ADAM

Parecía que la vida se había detenido en el momento que acepté ir a un club nudista con Samuel; él se divertía como un niño pero yo seguía sintiéndome prisionero en mi propio cuerpo. Quería destruirlo todo, la joven mujer bailó lo mejor que pudo para llamar mi atención pero yo simplemente no estaba interesado. Era la primera noche libre desde que Ragnar se había encaprichado con la Reina Vampire.

Entendía su encaprichamiento, ella era todo lo que lo enloquecía; ella enloquecía a cualquiera, literalmente. Incluso nosotros a su lado somos pequeños muñecos con los que pudo jugar; pero su sangre no traería descendencia y será difícil que el aceptara a otra hembra, una de la misma raza para procrear.

La mujer que se me sentó en las piernas intentó meterme la lengua en la boca y solo la aparté para ponerme de pie.

-¡Vamos Adam!, diviértete un poco; estás demasiado tenso, ¿cierto chicas?. - las mujeres se reían de sus tonterías pero yo solo quería largarme. Quería pelear, correr y senti