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LA VERDADERA AMANTE DE MI MARIDO

LA VERDADERA AMANTE DE MI MARIDO

Después de la reunión que tuvimos con Samantha y al descubrir que ella no era la amante de mi marido, me pongo en la tarea de averiguar quién es la verdadera amante, la duda me estaba carcomiendo y lo peor es que Cristopher actuaba como el mejor de los esposos, mi corazón dolía en realidad, me encantaría que el fuera así por amor, no por interés, yo amaba tanto a mi esposo, era mi único amor, pero el amor propio, en esta oportunidad debe prevalecer, así que tendré que aprovechar cualquier mínima oportunidad para sacar información.

Últimamente he hecho un poco de dieta y ejercicio haciendo que mi figura este más marcada, mi esposo se ha dado la oportunidad de verme un poco más y según él me admira más cada día que pasa, pero es mentiras. ¡lo sé!

“Querida, llevamos mucho tiempo sin intimidad, déjame tocarte un poquito esta noche, de verdad que me haces falta- estamos acostados en nuestra cama, por lo general nunca llega temprano, pero estos últimos días sí, estoy leyendo un libro y se acerca a mi dándome un beso en mi hombro.

-Cristopher, aún no me siento preparada, por favor. - le digo para poder apaciguar sus ganas, pero por dentro estaba deseosa de volver a ser amada por el guapo de mi esposo, y es que sentía celos por que le hiciera maravillas a su amante y a mi simplemente me ignorara, pero últimamente me rogaba por sexo, y eso sí que me hacía sentir con el poder

-Querida, no sabes cuanto te extraño- sigue dándome besos desde mi hombro hasta mi cuello, me está haciendo sucumbir ante sus encantos y caricias, siempre un as en la hora de la pasión.

No me pude resistir, mi cuerpo lo deseaba y aunque mi corazón sabia sus negras intenciones, se estaba esforzando para que yo creyera su farsa, y en esta oportunidad lo estaba haciendo en exceso, empecé a sentir sus manos recorrer mi cuerpo, solté el libro de las manos, y me deje llevar, cuando menos me di cuenta mi esposo esta sobre mí, apropiándose a su manera de cada uno de mis senos, su boca me saboreaba como la primera vez, esta vez pude sentir la verdadera pasión con la que me besaba, y su entrepierna rosaba la misma causándome una exquisita sensación y es que para quien es un secreto que hacer el amor con la persona que se ama o la que se desea es sentirse en el verdadero paraíso, y yo encontraba las dos cosas en él, yo lo amaba y lo deseaba.

Poco a poco sus besos fueron recorriendo mi cuerpo, desde arriba hasta llegar a mi monte de venus, mis manos solo lo guiaban hasta donde yo quería que llegase, olvide cada dolor que me estaba causando y me deje llevar más por el placer ,  que por el amor , me abrí de piernas para él y deje que su lengua hiciera maravillas en mi intimidad, en serio disfrutaba cada uno de sus besos, porque los sentía de verdad, sentía que el los daba con amor, y sobre todo con gusto, luego de recorrerme y absorber cada uno de mis jugos, llega hasta mi cara, me besa y siento como está dentro de mí, haciéndome gritar de placer, fueron pocos minutos los que necesitamos para que estuviéramos ahogados en un profundo orgasmo.

-Amanda, quiero que me perdones por todo el daño que te hecho durante los últimos años-Cristopher me lo dice mientras me caricia aun sobre mi pecho

-No tienes que fingir, sé que solo querías sexo y estuvo bastante bien, si abra divorcio, pero no voy a perjudicar tus negocios con mi padre- estar con él me habia hablando del corazón y la mejor solución en ese momento en lugar de una cruel y larga venganza era una negociación.

-Querida no me quiero divorciar de ti, lo contrario quiero estar más a tu lado.

Nos abrazamos fuertemente, también le correspondí, era mi compañero de vida por muchos años y aunque en los últimos tres años se habia convertido en un maldito imbécil, eso no borraba los once que realmente me hizo feliz, así de mal estaban las cosas conmigo, que era tan capaz de justificar sus errores.

Aproveche que se quedó profundamente dormido después de la faena, cogí su celular que estaba con bloqueo de huella y con mucho cuidado le tome su dedo y allí estaba, acceso total a su mundo de tesoros escondidos.

Y con el buen refrán del que busca, siempre encuentra, pues ahí estaba, el chat con su amante, mi quijada casi se cae al ver la foto de ella, era la mujer con la que lo habia descubierto la segunda vez hace un año, siéndome infiel, mejor dicho, no la dejo nunca, pero también le fue infiel con la jovencita que lo encontré la tercera vez ¡desgraciado!

Lo peor de todo es que se trataba de la mamá de Samantha, lo supe porque en varias ocasiones le decía que tenía que acabar de pagar la universidad de su hija, pero lo que más me impacto fue lo que leí después

-Mira Cristopher, he aguantado por más de 3 años ser tu amante, tienes tres meses para que te separes de la insípida de tu mujer, o de lo contrario sabrás de mí, además de no dejarte ver este bebe que viene en camino, ¡tú decides!

-Querida, no me amenaces más, yo ya sé que es lo que tengo que hacer, ya Amanda está convencida de mi amor por ella, así que en pronto caerá, me firmará los documentos y tú y yo nos iremos junto a nuestro hijo fuera del país si así lo deseas

- ¡Mas te vale!, yo también merezco la vida de reina que esa estúpida lleva.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y sentí mi estomago arder, quería matarlos a los dos, aprovechar que estaba allí dormido y enterrarle un cuchillo, pero el miserable no valía la pena, tomé nota del número de teléfono de la mujer, y volví a dejar su celular en su mesa, esa noche no pude dormir, mi cerebro y mi corazón estaban a mil, no sabía qué hacer y cómo reaccionar, pero debía ser más inteligente que ese par de idiotas.

Al día siguiente con las ojeras que me llegaban hasta las rodillas, los nervios destrozados y las esperanzas desechas, tome la valentía suficiente para hablar con mi abogado personal, hable con mi padre e hice todo lo posible por que mis bienes quedaron bien respaldados, si se iba a divorciar de mí, no obtendría nada.

Convencí a mi padre de seguir con el negocio con Cristopher, pero firmando unas cláusulas que sabría que el muy confiado no leería, estaba convencido que era lo mejor de nuestras vidas.

Días después de hacer todos esos trámites, seguía actuando con el cómo la esposa más amorosa del mundo, entre los dos solo brotaba las mieles del amor, y aunque él estaba fingiendo los dos éramos quien lo hacíamos ahora, porque poco a poco le iba perdiendo el amor que algún día sentí incondicionalmente por él.

Finalmente me decidí y tecleé el número de su amante y le envié un mensaje

- ¿Sabes quién soy yo? - puse la mejor foto de perfil que habia podido poner, sé que me leyó porque aparecía la confirmación, solo me dejo en visto

-Responde, o te han comido la lengua los ratones, o mejor ¿mi marido te comió tanto que hasta sin habla te dejo?

Mi corazón se aceleró cuando veo en el chat... escribiendo… escribiendo

Entre mi pensaba m*****a lenta, así eres para todo

-¿??? Muévete a responder- Rogaba porque no me fuera a bloquear igualmente le llamaría, si hacia eso

-Si, si se quién eres, no te puedo negar que soy la amante de Cristopher, bien ya lo sabes todo, pero solo quiero que sepas que no voy a dejar a tu marido, estoy embarazada de él, tengo seis meses de gestación y por ninguna razón lo dejare, él se va a separar de ti, ¡bruja!

- ¿Crees que me interesa que un traidor como mi marido se quede a mi lado?, por supuesto que no, quiero proponerte un trato

- ¡A mí no me salgas con estupideces mujer!, el cuento de un trato es reforzado, ¿sinceramente piensas que te voy a creer? -Al leer sus mensajes me daba cuenta de que simplemente yo estaba hablando idioteces ¿Cuál trato? Si no sabía qué le iba a decir donde me preguntara que era, m*****a sea, piensa rápido Amanda

-Mira, yo sé que tu estas por mi marido solo por su dinero, él le paga la universidad a tu hija y te da absolutamente todo lo que quieres, lo sé por tus estados financieros, también se el plan que tienen para quedarse con mi patrimonio y largarse del país.

- ¡Ah si ¡, que astuta eres Amanda. - me envía eso seguido de unos emojis burlándose de mi

-Pues más astuta que ti si soy, porque todo lo que me pensaban quitar, pues ya no lo van a poder obtener, así que solo está el dinero de mi querido esposo, el cual tú puedes obtener todo si te alias conmigo, pero si no, me encargare de dejarlo en la absoluta calle ¿y adivina que queridita? Tu y tus bellos hijos no tendrán tampoco de mi dinero, solo tienes esas dos opciones

-Hablare con Cristopher m*****a loca, y le contare todas tus intenciones

-Hazlo, sería un gran favor que me harías, con eso tengo las pruebas que necesito para comprobar su infidelidad y hacer efectivas las cláusulas que tenemos, las acciones en la empresa de mi padre caerían a mi nombre y mi querido esposo quedaría en una quiebra de la cual tardaría financieramente unos seis años en recuperarse ¿lo amas tanto?

-Claro que lo amo y el a mí, no te saldrás con la tuya

-No sé, piénsalo querida, tienes una semana, analiza que tan grande es tu amor por mi esposo $$$ te garantizo que una alianza conmigo te saldrá mejor que ser una pobre ama de casa, cambiando pañales y buscando empleo para ayudar a su maridito en la quiebra.

- ¡Eres una m*****a! - Y su imagen de la foto de perfil desaparece, la descarada me había bloqueado.

Ahora solo quedaba esperar las consecuencias de mis actos, suspiro, pero ya lo que tenía que resolver económicamente, ya estaba hecho, así que esperare el duro golpe del reclamo de Cristopher.

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