No sabía que se quería ir o que lo necesitaba, hasta que su hermano hizo la mención de abandonar aquel lugar.Aunque la palabra “abandonar” no era del agrado de Charisse, porque le daba nostalgia. Su padre los había abandonado, su madre había muerto, años después se enteran de que su padre también había fallecido y como si no fueran muchas desgracias, se quedan sin dinero. Pero por suerte Jared terminó sus estudios universitarios y pudo obtener un buen trabajo en Graham Group, lo demás que pasó no existía en la mente de Charisse, porque ella estaba en coma, no sabía el curso que tomó la vida de Jared o su relación de amistad con Robert.Pero abandonar aquel lugar le parecía muy triste, hasta que estuvo en el avión.Si miraba hacia atrás, no solo era un alivio para ella estar alejándose de todo aquello, también era un alivio para Jared poder marcharse, hacerlo con su hermana.Según sus recuerdos, era la primera vez que abordaba un avión, porque las dos veces que lo llegó hacer, estaba
Entró a la habitación de su hijo, estaba dormido, la maleta ya estaba en la puerta.Besó su frente y se dirigió hacia la puerta, dándole una última mirada.—Volveré en cuatro días.—dijo, no importaba si Andy no estaba escuchándola.Salió de la habitación, apagando la luz del techo y solo dejando la de la mesa de noche.En la puerta de salida estaba Jeremy de brazos cruzados.Sabía los planes de Mary Jane y por más que le molestara, no podía impedirle nada. Ella estaba allí por decisión propia. Y por su hijo.Pero, a pesar de que en esos meses Jeremy había intentado algunas cosas para que hicieran las pases, Mary Jane no le perdonaba que la chantajeara con su hijo, y solo pasaban palabras.—Mary, ¿de verdad te irás?—se le hacía un nudo en la garganta, temeroso de que ella no regresara, que no le importara ninguno de los dos.—Cuatro días, Jeremy. Solo son cuatro días.—Pero…podemos ir contigo.—Es la fiesta de apertura de Robert y Alice. Está demás decir que tú no eres bienvenido.—Y q
—¡Alice!—corrió hacia su hermana, feliz de verla, la abrazó, apretándola contra ella. Un Robert algo angustiado se acercó a las dos, rodeando a Alice por la cintura para separarlas, considerando que Mary la estaba apretando un poco.—No la aprietes demasiado.—Le pidió. Mary bajó sus brazos de su hermana y saludó a Robert, igual de feliz de verlo.—¿Cómo estás, Mary?—¿Tú desde cuándo eres tan delicado o cuidadoso?—Desde siempre.—respondió él, rodeando el vientre de Alice.—Ahora más.—Estoy embarazada.—le dijo la pequeña Alice a su hermana.Mary Jane se llevó las manos a la boca, sin poder detener la sorpresa que llegaba a ella con la noticia.—¡Qué alegría!—ahora entendía las precauciones de Robert, aunque seguían siendo exageradas.—Otro bebé. Muchas felicidades a ambos, veo que no pierden el tiempo.Alice tomó la mano de su hermana, llevándola hacia el coche, le dio un segundo abrazo y un beso.Robert entraba la maleta y ellas dos hablaban.—¿Cómo estás? ¿Te costó venir?—No soy una
Aquel viaje resultó ser muy mala idea.Esperaba que Mary lo viera allí y le agradara la sorpresa, pero fue todo lo contrario.Se sentía afectado por sus palabras.Fue allí por ella, no porque Mark también estuviera presente. Mary Jane dijo que era importante para ella y él le quería demostrar que también podía ser importante para él.El gesto no fue bien recibido.—¿Por qué viene esto de tu parte, Jeremy?—lo esperaba más de su hija, jamás de Jeremy, porque era quien más saldría perdiendo.—¿Ha pasado algo con Mary Jane? ¿Cómo está la situación allí?—El señor Taylor no parecía saber que Mary estaba en el país.—Cuéntame. Puedes confiar en mí.—Me enamoré de alguien más.—decía Jeremy, sentado frente al señor Taylor.—Y esa persona no desea ser mi amante. Creo que…si nuestro divorcio no interviene con nada, podría valorarse esa opción. ¿Qué me dice usted?—¿Divorcio? ¿Crees que es conveniente para ti o tu familia? Aún tienen una enorme deuda conmigo, Jeremy. Tu padre me debe mucho.—Una deu
—¿Por qué otra vez?—Ethan estaba a sus pies, sin apartar los ojos de su tía, de todas las hermanas ella era la más parecida a Alice, sobre todo luego de que esta había perdido peso, una Alice delgada se parecía muchísimo a Sam.—Si ya se divorciaron una vez, ¿por qué casarse?—La primera vez que caminé al altar fue para complacer a papá. Y créeme, no tenía las mínimas ganas de casarme, ni con Robert, ni con nadie, más que nada porque estaba enamorada de Jared. Una boda con él, era un sacrificio, en su totalidad. Mucho menos me veía capaz de quererlo, sabía que él tampoco se querías casa, no nos conocíamos, no había ningún vínculo entre los dos. Y pareció que haberlo sería imposible.—¿Y ahora?—¿No la has visto? Lo mira y suspira.—respondió Loren.—Está muy enamorada. Es normal, Robert es un amor, Sam.—¿Es el mismo Robert que…?—Miró a Sofía, luego a Alice.—¿Para qué pregunto si ya lo sé?—Sí, es el mismo Robert Graham.—respondió Alice— mi querida Sofía lo conoció primero, menos mal que
Después de aquella celebración, Robert y Alice tuvieron un par de horas a solas, antes del evento de inauguración de su empresa.Robert tocó el dedo de su esposa, deslizándose por el anillo que allí había, luciéndose tan bien en su mano.—Mi esposa…—la palabra sabía a miel en su boca, pero más a miel sabían los labios de ella, pintados de un tono suave y dirigiéndose a los de su esposo.—Mi amor.—unió sus labios con los del Graham y dio comienzo a una danza que indudablemente llevaría a otras cosas.Detrás de ellos la cama los esperaba.Las manos del hombre buscaron desesperadamente detrás del vestido, sin dar con la cremallera, mordió el labio inferior de Alice en una súplica para que ella lo ayudara a deshacerse de aquel vestido antes de que se volviera loco.La risa de ella la delató, haciendo travesuras para divertirse con Robert, a pesar de verlo desesperado.—Ah…¿te resultó gracioso? Puedo entrar de otra manera. Te mostraré.—recorrió con sus manos la cintura de Alice, cayó arrod
Era hora de irse, toda la celebración de la boda de Alice, la fiesta de inauguración de su empresa, aquello terminó y al día siguiente Mary Jane tenía que regresar a Turquía.Tenía su vuelo para el medio día.Había dormido en casa de Sofía, como también lo hizo Loren y su esposo. Samantha se había quedado en un hotel para poder estar con su pareja.Tomó todas sus cosas y se despidió de sus hermanas, la noche anterior ya se había despedido de Alice, porque sabía que la recién casada estaría muy ocupada.Pasó por el hotel de Samantha y se despidió también de ella.En un restaurante cercano al aeropuerto, ella quedó con Mark para despedirse.Aquellos días no se habían dado más que besos, Mark había dejado claro sus sentimientos pero también le expresó que no quería ser su amante, eso Mary lo sabía, aunque al verse no podían evitar besarse.Se paró de aquella mesa donde la había estado esperando y la recibió con un abrazo, tomó sus cosas, acomodándolas cerca de ella.Volver a ver a Mary s
—¿Listo?—preguntó a Andy. Recogería a Mary en el aeropuerto y si ella no estaba muy cansada irían a almorzar fuera.—Espera, papá.—corrió a su habitación y buscó las flores que había tomado del jardín para dárselas a su madre como bienvenida. Las había colocado ordenadamente con la ayuda de su padre, simulando un pequeño ramo de flores. Aquello era mejor que comprar uno. A Mary le gustaban mucho los detalles de su hijo y Andy era muy detallista, demasiado unido a sus dos padres.—Ahora sí, listo.Camino al aeropuerto, él recibió una llamada de Mary.—Acabo de salir, ¿dónde están?—Ya entramos. Busco aparcamiento y te recogemos.—No hace falta que bajen del coche. Los espero en la puerta, así no tardan.—Perfecto.—siguió la línea señalada por los carteles hasta la entrada y de allí pasó junto a la enorme línea de coches aparcados, hubo un poco de atasco, que no duró más de dos minutos, enseguida se disipó cuando el coche que encabezaba la lista se movía, recogiendo a unas personas.Pudi