Alyssa Hablar con Alex siempre era agradable, no solo por la tranquilidad que su presencia transmite donde sea que esté, sino por lo cómoda que me siento con él para hablar y hacer cualquier cosa. Gracias a eso pude descansar muy bien a pesar de lo conmocionada que me dejó el incidente en la feria y luego el camino a la escuela fue incluso más animado que antes por lo que me sentía de muy buen humor durante las clases. —Tomiko Hatashi, un placer —saluda una chica sentándose junto a mí. —Alyssa —me presento y me acerco analizando su rostro—, ¿Eres la nov- amiga, la amiga de Ryder? —corrijo rápidamente. —Sí… ¿nos conocemos? —frunce el ceño— Espera, ya sé, eres la amiga de Tyler ¿no? —asiento— Lo sabía, nos habló de ti, disculpa que no nos hayamos conocido ayer en la feria. —No te preocupes, nos conocemos ahora, Tyler también me habló mucho de ustedes —sonrío. —Dioses, eres incluso más hermosa de lo que imaginé —suspira y no puedo evitar sonrojarme por el repentino halago—. Tienes u
¿Alguna vez has sentido ese doloroso vacío que se forma en el pecho cuando pierdes a alguien que quieres demasiado? Pues es lo único que siento en medio de esta pesadilla, dolor y pérdida. Como si alguien me hubiera sido arrebatado injustamente. Siento unas inmensas ganas de llorar y necesito que alguien me abrace con mucha fuerza. Estoy tan triste, me siento tan mal… ¿qué me está pasando? Un destello pasa frente a mí y Alexander es el dueño de la cara, y luego estoy en un funeral. ¿Qué está pasando? ¿Alguien murió? Muerte. «Te extrañaré» susurra una voz que no conozco. Culpa me invade, pude haberlo evitado. Todo se desvanece con lentitud, se aleja y lo dejo ir porque ya quiero que termine, no quiero seguir sintiendo esta angustia Despierto. ***** Alexander Definitivamente Alyssa no estaba bien. Desde aquel abrazo al que reaccionó muy extraño comenzó a evitarme con frecuencia cada vez que podía hacerlo, a menudo tartamudeaba y evitaba mi mirada y el asunto llegó hasta el pu
Alyssa Pues tan bien no estaba después de sentir seguridad cerca de Alexander. Mi mente seguía jugándome malas pasadas e intercalaba la realidad con cualesquiera que fueran esas fantasías extrañas que estaba teniendo donde Alexander era el protagonista y otra serie de sucesos que eran inconcebibles pero a la vez tenían sentido. O eso creo. Cada día me costaba más diferenciar la realidad porque no podía evitar comparar al Alex en todos los escenarios y aunque se sentía completamente incorrecto, mis hormonas no ayudaban a que no me gustaran las cosas que mi mente fabricaba fuera de los sueños extraños. Si de verdad existe el infierno, me iría a él por fantasear todas esas cosas. Claro que, no todo era sexual, o romántico, algunos escenarios donde también estaba con Alex vinieron a mi mente con la misma claridad, pero a ellos me costaba más darles sentido porque por lo general no tenían contexto, así que no comprendía de lo que hablábamos o hacíamos y por supuesto, eran mucho menos i
—...La decisión ha sido tomada, queda establecido como su sagrado deber cumplir las condiciones de este acuerdo para el perdón de sus actos y la restitución de sus relaciones internacionales así como de sus cargos en este reino; de rehusarse a cumplir, las consecuencias han quedado fijadas en el acta sección 9, no es necesario repetirlas y lo desfavorables que estas serán para su familia y su especie. Se concluye esta sesión —declara azotando el mazo contra el mesón de mármol—. Indiferente e inexpresivo a la condena que acababa de dictar, todo lo que su labor exigía ser. Abandonó el estrado en total silencio mientras el tribunal se llenaba de murmullos ininteligibles incluso a los oídos expertos de los acusados. Estos se mantuvieron en total calma exterior conservando la compostura y manteniendo sus expresiones tan neutrales como habían aprendido durante toda su vida. Escuchaban con amargura los comentarios mas cercanos y sentían la ira fluir dentro de sí mismos a causa de la terr
Las vistas nocturnas siempre han sido de mis favoritas. La paz y la calma de la oscuridad siempre han sido un consuelo en medio de mi caótica y deslumbrante vida, además de que me encanta apreciar los pequeños destellos de luz en medio de la noche. A las malas aprendí que no todo lo que está en la luz es bueno, y que no todo lo que está en la oscuridad es malo y ya que la noche es lo único que nunca me ha lastimado prefiero refugiarme en ella antes que en cualquier luz brillante que promete hacer el bien en vano para luego apuñalarte por la espalda cuando te sientes muy cómodo con ella y su falsa seguridad. Cualquiera creería que en un lugar como este habrá más seguridad para proteger a los inestables residentes de causarse daño, causarlo a otros residentes, o incluso a los mismos cuidadores. Sin embargo, después de un tiempo aprendes a escabullirte porque te das cuenta de que el guardia de duerme una hora después de que todos se van a la cama, que el encargado del pasillo va por caf
Tal parece que las palabras de Cameron eran verdaderas y sus padres se interesaron por mí, es por ello que una semana después tenía una cita programada para reunirme con ellos, la familia Black. En realidad aún no sé cómo sentirme al respecto, pero decidí que no me importa mientras no sean alguna clase de locos que planeen lastimarme, como sea, igual no tengo grandes esperanzas sobre mi futuro así que no tengo mucho que perder. El director me entregó un expediente con sus fotografías, nombres y una breve descripción de cada uno para no estar tan perdida, pero un papel no puedo explicar cómo es una persona en realidad. El ambiente vuelve a sentirse pesado con su llegada y esta vez las sombras están un poco más presentes por lo que sé que se trata de ellos y no alguna otra cosa que trata de perturbarme. Claro que esta vez estoy más preparada psicológicamente y puedo manejar mejor la presión que me causa en el pecho su influencia anormal. —Buenas tardes, señor, señora Black —saludo con
Hay... sangre... por todos lados, no puedo verla, pero su olor es inconfundible, me marea un poco y se siente como el soplo de alguien susurrando en mi oído, demasiado cerca, desagradable, frío y putrefacto. Algo destella de forma llamativa en medio de la oscuridad, intento seguir el destello en busca de un escape, de algo de luz, algo que me ayude a saber qué está ocurriendo y luego un estallido resuena, es ensordecedor y alguien está herido, me deja aturdida y solo puedo escuchar un zumbido durante unos largos segundos, puedo sentir mis manos temblando pero aún no puedo ver nada, me desespero un poco no puedo controlar lo que ocurre. ¿Dónde estoy? Quiero saberlo, pero todo es oscuro, confuso, diferente a la oscuridad a la que estoy acostumbrada, escucho voces, el ambiente es fresco, intento percibir tanto como me sea posible, pero me es difícil con tantos presentes, están rodeándome desde todos los ángulos, no tan cerca pero de alguna forma definitivamente sé que están ahí. Todo m
—Y cuéntame…¿cómo era tu anterior familia? —pregunta Alexander mientras nos conduce a la escuela.El uniforme es incómodo pero al menos es bonito, y como es una escuela privada no tendré que preocuparme que haya demasiadas personas, pero aún así siento el pecho apretado de pensar sobre qué podría encontrarme, sobre cómo me adaptaré y si realmente podré aprender.Así que agradezco el intento de Alexander por sacar conversación aún si es de este tema en particular.—Pues… eran malas personas —digo simplemente.Es difícil ahondar en los detalles de esta conversación sin que suene horrible, porque lo fue, y una parte de mí se siente avergonzada de tener que contar lo que pasó a Alexander, no quiero que piense diferente de mi ni cambie su trato cuando se entere de lo que pasó.—Ya veo… —responde cuando ve que no añado nada más— ¿Y qué hay de tu familia “original”? ¿Tienes algún recuerdo de ellos?—Sí, recuerdo a mis padres —asiento pensativa—, también tenía un hermano, mayor creo, en mis r