Mi vida ha cambiado demasiado han pasado un año y medio desde que empecé a formar pare de la familia Williams, mis padres y mi hermana son muy buenos, siempre me ayudan y me apoyan en todo, curso cuarto año de la carrera en una buena universidad, la cual pagan mis padres ya que ellos no dejan que utilice el dinero que me dejaron mis abuelos y decidieron hacerse cargo de todo lo que tenga que ver con migo, como los buenos padres que son, gracias a las horas extras que melisa me obliga a estudiar tengo una beca universitaria la cual me ayuda a costear mis libros
Creo que soy afortunada al toparme con una familia así, de mi antigua familia no sé nada y eso me agrada ya que no los extraño es como si no hubiesen existido, aunque hay un rencor y deseos de vengarme, y sé que algún día lo lograre, mientras tanto voy a disfrutar a mi familia
-Mama, hoy saldré con unas amigas-
-Está bien amor, pero dile a tu padre-
-Perfecto… y ¿dónde está? -
-¡Oh!... lo olvidaba llegará tarde hoy… le puedes decir en la cena, arréglate sabes que no se negará-
-Esa bien, invitare a Melissa… ¿Crees que quiera ir? -
-No lo creo amor hoy le toca el turno de la noche en el hospital-
-Dios esa niña deseara vivir en el hospital, pero está bien… subiré a arreglarme bajare para la cena- mi madre solo asiente, cuando ya estoy lista para salir escucho el auto de mi padre llegar a la casa, unos minutos más tarde veo a Melissa entrar a mi cuarto
-Melissa ¿qué haces aquí?, mama dijo que estarías de turno en el hospital-
-Así es, pero papa me paso a buscar dijo que quería hablar con nosotras, nos espera abajo, así que vamos-
Cuando bajamos estaban nuestros padres en el comedor esperándonos con sus rostros cerios algo que no es normal en ellos, quiere decir que es algo grave lo que nos dirán… ¡No puede ser!… será que ya se enteraron de mi pasado y están molestos porque les mentí... Me sentí nerviosa, pero si era eso aceptaría lo que ellos decidan-
-Ana… Melissa, tomen asiento- dijo en un tono serio, calme mis nervios y trate de actuar normal, me senté, pero no dije nada, así que Melissa hablo por las dos
-Dinos papa que pasa-
-Niñas, de ahora en adelante ustedes no saldrán más de noche… Melisa, hable con el director del hospital, así que tus turnos serán solo por el día…- Melisa tenía un rostro de asombro sin duda no se esperaba esto- Ana tú ya no podrás salir con tus amigas, cuando salgas de la universidad vendrás directo a casa, las únicas salidas que tendrán será en familia- bien no era lo que yo pensaba pero aun así eso es muy raro-
-Papa, puedo saber porque tomas estas medidas- savia que ocultaba algo
-Ha habido asesinatos en la ciudad… y yo soy un reconocido abogado así que debo proteger a mi familia- no hice más preguntas, pero savia que eso no era toda la verdad, ellos sabían algo que yo no así que tendría que investigar.
La cena trascurrió normal cundo dejamos todo en la cocina listo cada quien se fue a su habitación… luego de un rato dando vueltas en la cama, y no lograr conciliar el sueño quise bajar por un bocadillo nocturno, cuando estaba bajando las escaleras escuché que mis padres conversaban en la cocina así que quise saber de qué se trataba, savia que tenía que ver con los asesinatos en la ciudad
-Ricardo ¿la manada no hará nada? - ¿Manada? De qué habla
-Ángela la manda que protege la ciudad está pasando por un mal momento, así que por los momentos estamos solos- ¿Ellos pertenecen a una manada?
-Tenemos que decirles, son nuestras hijas, ellas tienen que saber a qué nos enfrentamos-
-Amor, Ana es humana y Melissa también no quiero exponerlas a todo esto… entre menos sepan mejor… son mis hijas y hare lo que sea para protegerlas… ahora vamos a dormir-
Subí lo más rápido y silenciosa que pude hasta mi cuarto, si antes no podía dormir ahora peor… tengo que organizar mis ideas… ellos saben que los hombres lobos existen ¡Bien!... Pertenecen a una manada, pero no sé si son hombres lobo… ¿porque Melissa es humana?, ¡Dios! no entiendo nada… lo que si me queda claro es que para saber la verdad de mi familia tendría que revelarles todo mi pasado y es algo de lo que no quiero hablar… pero… ellos son mi familia.
Esa noche dormí poco y me levante muy temprano, desayune con todos y todo seguía normal… me despedí de todos y tome las llaves de mi auto y me fui directo a la universidad. El día transcurrió con normalidad pero desde la mañana yo tenía un conflicto interno sobre qué hacer, si quería saber la verdad yo tendría que decirles todo a ellos… ya en la casa subí a mi habitación a hacer tareas y trabajos de la universidad, así me entretuve toda la tarde hasta que llegó la hora de la cena donde se descubrirían todos los secretos… escuche a mi madre llamar así que me dispuse a bajar, ya estaban todos en la mesa “Muy bien Ana, Se fuerte” dije para mí misma
-Buenas noches a todos- dije con una sonrisa
-Buenas noches- respondieron todos
Ellos conversaban de cómo les fue en el día yo solo me limité a escuchar y esperar el momento adecuado para dejar caer la bomba que amenazaba con salir de mi boca
-Ana… ¿estás bien cariño? No has dicho nada y eso es muy raro en ti- dijo mi padre en tono gracioso ya que es cierto yo soy la que siempre está hablando y haciéndolos reír
-Papa, Mama… puedo hacerles una pregunta-
-Si claro Cariño-
-¿Ustedes son licántropos?- Todos me miraron sorprendidos, Incluso Melisa dejo caer el cubierto que tenía en las manos, mamá observo a papá quien me miraba desconcertado y Melissa solo bajo la mirada hasta que al fin se dispuso a hablar
-¡Dios niña! ¿De sonde sacas esas cosas? - Dijo papá con una sonrisa en el rostro, queriendo desviar el tema, pero yo quería saberlo, aunque eso signifique que les contare mi secreto
-Anoche sin querer los escuche hablar, así que les pido que me digan la verdad- dije seria
-Ana eso solo fue una broma, no hablábamos en serio… los hombres lobo no existen es solo un cuento mitológico-
-Papá- dije seria-… yo sé que si existen –dudé un momento, pero finalmente lo dije-… yo provengo de una familia de licántropos, así que por favor dime la verdad- Todos me miraron asombrados ante la confesión que acababa de hacer
-Ana tu…-no la deje hablar porque ya sabía lo que diría
-Si soy humana, es esa la razón por la que vine a este país… yo no planeaba hablar de mi pasado, pero ustedes son mi familia, mi verdadera familia. Yo no quiero que haya secretos y dada la situación quiero contarles… espero que después de hablar ustedes quieran que yo siga formando parte de su familia- ninguno dijo nada solo me observaban así que me dispuse a hablar
-Mi nombre es Ana Campo era la hija del alfa de una manada muy importante en un país de América y futura alfa de la manada…- así les conté todo mi pasado sin omitir nada, con cada palabra sentía mi pecho arder de odio y rencor hacia la que era mi familia- …y así es como llegue hasta ustedes, y el resto de la historia ya la conocen- todos guardaban silencio, por un momento sentí miedo de que me rechazaran como mi antigua familia
-No entiendo cómo fueron capaces de hacerte eso- dijo Melissa casi en un susurro, de repente mi padre se puso de pie dando un fuerte golpe a la mesa que nos hizo sobresaltar a todas, para luego mirarme a los ojos
-Ana- dijo mi padre en un tono serio y con el ceño fruncido- quiero que te quede claro que nosotros somos tu única familia, y que jamás haríamos algo así contigo, te aceptamos y te queremos tal y como eres- no pude evitar que lagrimas salieran de mis ojos, me lance a sus brazos y llore como una niña, mi madre mi hermana se nos unieron, en ese momento supe que esa era mi verdadera familia
Esa noche, después de contarles mi secreto, decidimos que era suficiente para una noche así que todos nos fuimos a nuestros cuartos a dormir. Esa noche pude descansar pues savia que esa es mi verdadera familia y que siempre contaría con ellos
Melissa luego de escuchar la confesión de su hermana entendió porque aquella niña llego de la noche a la mañana solo con una maleta y siendo muy desconfiada, sin embargo, los padres de Melissa aun no asimilaban porque se habían portado así con ella, no tenía nada de malo que Ana fuese humana -Ricardo, cuando Ana llego a nuestras vidas era solo una niña, no entiendo cómo pudieron sus padres hacerle eso, entiendo que eran los alfas, pero ser humana no es malo, Melissa es humana y nosotros la tratamos igual… ellos fueron muy injustos con ella- -Lo sé, pero ella es nuestra hija y nosotros siempre la apoyaremos, así como lo hemos hecho con Melissa- -Sabes… hay algo que aun no comprendo- dijo Ángela en voz baja -¿Si? ¿Qué es?- -Lo que Ana sintió cuando le realizaron aquel ritual- ambos guardaron silencio …………. Por la mañana Ana bajo y estaban sus padres desayunando, seguido bajo Melissa y se sentaron todos en la mesa -Papa, ¿
-Bueno hay cosas que no recuerdo… creo que son recuerdos de cuando tenía ocho años, pero no le presto importancia- -Ahora todo está claro- todos la miramos sorprendidos- ¡les explico!... Ana es una mujer lobo- yo no savia que decir, mi familia me saco de sus vidas por ser humana, y resulta que soy una mujer lobo -Entonces ¿porque no aparece mi loba? - -Ana, tu no recuerdas algo en específico de cuando tenías ocho años… no sé qué paso… pero si lo averiguamos sabremos porque tu loba no aparece, pero necesito tu permiso y el de tus padres- -Por nosotros no hay problema… Ana esto es tu decisión, pero quiero que sepas que si tu mente bloquea ese recuerdo es porque no es bueno ¿te arriesgaras? - no sé qué hacer, quiero saber, pero no sé qué tan malo sea -Está bien…acepto- -Muy bien cariño, toma esto- me dio un té- recuéstate el sofá y cierra tus ojos- escuche una suave voz que decía que recordara lo que paso cuando tenía ocho años y luego se
Ana, mis regalos son sencillos pero poderosos, sé que tu loba aun no aparece, el collar hará todo menos doloroso cuando eso pase, el día que te conviertas este desaparecerá, pero hasta que eso pase no te lo quites… Ana tú no eres una loba cualquiera, eso tenlo presente, tu eres especial, tu eres fuerte… la segunda carta guárdala bien y ábrela hasta que tu loba aparezca, no sé cuándo pase, solo sé que así como se fue, así volverá, quiero que seas fuerte para soportarlo, me imagino que ya tienes conocimiento de los ataques, así que cuídate mucho y a tu familia también, nosotras ya no nos volveremos a ver pero me alegro de haberte conocido. Con cariño Margot P Esa carta me dejo confundida no se a qué se refería, pero le hice caso, me coloque el collar y guarde muy bien la carta Dos semanas después me encontraba en una entrevista de trabajo, en la que me estaba yendo muy bien -Muy bien señorita Williams,
-¿Ana?- dije apenas en un susurro por la impresión, sus ojos estaban de un color rosa bellísimo- -¡No!, soy Isis- dijo acercándose a papá- la loba de Ana- lo tomo entre sus brazos y le dio un beso en la frente luego hizo lo mismo con mamá, me tendió la mano y me puso de pie, yo no sabía que hacer hasta que ella hablo -Melissa, yo le prometí a papá que siempre cuidaría de ti, y eso aré…tenemos que salir de aquí, toma solo lo más importante- Aun con todo el dolor que sentía subimos a empacar lo más importante, media hora después nos encontramos en la sala. Ana o Isis como la loba se llama ya me esperaba, salimos de la casa y subimos a su auto, ella condujo durante mucho tiempo hasta salir de la ciudad, cuando ya estábamos muy lejos nos detuvimos en un hotel de paso para descansar -Melissa ve a buscar una habitación, yo no puedo ir- dijo seria -Ana, porque tienes los ojos rosa- desde que se convirtió en loba te
-Isis ¿qué le pasa? - -Su parte animal lo controla, y él es un alfa… es muy fuerte- -Te dejare salir, ten cuidado- El lobo avanza hacia mí, así que dejo a Isis tomar el control, el lobo es fuerte y sabe pelear, pero como predomina su parte animal no es capaz de hacerlo perfectamente, yo soy fuerte pero él lo es aún más, le lanza contra mí y clava sus unas en mis costillas haciéndome retroceder aprovecha para golpearme, lanzándome lejos, me pongo de pie y me abalanzo sobre él, no sé cuánto tiempo pasó pero él estaba herido y cansado y yo peor, sentí un fuerte dolor que me hizo caer, volví a mi forma humana pero Isis aún tenía el control, el lobo se acercó mostrando sus colmillos, lo vi directo a los ojos y como última opción hable -No dejes que te controle, se fuerte…- dije y lo vi titubear sabía que tenía un conflicto interno, que el hombre trataba de domar a la bestia así que tenía que ayudarlo- siento tu dolor
-Así que hablaste con Iker, ¿Cómo lo hiciste?... él no es de muchas palabras- dice aún más serio -Lo sé, casi me mata- el parece no entender- siéntate te explicare- le cuento todo y el no cambia la expresión de su rostro en ningún momento, así que le digo lo que yo quiero- y lo que te propongo es que me enseñes a pelear y a controlarme y yo te ayudare a ti- -¿Y yo que gano con eso?- pregunta serio -A mi hermana, te ofrezco la oportunidad de estar con ella sin limitaciones y sin miedo a lastimarla si pierdes el control y recuperar lo que perdiste cuando te domino el lobo - note tristeza en su mirada -¿y tú que ganas?, no creo que solo quieras eso- -Pues, aunque no lo creas gano mucho, al igual que tú me quiero vengar de alguien- se sorprende, seguro no imagino que supiera eso de el- si me ayudas lo lograre lo que me propongo, y si fallo mi hermana tendrá quien la cuide- -Eso es suficiente para mi… empezamos mañana en la mañana… espera -
-Buenos días…- digo entrando a la cocina -Buenos días…-responden ambos -Alex, ¿ya decidiste cuando regresaras a la manada? - digo mientras me sirvo café -Si…- dice serio - Hoy iremos - -Está bien, ¿te esperamos para cenar? - dice Melissa -No… ustedes irán conmigo…- -¿Por qué?- digo seria mientras Melissa lo observa -Yo iré a tomar mi lugar como alfa, Melisa es mi luna, así que debe estar conmigo… y tu Ana…quiero que tomes lugar como jefa de mis hombres- me quedo con la boca abierta -¿Por qué?, sabes que me veo muy joven y tus hombres no aceptaran estar bajo mi mando- digo seria, aunque ese puesto sería muy bueno para lo que quiero lograr no quiero causarle problemas a Alex -Ellos tendrán que aceptar mis órdenes, eres fuerte y podrás con ellos… además necesito a alguien de confianza, sé que mi hermano hace lo que puede, pero… nos esperan tiempos difíciles y quiero estar seguro de quien está de mi lado- Melissa me
Ana -Melissa esta bellísima- digo cuando la veo -Gracias- responde con una sonrisa -Alex tú… te ves igual- digo, haciendo que ambos rían -Llego el que faltaba- digo viendo a Max, el sin duda será un dolor de cabeza -Lo siento Ana, pero esta es una reunión de adultos y las niñas no pueden asistir- dice con un tono de burla -Tranquilo no planeo ir al bar de strippers donde trabajas- respondo con una sonrisa, iba a decir algo cunado Alex intervino -Cálmense los dos parecen bebes- dice Alex serio, pero se nota que se divierte viéndonos discutir -Vamos, ya nos deben estar esperando- dice Max Llegamos a una pequeña plaza por donde pasamos cuando veníamos está en el centro de muchas cabañas, supongo que ahí viven los que pertenecen a la manada, todos nos observan y muestran respeto ante Alex, ya veo el poder del alfa, “Max solo es un playboy jugando al alfa” digo para mí misma, aunque n