-Giovanni-—¿Quién era? — No importa ya lo arreglaré. Dime en qué estábamos. — La mansión de Roma será uno de nuestros proyectos más importantes. — Y extremadamente costoso. Tan solo el primer nivel de la casa sin contar materiales extra cuesta cien millones— respondí analizando los datos de las hojas. — Sí, pero la compra está destinada al príncipe de Arabia, nos dará el triple de su valor siguiendo sus especificaciones. No podemos negarnos Giovanni. Si Arcuri companies cierra este trato, no habrá ningún mercado imposible para ti. — Si, puede que te has razón, pero realizarlo podría dejarnos en la quiebra. Y yo jamás, me arriesgo— No soy la persona más millonaria de todo el mundo. Tengo un patrimonio, y si esto falla, perdería absolutamente todo. — Bueno, habrá que analizarlo con los embajadores y socios. Por cierto. ¿Qué fue lo que sucedió ayer? Solo hay rumores y más rumores— suspiré. — Kevin, Odette regresó — su mirada de asombro se hace presente. —¿Después de casi tres añ
-Giovanny- Una sonrisa se mezcla con el semblante de mi padre quien camina de nuevo hacia la fiesta. — Ahora más que nunca debes cuidar a mi Nieto. Ese hombre, atrás de él solo hay oscuridad. Misma que envolvió a la arribista de su madre. —¡Señor! ¡Señor!— Giro mi cabeza hacia atrás. Luigi brinca desesperado por capturar mi atención. Ruedo los ojos y suspiro. Voy hacia él. — Te dije que más decoraciones estaban bien. —No es eso. ¡Hay una loca afuera! Golpeó a dos hombres de seguridad e insiste en qué es su compañera. ¡Por los cielos! Ya llamé a personal para que la saquen. «Oh no» empujo a un lado a Luigangel para ir hacia la entrada. Un pequeño alboroto se ve desde los lejos. «Que no sea ella, que no sea ella, que no sea ella» pero mis esperanzas se van a la basura cuando otro de los guardias recibe un golpe en sus partes bajas haciendo que caiga al suelo. Cuando su cuerpo se desplaza me quedo atónito. Sera se encuentra alterada hasta los cielos. Su frente arrugada, mirada des
-Sera-Me miró al espejo y entiendo con qué razón no querían dejarme entrar. Mi cabello está hecho un rotundo desastre. Ruedo los ojos retirando los pequeños trocitos de hojas secas que hay en mi melena. Por suerte siempre cargo con un pequeño cepillo pegado a un mini espejo. Humedezco la palma de mis manos pasándolas sobre las hebras platinadas tratando de que, se vea casi como lo dejé horas atrás.Retoco mi labial y salgo del tocador para damas, me aseguro de guardar el móvil en la cartera cuando mi cuerpo choca con alguien.— Oh lo siento mucho— me excuso rápidamente. Un hombre de unos cincuenta y tantos años me observa tranquilo.— No se preocupe señorita— Me quedo observando su rostro. La mirada aceitunada de sus orbes me parece tan etérea, pero a la misma vez, triste.— Que disfrute la velada— baja la cabeza haciendo una seña y desaparece nuevamente por los pasillos. Me quedo como estática pensando.— Chocaste con uno de los peces pesados de este lugar chica— en la esquina, a la
Nota: El capítulo 24 y 25 pertenecen al ya leído 23. -Sera- Me siento como si estuviese en la selva, siendo la presa de una enorme manada de depredadores. Las mirada de todos están puestas en nuestros cuerpos, principalmente en el mío. —Tranquila Ragazza— me separo lentamente del señor Arcuri. Estar tranquila para mí en estos momentos, no es ni siquiera una opción. Hay una mirada en especial que Amenaza con desfigurarme el alma, y es la de Odette Sharleston. Me estoy metiendo en donde no debo, y eso puede traerme grandes consecuencias. Doy media vuelta caminando hacia la barra de alimentos. Necesito algo dulce bañado en chocolate. A diferencia de mi jefe, yo no como hamburguesas cuando me siento frustrada. Estoy por llegar a la barra cuando siento un ligero empuje en mi cadera hacia atrás. — Acompáñame. Sigo a Giovanny hasta la parte trasera del evento. Supongo que es el jardín trasero puesto que está completamente lleno de flores, en su mayoría rosas y petunias. Respiro el dul
- Giovanny-Me quedo estático. No puedo creer que haya dejado que se marchara sola. ¿En qué rayos estaba pensando? Respiro profundo apretando el puente de mi nariz.— Giovanny. ¿Nos acompañas?— Algunos empresarios están interesados en charlar sobre el proyecto del príncipe algo de lo que sencillamente, no quiero pensar.La presencia de Odette se siente humillante. Fue capaz de pasar matrimonio por matrimonio para llegar a dónde está ahora. De cierta forma fui causante de ello. Cuando supe su verdadero interés, su engaño, su traición, la dejé casi en la ruina. Con solo lo necesario para vivir en Bretaña. Ahora que regresó, su objetivo se a forzado más que nunca.— Eddie — Llamo a uno de mis servidores.— ¿Si señor?— Me retiraré. La fiesta de ceremonia a concluido.— Pero señor. No ha dado el discurso oficial de …— Estoy seguro que alguien más puede apoyarme con ello— volteo a ver a mi padre, quién se encuentra sonriéndole a todas las chicas jóvenes que pasan a su frente.Salgo rápidam
-Sera- (10 años atrás.)— No quiero hacerlo— Murmuro.— Yo tampoco— el castaño me abraza con fuerza.— ¿Recuerdas el cuento que nos leyó la hermana Cecilia?— Asiento con la cabeza.— No podemos dejar que esto siga pasando. En unos años estaremos afuera. Yo primero que ustedes. Prometo que las ayudaré pero… Los demás. A Lily aún le faltan muchos años.El sonido de pasos corriendo llama nuestra atención. Es Amanda.— ¡Se llevaron a Liliana! — Grita.—¿Qué?— niego entre lágrimas.— ¿Quién?— Pregunta Demián.— Un hombre la adoptó. La directora ni siquiera dejó que se despidiera— caigo de rodillas.«No, ella no lo merecía. No lo merecía»Miro a Demián con enojo.— Lo haré— Murmuro.(Actualidad.)Abro los ojos lentamente. La cabeza me duele y me siento un poco desorientada. Los rayos del sol se cuelan por las enormes cortinas que cubren los ventanales.Esta no es mi habitación.— Por fin despiertas. ¿Cómo te sientes?— Mi jefe me observa con semblante serio.Los recuerdos de la noche anterio
-Sera- Me siento cansada. No he podido pegar el ojo en todo el día. Suspiro. Los médicos mencionan que el golpe de Amanda causó una contusión severa. Su cerebro está inflamado, hasta que baje la inflamación la sacarán del coma. Justo ahora me encuentro guardando todas mis cosas en una maleta. Después de que Demián y Giovanny discutieran sobre quién debía “cuidar de mí” tuve que ceder ante la mirada penetrante y directa del señor Arcuri. El castaño se decepcionó, vi en él algo que hacía mucho no lograba presenciar en su rostro. Y eso fue la decepción. Amanda es fuerte. Siempre lo ha sido, lo fue en el orfanato, lo fue en la preparatoria cuando esas chicas la molestaban por sus pecas, lo fue en la universidad cuando ese profesor intentó acosarla, y lo será ahora. Antes de irme paso a su habitación, trato de dejar todo lo más organizado posible. También de agregar un poco de su ropa para colocarla en mi maleta. Antes de marcharme tomo mi cactus y observo el piso de la sala. “Allí
-Sera- Siento como me deja sobre una superficie cómoda. Al parecer alguien más escuchó mis gritos puesto que Simon a preguntando si todo está bien desde el umbral de la puerta. Luce un poco terrorífico con tan solo una lámpara que alumbra su rostro. Con la pequeña luz puedo notar que el CEO se encuentra desnudo del torso, su espalda luce perfectamente bien trabajada igual que todo su cuerpo. Me pongo nerviosa cuando el mayordomo se aleja con la única luz. Escucho pasos, movimientos, un cajón abrirse y posteriormente dos velas se encienden dándome la tranquilidad que tanto necesitaba. Afuera el cielo parece que va a caerse, como si la vida estuviera enojada, furiosa con algo, o alguien. — Por eso tenías tantas velas en tu habitación. Le temes a la oscuridad. — Creo que usted ya se había dado cuenta de ello— muerdo mi labio inferior. — No creí que tú temor fuese tan, fuerte. ¿Quieres contarme?— Me quedo estática, pensativa. Nuevamente estoy en esta habitación, nuevamente descanso sob