Judas había logrado su venganza, pero aún teníamucho que suceder, pues el bien aún tenía fuerzas para luchary la guerra entre Judas y Jesús pronto llegaría a todos aconocer. Los noticieros estaban en la puerta del hospitaldonde estaba el papa, pero nadie decía nada. Los días fríos ytranquilos estaban llegando al fin, y todo podría suceder. Prepárense para el nuevo libro la guerra de Judas. Agradecimientos:Gracias a mi esposa, por todos los momentos. Que en nuestra memoria podamos recordar esos días brumosos, y reírnos de haber enfrentado todo esto ...A los amigos, los laureles de la victoria, los enemigos, el sabor amargo de la sangre, los que ya no tienen nombre, mis sentimientos, los que quedan vivos en mi memoria, el reconocimiento.
Dos mil años se pasaron, y la historia máscomentada en el mundo tomó fuerza, teniendo seguidoresdispuestos a morir por ella, y es así hasta los días actuales,pero la gran verdad, lo que nadie conoce de hecho, en fin,será descubierto, pues un grupo de estudiosos descubrió ellugar exacto de uno de los templos profanos. El lugar quemarcó para siempre el mundo. El árbol donde Judas seahorcó.La ciudad de Jerusalén además de ser la TierraSanta, prometida por Dios, también alberga el suicidio máscomentado y juzgado del mundo. Judas, después de entregara su maestro y verlo morir sin poder hacer nada, se mató - seahorcó -, de acuerdo con los relatos que la Biblia Sagradapredica.No sabemos con certeza lo que llevó a aquelhombre a matarse realmente, pero -en b
La mañana estaba fría, hojas secas caían por las ventanasde su casa, una majestuosa residencia, varias habitaciones,salones y baños. Antiguamente aquella casa pertenecía a losmiembros de la nobleza francesa, pero ellos deshacían de lacasa, para poder vivir en el campo, donde el aire era máspuro y la ciudad no quedaba tan cerca.El día en el calendario estaba marcado en rojo,gran día, veintitrés de mayo de dos mil y catorce. En lasimbología ocultista los números me decían mucho, y ese díatodo estaba favorable para el partido. Eliot miró por laventana y a lo lejos, avistó los coches de otros tripulantes dela expedición. Dos de ellos siempre fueron sus amigos, perolos otros dos apenas fingían, pues anhelaban el poder paraderribar a los líderes y así dominar la Orden.
Eliot caminaba con su equipaje de mano por laentrada del aeroportuario de París, uno de los más modernosen todo el mundo, esta vez los integrantes estaban en la claseeconómica, una forma de ahorrar los gastos de viaje, Eliotconversaba con Alfred que, nació en Inglaterra, pero conveinte años partió a Francia, fue a estudiar Artes, y en unaconversación con los amigos descubrió la Orden, ahora contreinta años ayudaba a los otros miembros a entender cómofuncionaba aquel centro de investigación, que más parecía unorganismo vivo. Sus características británicas eranasustadizamente aburridas a los franceses. Cabellos rubios,ojos azules y un perchón, siempre muy bien vestido y éltranspiraba arrogante hacia Francia.Los otros miembros nacieron en Francia endiferentes partes, pero no todos disfrutaban de parís, los otrostres miembros habían nacido cerca de la Riviera y latradición del sur de Francia es que el norte del país es malo
La mañana caliente y sofocada de Jerusalén se pusode pie, a las siete de la mañana estaba casi imposiblequedarse en la habitación sin el aire acondicionadoconectado, el calor del verano era un factor contrario para loscinco, ya que vinieron de Europa e incluso en el verano, elcalor no era tan fuerte como allí, el aire se encendió dejandolas habitaciones cómodas, cuando bajaron para tomar eldesayuno un colorante de aire caliente invadió el hotel, peroluego una brisa más fría pasó, caminando por los pasillos delhotel por el sueño todavía, Eliot y los demás se sentaron en elpequeño, pero acogedor comedor y comieron, algunasescenas bíblicas componían el restaurante, como unacantidad enorme de pan sirio y varias frutas.Mientras tanto en Francia dentro de la Orden elcelular del señor Byron tocó alto e interrumpió su discurso.- ¡Un minuto! - Él salió de la sala cerrando la puerta detrásde sí.- ¡Padre! Estamos en Tierra San
Las baladas de la campana de la catedral de NorteDame golpearon doce veces, el ruido de las campanas eraoído por el pequeño Christopher, que estaba acostadomirando a su pequeño teléfono, en la red social, cosas sinsentido, pero que hacían su mente no apagar, la cama cómodaempezaba a llamarle al sueño, cuando algo le despertó, unsímbolo cerca de Jerusalén estaba deslumbrado y ese símboloparecía mucho con uno dentro de sus libros.Él se levantó colocó la zapatilla y se fue hasta suestante, donde los libros de la Orden reposaban, la página fueencontrada sin dificultades y entonces el símbolo erarealmente parecido a lo que hallaron en Jerusalén, el chicopronto pensó que podría ser cosa de los demás, los maestrosque allí estaban y se puso a acostarse, el sueño pronto lo levoy a una tumba del siglo V, con las inscripciones antiguas,mezclado con cachorros.Ya en casa el señor Byron, limpiaba las gafas ymiraba a la gran chime
En Francia el maestro miraba a la televisión y veíaalgo que sus ojos no creían, el símbolo de las cruzadas estabaallí, mostrando que algo de mucho misterio se revelaría, perolo más instigador era la frase, que acompañaba el símbolo.El señor Byron llamó inmediatamente a su hijo, queno atendió al ciego, Eliot había salido sin el aparato, pues fuetodo muy rápido. El maestro miró una vez más al símbolotomando uno de sus libros.- El mundo necesita saber de ese secreto y no seráuna alerta de los que me sacará del foco principal. - - pensabaEliot al correr hacia el lugar, siendo guiado de cerca porAlfred, Eliot miró fijamente al amigo y cambiaron detrayecto, las calles de la capital de la fe estaban tomadas porvehículos de TV y radios de todo el mundo.Y en ese momento Eliot fue a la dirección de lapiedra y del símbolo, Fénix gritaba en su mente para dejarloquieto, pero Eliot no quería correr riesgos y fue él mismo verde ce
Christopher empezaba a aprender algunos secretosy eso dejaría a sus padres preocupados, pues el chico era muyjoven para algunos de esos misterios según los padres, quefueron creados por la iglesia católica, siendo que el regalo decumpleaños de Christopher fue ir al vaticano y de entremillones de niños en todo el mundo fue el elegido para hablarcon el Papa.Para Christopher la Orden no era para rituales einvocaciones la Orden funcionaba como el descubrimiento delas verdades ocultas de los hombres, cuando él fue alvaticano sintió algo tan fuerte que no quería salir de allí, unade las cosas que aprendió era que la propia ciudad delvaticano estaba llena de secretos, túneles subterráneos quellevaba a los más curiosos a descubrir algunas de lasverdades más escondidas.Él una vez notó que sus amigos no podían entenderlo que él hablaba, pero los más viejos lo entendíanperfectamente, pero algo había ocurrido en Jerusalén, pues