BUENA :
Corro a toda velocidad mientras Cera está detrás de mí para que me detenga. Salgo del castillo y literalmente la ciudad está destruida… Los cuerpos tirados en el suelo me dejan aterrorizada, jamás había visto algo así. Escucho gritos y voces en la plaza así que me dirijo hacía allá. —Por favor señorita… No vaya hacía allá. Escucho los gritos de Cera detrás de mí, pero no le presto atención. Al llegar a la plaza observo muchas personas que no pertenecen a nuestro pueblo que nos miran con odio. Mis padres están arrodillados delante de un hombre muy grande pidiendo piedad… Pero… ¿Qué está pasando? Pienso en mis adentros, mientras una lágrima baja por mi mejilla al ver todo este terrible desastre. Observo como el hombre donde mis padres están arrodillados empieza a olfatear el aire y dirige su vista hacía mí. Su piel es bronceada, es muy grande y fuerte, su cabello es largo y sus ojos de color gris. Cuándo sus ojos me miran un escalofrío recorre todo mi cuerpo al ver esa mirada de odio, y puedo ver como sus ojos se vuelven completamente rojos en unos segundos… Rayos… Son los lobos… No me moví ni un milímetro cuándo lo vi dirigirse a mí… Me sentía paralizada y aunque quisiera moverme, no podía. Sus grandes manos rodearon mi cuello con fuerza y me arrinconó contra una pared mientras arrancaba el collar qué me regaló Malon. —Te mataré aquí mismo, por haber matado a mi luna humana m*****a.Dice con la voz gruesa mientras siento cómo el aire escapa de mis pulmones. Sólo escucho los gritos de mis padres pidiendo que no me hagan nada. En una esquina observo a Malon qué tiene una extraña mirada, qué no sabría descifrar… Y en otro lado mi hermano luchando con unos de los lobos para acercarse a mí, pero no puede contra ellos… —Vaya, vaya, pero si eres la princesa… Tu inocente rostro podría engañar a cualquiera… Habla mientras me suelta de golpe y caigo chocando contra algunos escombros.Empiezo a tomar grandes bocanadas de aire mientra mis lágrimas salen como un río ¿Que he hecho mal para que me hagan esto? —¿Se encuentra bien señorita? Se acerca Cera asustada hacía mí, pero la separan con brusquedad. —Si te asesino ahora mismo sería una muerte muy fácil. Dice mirándome con tanto odio que bajo la mirada y luego se dirige a su gente. —Los humanos nos han traicionado asesinando a nuestra luna y nuestra gente cuándo se dirigían a proveerles de alimentos… De ahora en adelante permanecerán encerrados y serán nuestros esclavos… ¡Atarlos a todos! Dice con una voz tan fuerte que dan escalofríos. Los otros lobos empiezan a atarnos, creando una fila con nosotros. Con la mirada busco a Malon y este permanece mirando al lobo qué supongo es el alfa con odio. —Señorita… Escucho la voz rita de Cera. —Estoy bien Cera, no te preocupes…—Hagan silencio, no se les permite hablar. Nos grita un lobo. Cuándo empezamos a caminar por la fría nieve, empezó a caer la noche y era muy incómodo… No se nos permitía descansar hasta llegar al pueblo de los lobos… Esto era una terrible pesadilla. Los hombres lobos iban transformados en lobos mientras iban delante y detrás de nosotros vigilándonos… Pero ¿Que podíamos hacer? Empezamos a subir una enorme montaña cubierta de nieve y el frío y el cansancio me tenía casi al desmayarme, pero no podía permitirlo… Las personas que se desmayaban por el cansancio y frío eran abandonadas… Ya les pasó a tres del resto y los demás tratábamos de sobrevivir cueste lo que cueste. Cada cierto tiempo mis padres y hermano daban una miradita hacía atrás para ver si aún seguía con vida, y me partía el alma ver a mi madre llorando cada vez que miraba hacía atrás. El sol empezaba a brillar y este camino no tenía fin, al parecer a propósito tomaron el camino más largo. Horas después nos permitieron descansar porque ellos tenían hambre e iban de caza. Un gran grupo se fue junto al alfa y otros se quedaron cuidándonos. Me tiré al suelo y cerré los ojos para descansar mejor y recuperar energía… Es la primera vez que camino tanto… Todo me duele y ni hablar del inmenso frío. Alrededor de una hora más tarde llegan los lobos con un animal descuartizado y los demás convertidos en lobos empiezan a devorarlo. Al ver esto empiezo a vomitar lo poquito que tenía en el estómago… Nunca había visto un animal muerto, ni mucho menos que se lo coman así. —Pero qué delicada nos salió la princesita. Habla unos de los lobos transformados en humanos y empieza a reírse con algunos más. Bajo la cabeza pensando que siempre trato de buscarle el lado bueno a todo… Pero ¿Qué hay de bueno aquí?… Al caer la tarde llegamos al pueblo de los lobos qué es totalmente diferente al de nosotros. Simplemente es hermoso y muy organizado. Los lobos del pueblo nos miran con odio y asco hasta que llegamos a un lindo castillo enorme. Nos llevan por la parte de atrás donde se encuentra un enorme calabozo, qué a simple vista se ve asqueroso. —Permanecerán ahí hasta mañana, luego se les impartirán sus tareas. Nos habla un lobo qué al parecer tiene autoridad como el otro. Los demás nos desatan y nos tiran al calabozo como si fuéramos animales. Lo primero que hago es abrazar a mis padres y llorar en su pecho. —Todo estará bien mi niña. Tratan de consolarme… Pero se que nada estará bien, todo irá de mal en peor y odio ver a mi gente así. Estoy segura de que fue una equivocación, mi gente jamás haría algo como asesinar a alguien, son personas nobles y humildes.BUENA:Pasé el día pegada a mis padres, mi hermano y Cera, intenté acercarme a Malon, pero este estaba consolando a su madre junto a su padre que estaba algo conmocionada así que lo dejé para no molestar. Para la hora de la tarde nos trajeron un poco de comida que parecía sobras. Todos comimos una pequeña porción… Era mejor que nada… Aunque estuviera muy mala. Las puertas son abiertas y el lobo qué siempre estaba junto al alfa entra mirándonos a todos de manera seria. —Tú sígueme. Dice señalándome. —¿Y…yo…? Pregunto nerviosa. —Si, a tí princesita. Dice con brusquedad y me coloco de pie para seguirle. Observo a mis padres y hermano que me miran con tristeza, pero me lleno de valor y le sigo. Caminamos por un largo pasillo hasta llegar a una habitación con montañas de ropas. —Tú primera tarea será lavar toda esta ropa, no volverás a la celda hasta que termines y dejes todo bien limpio, el alfa revisará qué todo esté bien ¿Entendiste? Me pregunta con voz neutra y asiento var
BUENA:Camino detrás del alfa con las rodillas temblando de miedo y nervios. Miro su ancha espalda qué tiene el triple del mío y ni hablar de su tamaño es bastante alto... Su largo cabello desordenado lo hace ver muy guapo... Caminamos por unos interminables pasillos mientras no dejaba de mirar su espalda y redondo trasero... Siento mi cara caliente por estar mirando cosas que no debía así que dirijo mi vista a otro lugar que no sea su cuerpo. Llegamos a un enorme salón con varios platos, vasos y utensilios de cocina. —De hoy en adelante te encargaras de todos los platos vasos y utensilios de cocina, tienen que estar inpecable y si rompes unos de ellos pagarás con veinte latigazos ¿Quedó claro? Su gruesa voz retumba las paredes y su mirada de odio me asfixia. —Si alfa. Digo bajando la cabeza y con la voz inaudible. —Bién, por igual te encargaras de todas las ropas, si alguna queda sucia… También pagarás con latigazos, el agua la cargarás tu misma del lago para hacer tus oficio
BUENA :Sigo al guardia por unos interminables pasillos y luego unas largas escaleras… ¿Esto no tiene fin? Me siento bastante débil y la espalda me arde mucho. Una gran puerta de color negro nos da la bienvenida y entramos. —Aquí está la humana alfa. Dice el guardia bajando la cabeza en sumisión. —Bien, puedes retirarte Brandon. Habla el alfa sentado de forma cómoda en un mueble.El guardia se retira de inmediato y yo respiro profundo tratando de mantener el equilibrio. —Buena… Qué peculiar nombre ¿No? Dice mientras su mirada gris me atraviesa hasta los huesos. Bajo la cabeza manteniéndome recta sin moverme y siento los pasos del alfa acercarse a mí. Con sus grandes manos levanta mi mentón haciendo qué lo mire mientras frunce el ceño. —Tu olor… No termina de hablar cuando la puerta es tocada y me suelta de golpe. —Puedes pasar Mila. Dice mientras se sienta en su lugar sin despegar los ojos de mí. —Aquí está tu té mi niño, perdón el haberte interrumpido. Habla una señora
Buena :—Auch.Me quejo al sentir como me pica y me arde la espalda. —Tranquila, ya casi termino.Habla mariana curando mis heridas, pero la verdad duele mucho. —Duele mucho.Digo apretando los dientes y los puños. —Ya terminé... Eres muy cobarde pequeña.Dice colocándose de pies, mientras me arreglo este viejo y feo vestido de esclava. —Gracias Mariana.Le sonrío con sinceridad a la chica.—De nada y recuerda untarte esto cuándo te levantes, la herida puede infectarse.Asiento y suspiro mirando esta pequeña y solitaria celda qué desde hoy será mi hogar. —Mariana... pue... ¿Puedo pedirte un favor?—Siempre y cuándo esté a mi alcance... Claro que sí. Suspiro y la miro a los ojos. —Me gustaría que me ayudes a reunirme con... Con mi novio... Por favor.¿— Novio? ¿Tienes novio?Me pregunta alzando las cejas y asiento con una sonrisa tonta. —Si, ya nos íbamos a comprometer... Es el hombre de mi vida Mariana. Digo sintiendo mi cara roja. —Wooow, al parecer es muy respetuoso o no s
BUENA :Han pasado una dos semanas y no queda nada de la chica que todos servían y se veía bien las veinticuatro horas. Ahora soy yo las que les sirvo y ni hablar de mi apariencia refinada. —Vamo esclava, mueve esas manos no tenemos todo el día. Dice uno de los guardias qué me sigue y vigila todos los días. Enjuago la montaña de ropa un poco más rápido aunque mis pobres manos no dan para tanto. Cuándo el sol se oculta el guardia me lleva a mi celda, pero no sin antes darme un plato de cena. —Comer eso para que tenga más energía mañana. Dice dándose la vuelta para que yo entre en la celda. Sólo asiento y al entrar me encuentro a Mariana dentro… Esta chica ha sido como mi luz en medio de esta oscuridad. —Hola buena, tengo excelentes noticias para ti. Dice emocionada mientras se coloca de pies. Con un suspiro me siento sobre la vieja cama y empiezo a devorar la comida que está muy buena. —Lo siento, pero me dices ahora tengo mucha hambre. Hablo con la boca llena. —Está bien
MALON :—¿Le entregaste el frasco? Escucho una dulce voz a mis espaldas. —Así es… Pero ¿Qué haces aquí? Podrían darse cuenta, es peligroso. —Tranquilo, tengo todo controlado. Dice acariciando mi rostro y besa mis labios con pasión. —Cuándo el estúpido del alfa esté muerto… Seremos los reyes de ambos reinos. Me susurra sobre los labios y sonrío. —No veo la hora que ese día llegue. —Pronto llegará… ¿Podemos confiar en tu noviecita? —Por supuesto, es una tonta sin remedio. Sonrío mientras beso su cuello. —Se está haciendo amiga de la hermana del alfa… Hay que cuidarse de ella. —No te preocupes cariño trataré de que odie a todos. —Así me gusta, ven aquí. Dice ella quitando toda mi ropa para unir nuestros cuerpos. BUENA:Un día nuevo, con obligaciones demasiadas forzadas y sin poder dormir durante la noche. Miro el pequeño frasco qué me dió Malon y lo guardo debajo debajo del colchón… No, no haré algo como eso… He pensado en una mejor idea. Salgo de la pequeña celda, lavo
ALFA LUCÍAN :Mi nana se retira dejándome el té relajante qué es lo que más necesito en estos momentos… ¿En qué mierda estaba pensando? Me pregunto mientras me tomo el té de golpe. —Eros, ¿Por qué la esclava tiene un débil olor tan delicioso? Le pregunto a mi lobo a través del Link. —Estoy igual de confundido qué tú Lucían… Pero esa humana es nuestra. Dice suspirando y yo frunzo el ceño. ¿—Acaso estás loco? Romina es nuestra única mate. Digo mientras golpeo la mesa sintiéndome frustrado. —A Veces hay segundas oportunidades humano estúpido… —Es imposible, la madre luna jamás haría algo tan cruel como eso. —Alfa. Interrumpe Gerson la conversación con mi lobo. —¿Por qué trajiste ante mí a la esclava sin mi autorización? ¿Acaso quieres morir? Hablo con el ceño fruncido y mi beta Gerson inclina la cabeza en sumisión. —Mis disculpas alfa… La chica se miraba muy desesperada. Dice y suspiro mirando el techo. —Eso ya no importa… Dime Gerson ¿Estarías de acuerdo que permita ir a
ALFA LUCIAN :A primera hora en mi despacho se encontraban el rey y la reina del pueblo humano. La verdad que no queda nada de lo que ellos eran antes, se miraban demacrados y cansados. —Saludos alfa. Hablan inclinando la cabeza con respecto. —Tomen asiento. Digo de manera seria y ellos obedecen de inmediato. Observo a ambos pensando si es lo correcto lo que voy hacer. —He decidido dejarlos ir. Hablo directo sin rodeos. —¿Habla en serio alfa? Me pregunta el señor un poco incrédulo. —Por supuesto, pero antes haremos un contrato qué anula toda amistad con ambos pueblos, si uno de ustedes cruza la frontera del territorio de los lobos será eliminado de la peor manera, al igual que mi gente, nunca más pisaran sus tierras. Ambos reyes se miran entre sí por unos segundos y luego asienten. —Estoy de acuerdo alfa, sería lo mejor para ambos pueblos. Dice el señor con un suspiro. —¿Qué va a pasar con mi hija? ¿Se irá junto a nosotros? Pregunta la mujer y mi lobo gruñe tratando de