Anastasia.Ya preparada mental y físicamente bajo las escaleras y me dijo a su oficina, tocó un par de veces y escucho un adelante, me abre la puerta Sebastián, me mira con pena y dice con los labios un lo siento yo le sonrío.-Pasé señorita Anastasia.Ivan me habla, lo volteo a ver y está muy molesto, paso y me siento.-Dígame señor.-Se divirtió anoche cierto, me informan que se fueron sin escolta y regresaron pasadas las 12 de la noche, ya que yo llegué a las 10 y no encontré a ninguno de los dos, no me importa que haya estado haciendo pero en serio señorita meterse con mi padre que bajó cayó.Esta suponiendo que dormi con su padre, doy un suspiro mantener la calma.-Hijo eso no es cierto no pasó nada.-Padre por favor no te metas y retírate de la oficina.-No permito que me hablas así sigo siendo tu padre.-Si sigues siendo mi padre pero ella es mi empleada y yo haré lo que quiera con ella.Ok este hombre me colmo
Anastasia.Póngo mi atención a la ventanilla, por lo menos esta vez no me tocó ir en el medio, Iván va enfrente manejando y Sebastián va de copiloto, me percató qué la camioneta de atrás se atrasa y se parquea, es extraño, luego antes de salir de la vereda otra camioneta choca con la de enfrente. Iván frena el auto.-Pero qué díantrés está ocurriendo.Hay no miro como de la camioneta bajan dos tipos armados y fusilan a los guardias, rápidamente me desabrocho el cinturón y me acerco a Ivan.-Rápido meta reversa o acelere.-Pero de qué estás hablando.-Haga lo que le dije.-No me hables así.Miri al frente nos apuntan.-Dígame qué el vidrio es blindado.-Si.Miro cómo empiezan a impactar balas.-Nueva sé.-De qué estás hablando.-Que se mueva carajo el vidrio no aguantará tanto tiempo.Meto la mano abajo del asiento lo recorro todo para atrás, tomo a Iván y lo empujo al asiento trasero, me siento