Capítulo 96; Caos.

Despertar abrazada al cuerpo de Nikolay era un sensación inexplicable, el placer y el amor recorrían su cuerpo a partes iguales. Cuándo sintió aquellos besos sobre su cuello y que se deslizaban hacia sus hombros y seguían por su espalda gimió y se estiró como una gata perezosa, Nikolay sonrió, la abrazó desde atrás, deslizando la mano por su silueta y apoderadose de uno de sus senos...

—Me encanta cuándo me das los buenos días así— dijo entre gemidos.

—A mi me encanta como gimes— le dijo junto a la oreja, para luego tomar el lóbulo de su oreja y succionarlo dentro de su boca, enviando un estremecimiento por toda su columna vertebral.

Aquella fue la chispa necesaria para encender la llama de la pasión ardiente entre el leon y su leona. Una leona agresiva, sedienta de deseo, hambrienta de placer, pero tambien una gatita tierna que escondía sus garras para ser consentida.

*****************************************

—¿A dónde irás?— preguntó ella.

—A la oficina, cariño— respondió Nikolay
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP