¡En fin, la hipocresía!Amanda…No entiendo por qué mi nivel de masoquismo me está haciendo tan mala pasada, he visto con mis propios ojos lo que mi esposo me hace y sigo sin aprender, siento que es un espejismo, la frustración me invade y no paro de llorar, en mi interior mi subconsciente me pregunta ¿Qué hago todavía con Christopher?, mis lagrimas siguen cayendo de manera involuntaria…- ¡Listo, de nuevo en su lugar de origen! - Carlos se voltea y me dice mientras me extiende un clínex para limpiar mis lágrimas y de paso sacándome de mis pensamientos.-Gracias Carlos, entonces nos veremos en dos días nuevamente- ¿Seguiremos persiguiendo a su marido? - Él imprudente pregunta- ¡Pues si ¡¿Luego qué? Usted preocúpese por recibir el dinero en su cuenta Carlos, no se impertinente-Señora Amanda, lo decía porque iba a comprar una nueva caja de pañuelos, pero está bien, no diré una sola palabra más. Lo que dijo y como le dijo me causo gracia, muchacho irreverente, ¿así era con todas sus c
La raza humana somos la peor especieEra difícil para mí ocultar lo que ya sabía, no comprendía como Cristopher era capaz de actuar sin corazón, aún seguía con su plan de dejarme en la calle para poder huir con su amante, lo peor, es que ella pensaba que se habia ganado un gran premio por tenerlo a él como su pareja, no sabía a lo que se estaba enfrentando, ¡¿qué iba a garantizar que a ella no la fuera a dejar por otra mujer?!las personas con el comportamiento como el de él, jamás cambiaran, así tengan a su alrededor los mejores seres humanos dándoles lo mejor de sí mismo. El egocentrismo y la falta de empatía por los demás ha hecho que por generaciones los seres humanos caigamos en decadencia.Cristopher seguía actuando como si fuéramos una familia feliz, estaba convencido de que estaba haciendo las cosas bien, podría seguir estándolo. Así me iba mantener hasta que me pagara cada una de las lágrimas que me habia hecho derramar.Pasaron tres días, se llegó el día en que mi marido iba
Lucia debe unirse a mí, o ese hombre va a acabar con las dosEsa noche el descarado de mi esposo llegó como si nada hubiera pasado, seguía comportándose amable y amoroso, inclusive me beso, el muy hipócrita después de haber besado a su segunda amante, estaba segura de que no existía una persona más descarada que él.- ¿Cómo estuvo tu día cariño? - Trato de no ser irónica al preguntar, él debe seguir pensando que estoy inocente de todas sus malas actuaciones.-Espectacular cariño, no te imaginas, estoy agotadísimo- Se acuesta sobre su codo mientras me mira a la cara, quisiera coger el jarrón que estaba en mi mesa de noche y estrellárselo en la cabeza “por mi mente paso la imagen de mí misma golpeándolo con tanta furia, haciendo que su cráneo se parta en dos, lo veo como se revuelca en su dolor y la sangre corre por su frente, mientras me suplica que no lo golpee más”. Pero me contengo ese miserable no valía la pena, yo solo quería que estuviera en la ruina y disfrutar de su dinero, lo
Conociendo un poco más a mi choferLlegamos al restaurante más hermoso de la ciudad, como se notaba que Carlos era el conductor de la clase alta, si es que conocía los mejores lugares, y actuaba con total etiqueta y glamur, que podría confundirse con alguien de un estrato alto sin ningún problema, aunque yo no tenía problema en absoluto con su procedencia, me agradaba como persona, y eso era lo que realmente importaba.No sentamos en una de las mesas ocultas del lugar, por no tener reserva no pudimos ajustar los mejores puestos, bien por la clase elitista, son discriminativos hasta con los que son iguales que ellos, pudimos habernos ido del lugar, pero Carlos es demasiado decente y me convenció de quedarnos allí, y pasar desapercibidos.- ¿A qué se debe la invitación señora Amanda? - pregunta Carlos extrañado-A que estoy feliz Carlos, y gracias a su ayuda he logrado muchas cosas estos días, así que bien merecido se lo tiene. Por mi puede pedir lo que desee, vendrá buenas recompensas
Pobre Lucia…Los siguientes días pasaron en total tranquilidad, mi esposo seguía de viaje con su pequeña amante, no habia hablado con Carlos, no tenía un trabajo en específico para él, y después del último encuentro siento un poco de vergüenza por lo que paso esa tarde-noche, para mí fue maravilloso, pero suponía que él estaba acostumbrado a ese tipo de eventos, pues a pesar de no ser un gigolo, todas mis amigas lo contrataban para que fuera su acompañante, al spa, a la peluquería, de compras, a hacer algunos trámites bancarios, entre muchas cosas más que la gente rica hace a diario, y como no apreciar su compañía, si es que era maravilloso.Una llamada me saca de mis pensamientos… ¿Lucia?-Hola Amanda, ¡ayy!, perdona que te llame, pero no tengo familia en la ciudad, y el imbécil de tu marido esta con su amante, rompí fuente, Samantha debe quedarse con él bebe ¿podrías ayudarme en el hospital por favor?, al menos mientras nace mi hijoLa voz de Lucia me sorprendió, un escalofrió recor
Lucia acepta el trato, es increíble lo que hace CristopherCarlos llega al hospital unos pocos minutos después de que lo llame, esta vestido totalmente diferente a lo que lo hace normalmente, esta con una camiseta deportiva ceñida al cuerpo, un pantalón deportivo oscuro y unas zapatillas, su cabello esta desordenado y sus mejillas rosadas.-Hola señora Amanda ¿Cómo esta Lucia?-Ho… hola, Carlos, muchas gracias por estar aquí, es que me siento mal con la situación, y pues necesito una copa, ¿quieres acompañarme?-Claro que si señora Amanda, ya por el día de hoy estoy libre, vamos – Carlos me extiende el brazo para que lo coja de gancho.Salimos del hospital como si fuéramos un par de amigos que nos conociéramos de hace tiempo, puedo notar que su brazo es bastante musculoso, hago una mueca con mi boca, me siento nerviosa, pero me encanta, me encanta sentirlo.Contrate un conductor elegido para poder llevar mi auto y salimos a un bar que queda fuera de la ciudad, pedimos un par de copas
¡Que empiece el juego!Decidida a continuar con el plan en contra de Cristopher, ahora quiero saber quién es la amante que tiene pensado dejarnos en la calle a Lucia y a mí, hablaba también a su nombre, porque ahora ella quien más tenía derecho sobre todo lo de mi marido, y es que a decir verdad, con los arreglos que logre hacer legalmente antes de que mi marido ejecutara su macabro plan, yo tampoco iba a necesitar nada de dinero, tenía mi propio negocio gracias a mi padre, y estaba segura de que yo podría manejarlo, aunque no habia trabajado nunca gracias a que me dedique a mi hogar, jamás he dudado de mis capacidades.Después de una intensa conversación con mi abogado acerca de lo que puedo hacer en contra de mi marido, regreso a mi casa, quiero compartir un poco más con mis hijos, por estar pendiente de Cristopher, he descuidado mi hogar.Cuando entro a la casa, mi marido y mi hijo están jugando videojuegos en la sala de estar, siento como un leve fastidio me invade, no acostumbr
Me gusta lo que estoy haciendoDespués de mi furtivo encuentro con aquel joven, mi corazón estaba totalmente acelerado, estaba nerviosa, tomo mi teléfono y me doy cuenta que tengo un sinfín de llamadas perdidas y mensajes, unos eran de mi marido, otros de mi hija, y unos que se me hacían bastante extraños, Lucia me estaba escribiendo, decido responderle rápidamente a Camille, que estaba preocupada por mí, a mi marido que estaba desesperado por no saber en donde estaba metida, y ahora proseguía con ella, para responderle debía tener el cuidado posible, pues en una mala coherencia mental , podría responder algo de lo que me pudiera arrepentir.-Hola Amanda, sé que no debo estar molestándote, pero se por Samantha que estas con Cristopher de viaje ¿no se supone que ustedes dos están mal? no entiendo a que estas jugando mujer, me propones algo, luego mira con lo que sales, ya sabía yo que no debía creer en ti.Leo el mensaje que me ha dejado Lucia, trato de sentir un poco de remordimiento