Oh pero es que el amigo de Giovanny es wow. ¿Eres team Leinad o Team Kendrick?
Último Leinad. —Peroo, ¿A ti te gustaba cantar no es así? — Lo adoro, pero necesito algo que me traiga mejores ingresos. A parte los ensayos me consumían bastante tiempo. Después de quince minutos llegamos al club de boliche Blue butterfly. La estancia no estaba del todo vacía, varios Adolescentes se encontraban jugando y charlando. Pasamos al escritorio donde Megan se encargó de anotar nuestros datos y pagar la primera tanda de juegos. Claro que me negué y ofrecí invitar yo. No obstante su terquedad salió a flote. Nos cambiamos los zapatos por unos más cómodos dirigiéndonos a la fila número tres. —Primero debes tomar una bola de Boliche—. Antes de tomarla del mostrador donde la máquina acomodaba cada una. Se amarró su cabellera corta en una coleta alta, algunos de sus cabellos quedaron fuera de está. En los monitores arriba de nosotros estaban los marcadores que contaban los puntos. El número de pinos derribado y de más. De un momento a otro la música comenzó a sonar, las luces
- Amanda-Estaba nerviosa hasta la planta de los pies. Trataré de contener mis nervios todo el día pero me fue casi imposible. A partir de las cuatro de la tarde comencé mi ritual para arreglarme. No sabía qué iba a pasar, no era como si pensara en la idea de, que llegará a pasar algo entre nosotros.«No pienses en eso»Es decir, solo he tenido relaciones íntimas con el que fue mi ex novio. Y han pasado casi cinco años desde entonces.«¿Por qué estoy pensando en eso?»Diablos ni siquiera planeo acostarme con él. Si el hombre ricachón tiene otra idea. Todo se irá al carajo, le daré un golpe donde más le duele y haré como si nada de esto hubiese pasado.Suspiré.Después de una ducha que duró más tiempo del habitual. Coloqué algunos rollos en mi cabello, esperando que, después de secarse, finas ondas naturales se formarán en mi cabellera. Hacía poco que le había puesto un tinte color caramelo oscuro. Pero, especialmente hoy, quería verme linda.Después de embarrar mi cuerpo de varias cre
Cleo Doorian.Asiste te de Kendrick Dankworth.Después del viaje:Quiero arriesgarme, quiero hacerle frente al sentimiento que me envuelve cada que te miro.—Limberem. S.CSalí de la ducha, tenía dos horas para arreglarme antes de que empezarán a llegar los invitados de la fiesta. Cuando le dije a Beth que el tema sería baile de cabaret pensó que era una broma. Dijo que nadie vendría, todo lo contrario, minutos después en el grupo del móvil empezaron a subir fotos de sus disfraces. Me coloqué mi ropa interior y después el conjunto, la rubia y yo usaríamos un traje negro y rosa tirando a carmín, bastante mono, claro que ella tenía en mente otro tipo.Su banda tocaría un par de canciones, por suerte la sala del departamento era suficiente grande como para caber todos. Solo debíamos mover la sala y la mesa del comedor a una esquina.Me coloqué el traje suspirando. Debí habermelo medido en la tienda. Di con la talla de Beth pero el mío me quedaba más pequeño de lo que debería en los pecho
—Es usted tan peculiar.—¿Peculiar malo o peculiar bueno?—No soy el tipo de persona que ve mal lo especial.«Especial»Estaba por replicar cuando escucho un gran alboroto afuera. Vidrios rotos y riñas.MierdaNo otra vez.Cuando salgo lo primero que encuentro es la escena de Harry y Bryan moliéndose a golpes. Busco a Beth con la mirada.—¡¿Pero qué cojones está pasando aquí?!— la rubia me encuentra.— Es la arpía de Ashley, le mandó un vídeo a Harry. Fue el año pasado Cleo. En la convención.—¿Cuándo se besaron?— Asiente con la cabeza.«Bien hasta aquí»—Haber par de idiotas prepotentes, está fiesta no es para que estén haciendo un escándalo. Si van a matarse a golpes. ¡Háganlo fuera de mi departamento!— Estoy enojada a más no poder.—Ella fue mía antes que tuya.—¡¿A así?! Pues yo me la cogí más veces— se escuchan burlas de los demás. Hasta aquí llegaron. Nadie, nadie humillará a mi mejor amiga.Tomo un bat de béisbol y golpeo a Harry en sus pies para que caiga. Estoy en medio de am
Leinad Grossver.«Yo decido por mí» Pensé observando el techo de mi habitación. Dormir me era tan inconveniente en estos momentos. Esa niña estaba borrando todo mi autocontrol.Pero eso debía lo debía tratar cuanto antes.—Alguien irá a un baile muy pronto—. Y sabía que era lo que eso significaba. Navidad estaba tan cerca. Más malos recuerdos vendrían con ello.Respiré profundo dándome la vuelta sobre la cama. Y con el pensamiento de la pequeña castaña me quedé dormido.[…]— Déjame ver si entendí. ¿Quieres que agregue un antifaz a la ceremonia? Solo porque no quieres que sepan quién es tu acompañante. Leinad esto no es un juego, o un libro de literatura erótica.—Qué graciosa eres Donna— Entre cerré los ojos molesto.—Que use una peluca, o es más, que sea su elección. Pregúntale si quiere acompañarte no creo que tenga problemas con que alguien la reconozca—. Me removí incómodo en mi asiento.— Le llevo más de diez años. A parte tiene novio. No quiero escándalos.La rubia se encogió d
-Leinad Grossver-Sus ojos me observaron, miré duda, temor, deseo, y posiblemente los sentimientos más puros y hermosos de los que jamás, hubiese sido testigo. Sin decir una sola palabra entramos a la primer tienda de ropa.—Solo no gastes miles de dólares en un vestido— advirtió algo fastidiada.—Gasto miles de dólares en cosas que me importan— Vi que apretó sus manos. Amaba jugar así con ella.—Así que no te sorprendas si gasto un millón de dólares en tu vestido— Reí adelantando el paso.«Oh pequeña traviesa»Blanco y negro. En efecto había ese tipo de colores en esta tienda sin embargo las tallas eran muy pequeñas. Lo cual pareció afligir a Megan.Pero esos vestidos eran ridículos. Ni siquiera lo hermana, que era muy delgada, hubiese entrado en ellos.—Lamento que no hayan encontrado nada. Pero el letrero dice tallas pequeñas— Canturreó la encargada del lugar.—Si, y por lo que veo no usted no compra su ropa aquí ¿verdad?— Respondió la castaña con un aire de molestia y diversión.
Amanda. Capítulo 72.Ahora más que nada, me ato a la posibilidad de que el mundo es muy pequeño. Aunque no de la forma en qué me gustaría que fuese. Respiro profundo. La cena transcurrió de manera lenta. No volvimos a tocar el tema de Sera. Sin embargo era más que obvio que él la conocía. ¿De dónde? No estaba cien por ciento segura , lo más probable es que de la empresa del señor Arcuri. —¿Gusta pedir el postre señor? —De nueva cuenta la mesera se acercó. Levanté una ceja al notar que parecía, estaba pintada en este lugar. Solo se había referido a él. Antes de que Marcel pudiera hablar lo hice yo.—Si claro que nos gustaría tomar el postre, ¿Puedes traernos un Chiscake de arándanos rociado con chocolate blanco?— Sonreí. —Claro— La chica desapareció su sonrisa bajando la cabeza. — Solo cuida que los lácteos no sean enteros entre más ligeros, mejor— ella asintió. —¿Te gustan los postres?— Oh que pregunta. Bueno él no lo sabía. —Estudié gastronomía y repostería. Cocinar cosas d
—¡Amanda!— ¿Pero qué carajos está pasando? Tomo el móvil y lo conecto a la pantalla del auto.—¿Cómo va la cita?—Cierra la boca Gregori. Necesito que envíes a personal de seguridad. Arrollé a alguien en el estacionamiento del restaurante, asegúrate de que eliminen la evidencia de las cámaras.—¿Qué diablos estás diciendo? Un solo día Marcel, solo un día quisiera que no te metieras en problemas.—Intentaron matarla— Suelto en un gruñido. Estoy tratando de concentrarme.¿Al hospital? ¿A su casa? ¿A la mía? ¿A dónde cojones la llevo?— No puede ser. ¿Te metiste con una criminal?—No seas imbécil no es una criminal. Envía un médico a mi departamento ahora mismo. Voy para allá. También necesito que contactes a Giovanny Arcuri.— Definitivamente haz perdido la cabeza. Si sigues metiéndote con el dueño de la compañía va a demandarte.—Ella es amiga de su novia. Y algo está pasando, algo muy sucio. Necesito hablar con Arcuri ahora mismo. Programa el viaje, volveremos a Manhattan en cuanto me