Cuando pude reaccionar quise bajar a felicitar a mi hermana, vi el reloj que tenía en la mesa eran las siete de la noche así que aún estaba despierta… baje a la sala no encontré a nadie, busque en la cocina y también estaba sola así que me dispuse a subir a la habitación pero escuche voces en el despacho de mi padre no me intereso hasta que escuche que alguien menciono mi nombre así que me acerque de forma silenciosa y pude observar que en la sala estaban aún los miembros del consejo mis padres incluso mi hermana.
-Alfa los miembros del consejo estamos de acuerdo que Amanda tome el lugar como alfa… pero Ana tiene que abandonar la manada al menos por un tiempo, para evitar rumores que nos pongan en riesgo- ¿Qué? Mi padre no puede estar de acuerdo con esto, no me pueden expulsar, esta es mi manada y mi familia.
-Estoy de acuerdo, Ana es débil y no queremos que la manada se vea débil… en cambio Amanda demostrara su fuerza ya que su loba apareció a sus 14 años- no puedo creer lo que acabo de escuchar, siento un nudo en mi garganta quiero llorar y gritarle que no soy débil pero no puedo emitir ni una sola palabra… ¿Cómo puede hacerme esto?... mi madre no permitirá que me expulsen así de la manada solo por ser humana…
-Luna ¿usted está de acuerdo con la decisión?- mama di que no ¡por favor!...
-¿Es necesario que se valla? aquí estará bien con su familia- si mama convéncelos…
-Ella es humana y es débil… será mejor que este lejos de la manada, ella estará a salvo y nosotros no nos veremos como una manada débil…- ¿acaso eso es lo único que le importa? me pregunte a mí misma al escuchar a mi padre-… ¿cómo crees que nos veremos ante las demás manadas Gabriela?, cuando se enteren que la futura alfa de la manada aparte de ser mujer resulto ser humana…-
No lo puedo creer mi madre no dijo nada solo bajo la cabeza… sentía mis lágrimas correr por mis mejías y mi cuerpo temblar, mi familia, mi madre me rechazaba por ser humana, me enviarían lejos, se desharían de mi como un objeto que no sirve… subí lo más rápido que pude a mi habitación sin poder detener mis lágrimas. Entre deprisa cerré la puerta y llore hasta quedarme profundamente dormida.
Cuando desperté aún era de noche, me dolía el cuerpo por quedarme dormida recostada en la puerta y fue ahí cuando recordé todo, me dolía el pecho, sentía dolor y tristeza al saber que mi familia me rechazo y que seguramente en la mañana me dirían que se desharían de mi… pero no les daría el gusto y la satisfacción de correrme. Me puse de pie tome una maleta y puse en ella lo más importante entre ellas una caja que me heredaron mis abuelos la cual aún no habría, esperaba el momento adecuado y ese lo era… abrí la pequeña caja de madera y encontré un sobre con mi nombre, cuando lo abrí encontré una nota y una hoja de cuenta del banco una gran cantidad a mi nombre… no entendí nada así que leí la nota…
-Mi pequeña, esto es un pequeño obsequio de parte de tu abuelo y mío, amor nunca dejes que nadie te diga que eres menos, porque tu vales oro y eres más fuerte que todos, solo confía en ti misma porque escondes un poder maravilloso, y cuando todos te den la espalda tu lucha por demostrar que eres fuerte y valiente.
Te amamos y siempre estaremos contigo…
No pude evitar llorar es como si ellos supieran que este momento llegaría pero aria lo que ellos me piden lucharía y me aria muy fuerte… cuando tuve todo listo escribí una nota para mi madre donde le digo “no esperare a que me corran así que yo me voy y espero que sean felices con su hija perfecta” la deje sobre la cama tome mis cosas y baje era de madrugada así que todos duermen, baje y salí de la casa en silencio, subí mi maleta al auto y solo admire mi hogar por última vez.
-Adiós… algún día les are tragar sus palabras y les demostrare que soy muy fuerte- encendí el auto y salí de ahí… tres horas después estaba en el aeropuerto. Deje el auto en el estacionamiento seguro mi padre o como decidí llamarlo Andrés lo encontraría. Fui a comprar un boleto aun no sabía a donde iría, así que compre un boleto del avión que estuviese más próximo a salir y así quince minutos después estaba en un avión rumbo a España. Me permití llorar todo lo que pude porque me prometí a mí misma que esa sería la última vez que lloraría…
…………
No sé cuánto tiempo paso, pero la azafata indico que a habíamos aterrizado… baje del avión y recogí mi equipaje que solo constaba de una maleta donde traía mis documentos y cosas más importantes, tenía que buscar un departamento y ropa… llame un taxi y le pedí que me llevara a un lugar donde pudiera rentar un apartamento… una hora después llegamos a un lugar bastante tranquilo me atendió una señora muy amable me mostro el lugar el cual me gusto, arreglamos los papeles y me instale de inmediato, por suerte estaba amueblado “la suerte me sonríe al fin” dije para mí misma.
-Así que este departamento seria mi nueva casa- dije en voz alta, dándole un vistazo al lugar- Ana este será tu nuevo comienzo- dije para convencerme a mí misma.
El resto del día lo utilice para comprar algunas cosas que necesitaría, por suerte el dinero que me dejaron mis abuelos era el suficiente para vivir bien un buen tiempo. Pasaron los días y me dedique a buscar una universidad para reiniciar mis estudios, ya que traje mis papeles, lo que le puedo agradecer a mi madre es el haberme enseñado a mantener mis documentos en orden.
Así pasaron los días y llevaba una vida tranquila, desde que salí de la casa de mis padres no encendí mi celular… después de meditarlo decidí encenderlo y me sorprendí de no encontrar nada, ni llamadas, ni mensajes de mi familia solo unos cuantos de mis amigo…
-valla así que no les importo… pues ellos a mí tampoco- lo dije más que todo para convencerme a mí misma. Revise mis redes sociales y todo estaba normal, así que me dispuse a dormir un rato cuando de repente empezó a sonar mi celular.
-Hola-
-Hola, ¿Ana?-
-Si ¿quién habla?-
- Soy Nélida, Dios niña ¿dónde estás?- ella era amiga de mi abuela, me sorprende que me llame. Espero que no sea por órdenes de Gabriela o Andrés
-Nélida, estoy bien ¿Por qué me llamas? ¿Qué quieren ustedes? ¿Es que no les basta con destruirme y sacarme de la manada?- sentí ese rencor de nuevo y entendí que jamás me dejaría vivir en paz.
-Mi niña escúchame bien… nadie sabe que te llame o que hable contigo yo solo quiero ayudarte me entere de lo que te hicieron y no me parece bien, en honor a la memoria de tus abuelos a los cuales les prometí que te cuidaría siempre y eso quiero hacer, ayudarte- no lo puedo creer… dude por un momento, pero si mis abuelos confiaban en ella yo también lo are qué más puedo hacer.
-Nélida estoy en… España- dije aun dudando
-Muy bien mi niña escúchame - me dio indicaciones de a quien buscar para que me ayude pero no sé si debo confiar creo que sería una buena opción para un nuevo comienzo-… amor cuando lo encuentres hazle caso en todo y pierde contacto con todos… hasta con migo- creo que ella habla en serio con lo de ayudarme-… suerte en tu nueva vida amor-No puedo creer que ella me ayude aun sabiendo que si el alfa lo sabe… no sé qué haga con ella. Me fui a dormir… en la mañana me arregle y me dispuse a buscar al hombre que Nélida me dijo que buscara. Revise la dirección y llegue a una casa muy bonita, estaba nerviosa pero me dispuse a tocar… me sorprendió pues una joven blanca de cabello castaño y crespo abrió la puesta con una sonrisa, se veía mayor que yo, así que me dispuse a hablar.-Hola--Hola, ¿buscabas a alguien?-Me sentí incomoda no sabía si era el lugar correcto-¿Aquí vive el señor Ricardo?--O si, pasa- entre y la casa tenía un aire acogedor y familia
Mi reloj marcaba las seis de la tarde yo estaba en la puerta de la casa de la familia Williams que ahora sería mi familia… ¿será que mi destino es siempre pertenecer a una familia?... de inmediato borre esa idea de mi mente y me dispuse a tocar el timbre, al instante un muy sonriente Ricardo abrió la puerta causando que sintiera cierto aire de familiaridad y confianza que no sentía hace mucho, pero no baje mi guardia yo mejor que nadie sabía que si tu propia madre era capaz de traicionarte cualquiera podía hacerlo -Ana, bienvenida pasa, te estamos esperando- -Gracias don Ricardo- -¡Ana querida! Bienvenida- dijo muy sonriente la señora Ángela -Gracias- eso fue todo lo que dije cuando vi bajar a Melissa, un poco seria nada parecida a la chica que me recibió en la mañana “parece que a alguien no le agrada la idea de tener una hermana” dije para mí misma -Hola Melissa- salude a la chica que me ve de pies a cabeza, luego desvió su mirada a mi malet
Mi vida ha cambiado demasiado han pasado un año y medio desde que empecé a formar pare de la familia Williams, mis padres y mi hermana son muy buenos, siempre me ayudan y me apoyan en todo, curso cuarto año de la carrera en una buena universidad, la cual pagan mis padres ya que ellos no dejan que utilice el dinero que me dejaron mis abuelos y decidieron hacerse cargo de todo lo que tenga que ver con migo, como los buenos padres que son, gracias a las horas extras que melisa me obliga a estudiar tengo una beca universitaria la cual me ayuda a costear mis libros Creo que soy afortunada al toparme con una familia así, de mi antigua familia no sé nada y eso me agrada ya que no los extraño es como si no hubiesen existido, aunque hay un rencor y deseos de vengarme, y sé que algún día lo lograre, mientras tanto voy a disfrutar a mi familia -Mama, hoy saldré con unas amigas- -Está bien amor, pero dile a tu padre- -Perfecto… y ¿dónde está? - -¡Oh!... l
Melissa luego de escuchar la confesión de su hermana entendió porque aquella niña llego de la noche a la mañana solo con una maleta y siendo muy desconfiada, sin embargo, los padres de Melissa aun no asimilaban porque se habían portado así con ella, no tenía nada de malo que Ana fuese humana -Ricardo, cuando Ana llego a nuestras vidas era solo una niña, no entiendo cómo pudieron sus padres hacerle eso, entiendo que eran los alfas, pero ser humana no es malo, Melissa es humana y nosotros la tratamos igual… ellos fueron muy injustos con ella- -Lo sé, pero ella es nuestra hija y nosotros siempre la apoyaremos, así como lo hemos hecho con Melissa- -Sabes… hay algo que aun no comprendo- dijo Ángela en voz baja -¿Si? ¿Qué es?- -Lo que Ana sintió cuando le realizaron aquel ritual- ambos guardaron silencio …………. Por la mañana Ana bajo y estaban sus padres desayunando, seguido bajo Melissa y se sentaron todos en la mesa -Papa, ¿
-Bueno hay cosas que no recuerdo… creo que son recuerdos de cuando tenía ocho años, pero no le presto importancia- -Ahora todo está claro- todos la miramos sorprendidos- ¡les explico!... Ana es una mujer lobo- yo no savia que decir, mi familia me saco de sus vidas por ser humana, y resulta que soy una mujer lobo -Entonces ¿porque no aparece mi loba? - -Ana, tu no recuerdas algo en específico de cuando tenías ocho años… no sé qué paso… pero si lo averiguamos sabremos porque tu loba no aparece, pero necesito tu permiso y el de tus padres- -Por nosotros no hay problema… Ana esto es tu decisión, pero quiero que sepas que si tu mente bloquea ese recuerdo es porque no es bueno ¿te arriesgaras? - no sé qué hacer, quiero saber, pero no sé qué tan malo sea -Está bien…acepto- -Muy bien cariño, toma esto- me dio un té- recuéstate el sofá y cierra tus ojos- escuche una suave voz que decía que recordara lo que paso cuando tenía ocho años y luego se
Ana, mis regalos son sencillos pero poderosos, sé que tu loba aun no aparece, el collar hará todo menos doloroso cuando eso pase, el día que te conviertas este desaparecerá, pero hasta que eso pase no te lo quites… Ana tú no eres una loba cualquiera, eso tenlo presente, tu eres especial, tu eres fuerte… la segunda carta guárdala bien y ábrela hasta que tu loba aparezca, no sé cuándo pase, solo sé que así como se fue, así volverá, quiero que seas fuerte para soportarlo, me imagino que ya tienes conocimiento de los ataques, así que cuídate mucho y a tu familia también, nosotras ya no nos volveremos a ver pero me alegro de haberte conocido. Con cariño Margot P Esa carta me dejo confundida no se a qué se refería, pero le hice caso, me coloque el collar y guarde muy bien la carta Dos semanas después me encontraba en una entrevista de trabajo, en la que me estaba yendo muy bien -Muy bien señorita Williams,
-¿Ana?- dije apenas en un susurro por la impresión, sus ojos estaban de un color rosa bellísimo- -¡No!, soy Isis- dijo acercándose a papá- la loba de Ana- lo tomo entre sus brazos y le dio un beso en la frente luego hizo lo mismo con mamá, me tendió la mano y me puso de pie, yo no sabía que hacer hasta que ella hablo -Melissa, yo le prometí a papá que siempre cuidaría de ti, y eso aré…tenemos que salir de aquí, toma solo lo más importante- Aun con todo el dolor que sentía subimos a empacar lo más importante, media hora después nos encontramos en la sala. Ana o Isis como la loba se llama ya me esperaba, salimos de la casa y subimos a su auto, ella condujo durante mucho tiempo hasta salir de la ciudad, cuando ya estábamos muy lejos nos detuvimos en un hotel de paso para descansar -Melissa ve a buscar una habitación, yo no puedo ir- dijo seria -Ana, porque tienes los ojos rosa- desde que se convirtió en loba te
-Isis ¿qué le pasa? - -Su parte animal lo controla, y él es un alfa… es muy fuerte- -Te dejare salir, ten cuidado- El lobo avanza hacia mí, así que dejo a Isis tomar el control, el lobo es fuerte y sabe pelear, pero como predomina su parte animal no es capaz de hacerlo perfectamente, yo soy fuerte pero él lo es aún más, le lanza contra mí y clava sus unas en mis costillas haciéndome retroceder aprovecha para golpearme, lanzándome lejos, me pongo de pie y me abalanzo sobre él, no sé cuánto tiempo pasó pero él estaba herido y cansado y yo peor, sentí un fuerte dolor que me hizo caer, volví a mi forma humana pero Isis aún tenía el control, el lobo se acercó mostrando sus colmillos, lo vi directo a los ojos y como última opción hable -No dejes que te controle, se fuerte…- dije y lo vi titubear sabía que tenía un conflicto interno, que el hombre trataba de domar a la bestia así que tenía que ayudarlo- siento tu dolor