CAPÍTULO 18: UN MOMENTO EN LA BIBLIOTECAGalicia suspiró cuando dejó a Akira en la habitación, la observó con frustración, aunque también despertaba ternura en ella. La joven loba tenía una inocencia que era difícil de ignorar, y aunque sus actos impulsivos la ponían en peligro, Galicia no pudo evitar sentirse conmovida por su curiosidad. Después de todo, ¿cómo podría negarle algo tan simple como un deseo de aprender?—Está bien —dijo finalmente, cediendo—. Te llevaré a la biblioteca. Pero será solo un momento, y no quiero que te metas en problemas, ¿de acuerdo?Los ojos de Akira brillaron de emoción. Aunque no podía hablar, su entusiasmo era evidente en cada uno de sus gestos. Asintió rápidamente, agradecida de que Galicia hubiera accedido a su petición.—Vamos —añadió Galicia, con una sonrisa apenas perceptible—. Sígueme.La loba blanca guio a Akira por un pasillo secreto, uno que serpenteaba a través del palacio y que pocos conocían. El aire se volvía más fresco a medida que avanza
CAPÍTULO 19: DISTRACCIÓNThane la miró con curiosidad y asombro mientras sostenía el libro antiguo en sus manos. Las palabras en las páginas, desconocidas para él, parecían bailar ante sus ojos. Lo que le sorprendía aún más era que Akira, con su modesta educación y sus limitadas oportunidades para aprender, pudiera entender algo tan arcano.—¿Cómo es que puedes leer esto? —preguntó finalmente, sin poder ocultar la fascinación en su voz.Akira, con su usual reserva, simplemente encogió los hombros y tomó su pizarra. Con trazos rápidos, escribió:“No sabía que era un idioma antiguo. Solo lo sé. No entiendo cómo, pero es como si siempre lo hubiera sabido”.Las cejas de Thane se alzaron ante su respuesta. Para él, esto solo añadía más misterio a lo que Akira representaba. Desde el primer momento en que la encontró, hubo algo en ella que lo había atraído, algo que iba más allá de su vulnerabilidad y la conexión predestinada que compartían y que él fervientemente se negaba a admitir.—Es...
CAPÍTULO 20: EL PRIMER ENCUENTROThane llevó a Akira a su habitación, un espacio amplio y opulento que reflejaba la autoridad y el poder que él poseía. A pesar de la grandiosidad del lugar, Akira apenas notó los detalles, pues toda su atención estaba en el hombre que la había llevado hasta allí. La atmósfera entre ellos estaba cargada de mucha tensión sexu4l, deseo, curiosidad y algo más profundo que ambos sentían pero, ninguno ponía en palabras.Sin decir una sola palabra, Thane la acercó a él, su mano se deslizó por su espalda hasta que sus cuerpos quedaron completamente unidos. Akira sentía cada fibra de su ser alerta, cada nervio encendido. Era consciente de la atracción que él provocaba en ella, una atracción que había tratado de resistir, pero que ahora era imposible de negar.Thane la miró por un largo momento, sus ojos buscaron respuestas en los de ella, pero Akira solo pudo sostener su mirada por unos segundos antes de que su propia intensidad la obligara a apartarla. La frag
CAPÍTULO 21: INVESTIGANDO AL REYGalicia llevó a Akira de vuelta a su habitación, caminando a paso firme por los oscuros pasillos del palacio. La loba blanca no decía nada, pero la tensión en sus hombros y la forma en que sus ojos se entrecerraban indicaban claramente que estaba molesta. Akira, por su parte, se mantuvo en silencio, sus pensamientos estaban más concentrados en el dije de su hermana, ese pequeño objeto que colgaba de la ropa del rey. Esa imagen no dejaba de repetirse en su mente, como una pesadilla de la que no podía despertar.Cuando llegaron a la habitación, Galicia cerró la puerta detrás de ellas con un movimiento brusco. Se volvió hacia Akira, sus ojos brillaron con preocupación y enojo.—¿Qué te pasa, Akira? ¿Por qué sigues haciendo esto? —la regañó, su voz contenía una nota de desesperación—. No puedes seguir escapándote así, esa costumbre te va a llevar a un mal final. ¿Entiendes?Akira asintió, pero sus pensamientos seguían en otra parte. Finalmente, se atrevió
CAPÍTULO 22: INTERCAMBIOLos días transcurrieron en un tenso equilibrio mientras Akira y Thane exploraban de forma incansable los recovecos más oscuros de la biblioteca. Se sumergieron en montones de pergaminos, libros y documentos que parecían no tener fin, buscando cualquier pista que los acercara a la respuesta que tanto anhelaban. La biblioteca se había convertido en su refugio, un lugar donde podían estar solos y concentrarse en descifrar los misterios ocultos en esos textos antiguos.Una tarde, mientras Thane revisaba un estante polvoriento en una esquina poco explorada, encontró un pergamino que llamó su atención. El documento, escrito en una lengua arcana, parecía hablar de un antiguo ritual. Con un gesto, llamó a Akira para que se acercara. Ambos se inclinaron sobre el pergamino, intentando desentrañar su contenido.—Aquí menciona algo sobre la "aceptación de la Luna" —murmuró Thane, señalando una línea que parecía estar en el centro del texto—. Parece que es un ritual casi o
CAPÍTULO 23: EL INICIOAntes de que Seraphine pudiera continuar con sus amenazas, un movimiento detrás de ella hizo que ambas mujeres levantaran la vista. Thane apareció en el pasillo, su presencia imponente llenó el espacio de inmediato. Sin embargo, no alcanzó a escuchar las palabras que Seraphine le había lanzado a Akira, pero la tensión en el ambiente fue suficiente para alertarlo.Akira se enderezó al verlo, y aunque trató de mantener la calma, su respiración todavía estaba acelerada por el enfrentamiento. La mirada de Thane pasó rápidamente entre las dos, notando la cercanía incómoda entre ellas.—¿Qué está pasando aquí? —preguntó con voz firme, su atención estaba fija en Seraphine.Sorprendida por la llegada de Thane, la princesa se irguió enseguida, adoptando una postura de inocencia. Con una sonrisa forzada, se apartó de Akira y se volvió hacia Thane.—Nada, mi señor —respondió Seraphine, intentando sonar despreocupada—. Solo estábamos conversando.Pero Thane no parecía conve
CAPÍTULO 24: EL RITUALLa luna azul brillaba con intensidad en lo alto del cielo, su luz se reflejaba en el lago con un resplandor etéreo que parecía atraer todo el poder de la noche hacia ese punto. Thane observó con atención mientras Akira avanzaba hacia el agua, sus pies descalzos apenas hacían ruido sobre la suave hierba. El vestido blanco que le había dado flotaba con delicadeza alrededor de su cuerpo, casi como si estuviera siendo sostenido por la misma luz de la luna. Había una tensión fuerte en el aire, una sensación de que algo monumental estaba a punto de suceder.Akira avanzó dentro del lago con pasos lentos, el agua fría abrazó su piel como una caricia. Su respiración se volvió más pesada a medida que llegaba hacia el centro, donde la luz de la luna se concentraba en un solo punto, iluminando la superficie del agua como un espejo brillante. En su mente, las palabras de Thane eran claras: ese era el momento en el que debía conectarse con la Luna, aceptar su poder y permitir
CAPÍTULO 25: LA PROFECÍAThane no podía apartar la vista de la figura etérea que flotaba frente a él, la bruja de la naturaleza cuya aparición había alterado todo lo que creía saber. El aire alrededor de ellos se sentía pesado, cargado con la tensión de lo que acababa de decir. Akira permanecía inconsciente en sus brazos, ajena a las palabras que cambiarían el curso de su destino.—No hemos hecho nada malo —insistió Thane, su voz teñida de incredulidad. A pesar de su propia convicción, la presencia de la bruja lo hacía dudar. Las brujas no solían habitar en el mismo plano que los lobos, y rara vez interferían en sus asuntos. Algo grave debía estar en juego para que ella se presentara de esa manera.La bruja lo miró con aquellos ojos antiguos y llenos de conocimiento insondable. Su voz resonó como un eco en el claro donde se encontraban, cargada de un peso que Thane apenas podía soportar.—Akira es parte de una profecía, Alfa —dijo la bruja, con una calma que le estremeció el cuerpo—.