Daryan desde que llegó al hotel no ha dejado de seguirle la pista a aquel hombre quien ha resultado ser un blanco para la organización por buscar a hijas de grandes empresarios para abusar de ellas de la peor manera.En algunos casos las graba como si ellas accedieran de manera voluntaria para extorsionar a sus padres, quienes para tapar la vergüenza son capaces de pagar lo quieran.Su apoyo ha instalado una discreta cámara frente a la puerta de la habitación del hombre, de esa manera saben cuándo sale y así Daryan puede seguirlo de inmediato. Algo que ahora mismo debe hacer.Esa es la hora en que la mayoría de los nuevos huéspedes ingresan al hotel, por lo que no le sorprende encontrarse al tipo fingiendo hablar por teléfono cerca del mostrador mientras elige asquerosamente a su víctima. Al pasar por su lado lo oye decir para sí mismo.—Parece que hoy ceno doble…Lo sigue a la salida sin perderlo de vista, por eso no se fija que choca con un pequeño cuerpo, sostiene a la chica antes
Hope se despierta y una sensación de vacío la embarga, se toca la muñeca derecha esperando que sólo haya sido un mal sueño, pero no es así, su pulsera ha desaparecido y no sabe en dónde pudo caerse.Se levanta y va al cuarto de su amiga, en donde la encuentra totalmente atravesada en la cama, sonríe al verla así, sigue siendo una niña en algunas cosas, pero al menos tiene más seguridad y las metas claras de su vida.—Vamos, arriba flojita, que hoy iremos de paseo por la ciudad.—Mmm… —es toda la respuesta que le da y Hope sonríe.—Nada de «mmm», iremos de paseo a la playa.Echa atrás las cobijas y se va de allí antes de que Bárbara le dé en la cabeza con una almohada. Se ríe un poco, pero lo cierto es que no tiene mucho ánimo. Pide el servicio al cuarto, se mete a la ducha y luego de colocarse ropa sencilla, sale a esperar la comida.Bárbara aparece despeinada, somnolienta y malhumorada, pero en cuanto ve la comida su expresión cambia enseguida.—¡Por eso te amo! —dice sacando unos de
Tras esos días tan liberadores e inspiradores para ambas, regresan a casa con las baterías recargadas, con ganas de hacer muchas cosas y, aunque no tuvieron un amor de verano, sus corazones ya vienen ocupados.Y es gracioso, porque en el hotel conocieron a dos chicos que eran primos, casi de las mismas edades de ellas, pero no quisieron nada más que una amistad, porque ninguno de ellos le llegaba a los talones a aquellos desconocidos.Por supuesto, ambos padres están en la pista de aterrizaje esperando a sus muchachas, Amaro levanta a Bárbara como si fuera aún una niña, Daryl sólo abraza a Hope, le deja un beso en su cabeza y le pregunta.—¿Algún chico del que me tenga que preocupar?—No, papi. El hombre que me gustó sólo lo vi dos veces y la segunda ya se iba —Daryl la mira con los ojos abiertos y ella se ríe—. ¡Si quieres que te mienta puedo hacerlo!—No, no… así está bien. ¿Y ese «hombre» tiene nombre?—Seguro que sí, pero ninguna de las dos veces que tropecé con él le pregunté cóm
Hope siente que quiere matarlo, todos esos días sufriendo por su pulsera cuando seguro él se la robó… de alguna manera.—Dámela —sisea ella, en ese momento Daryan vuelve a la normalidad, retira su mano con brusquedad y sentencia firme.—No.—¡Es mía! —ella vuelve a tomarle la mano, toma el dije entre sus dedos y se lo muestra—. ¿Ves allí? Dice «Hope», mi nombre… es mía y quiero que me la devuelvas.—Oye, ¿no crees que estás haciendo un alboroto por una simple pulsera de caracolas? ¡Lo único valioso que tiene es el dije!—Eres un idiota —le dice ella con enojo, Bastián abre los ojos y la boca, sorprendido por aquella palabra que sabe muy bien su amigo detesta le digan.—¿Qué dijiste? —dice él con ojo achicándosele, como si estuviese haciendo corto circuito.—Te dije que eres un idiota, el valor de las cosas no se las da el material del cual estén hechas, sino quien te lo dio o desde cuando lo tienes.—Ah, ya entiendo… te lo dio tu novio —con un toque de celos.—La pulsera la hice yo a
Hope llega por completo decepcionada a su casa, se negó a entrar de nuevo con Virginia a aquel lugar y tener que ver a Daryan allí, tal vez ligando a otra chica.Eso es lo que le ha pasado muchas veces, ver cómo los chicos que le despiertan un mínimo interés terminan saliendo con otras. Aunque ahora se siente peor, porque Daryan le gusta de verdad, muchísimo y pensó que tal vez podría llegar a besarla o…—No seas tonta, Hope. Ese es tremendo bombón para una caluga de leche como tú —se dice en voz baja mientras se sirve un vaso de agua.—No veo qué tienen de malo las calugas de leche —la voz de su padre la hace sonreír, se gira y ve cómo se acerca a ella con sus brazos protectores abiertos.—Son simples.—No, son sencillas, pero de simples no tienen nada, ¿tienes idea de cómo se hacen?—No y creo que tú tampoco.—¡Claro que sí! Antoine me hizo ver uno de esos documentales de comida, así que sí sé y te digo, las calugas de leche son más complejas de prepara que un bombón —se sienta en l
Hope dejó atrás a Daryan, según ella, porque el chico no volvió a contactarse de ninguna manera loca y extraña, así que pretende continuar su vida como si él hubiese sido cualquier persona en su vida.Es por eso por lo que en este momento se prepara para ir a la universidad. Luego de un buen desayuno junto a sus padres y sus hermanos, sale en uno de los autos que la trasladan a todas partes. Si bien su padre le enseñó a conducir, ella prefiere que la lleven, puesto que mucho tráfico la pone algo nerviosa, tener que estar al pendiente de ella misma y además de otras personas, el cómo conducen no es algo que le agrade, y menos para ir a la universidad.En el trayecto va escuchando buena música que le ayuda a relajarse, mientras tanto, va repasando el horario de este nuevo semestre y considera que es bastante liviano para todo lo que debe estudiar.Al llegar al campus le da las gracias al chofer y se da cuenta que un equipo de seguridad se ha quedado de punto fijo allí. Es que su padre n
En cuanto Hope echó a correr, Daryan sacó su bastón retráctil y le dio un golpe en la pierna al tiempo que le estampaba su puño en la cara al hombre frente a él. Los otros se abalanzaron para atacarlo, a uno lo redujo con una certera patada en el estómago dejándolo sin aire, pero el tercero le salió más duro de tratar.Con él comenzó a pelearse más duro, dando y recibiendo golpes, en un momento logra tomar ventaja, pero el hombre al que había dejado sin aire se siente más repuesto y se acerca a ellos para atacar a Daryan por la espalda. Logra meterle el codo de lleno en el hombro al chico, quien cae de rodillas, pero en lugar de dejarse abatir, toma a su oponente por la cintura, se impulsa hacia arriba y lo deja caer sobre el otro como costal de papas.Se levanta cansado y jadeando, pero con una sonrisa de satisfacción al ver a los tres tipos en el suelo. Se guarda el bastón y pasa por el lado de ellos tomando la dirección que Hope siguió hace unos minutos.Tres hombres de traje se ac
Las cosas para Hope están un poco raras por unas cuantas razones. Primero, han pasado tres días del atentado en su contra, porque de eso ya no se tiene ninguna duda, y aún la universidad no entiende cómo es que alguien llamó a la secretaria del rector, la única que puede dar una alarma así además del hombre, para decir que en uno de los baños de mujeres había una maleta olvidada.Segundo, por más que se intentó buscar en las cámaras a los hombres que intentaron llevarse a Hope, no había ninguna imagen que los mostrara, nadie había entrado a la oficina de seguridad así que, o el guardia estaba coludido con los atacantes o a distancia había intervenido las imágenes.Y tercero, Hope no está segura su tiene novio o no, porque de él no ha sabido nada en estos tres días y teme que los golpes que le dieron le hayan causado más daño del que ella creyó.—Lo encuentro increíble —le dice Bárbara mientras practica en el piano de la fundación sin seguir ninguna partitura… sí, como su madre.—¿Qué