RAVEN— Sí… sí – respondo sin poder aguantarme más las ganas que le traigo.Quiero subir la cabeza para lamerle el pene, pero me mantiene prisionera con su mano en mi cabello.— Esto no es como tú quieras, es cuándo y cómo me dé la gana. Chúpame las bolas primero – me ordena y lo hago.Saco mi lengua y la paso por toda esa sensible piel, sintiéndolas latir bajo mis papilas.El pre semen baja desde la uretra y se filtra por entre los dedos de la mano de mi Alfa, acumulándose en la ancha base.Lo saboreo, tan frío y delicioso. Abro mi boca para meterlas dentro y chuparlas, primero una y luego la otra.De aquí saldrán mis preciados cachorros en el futuro.Cedrick gime y la mano en mi cabeza se aprieta en el límite doloroso. Me encanta que a pesar de hacerse el dominante, termina cayendo bajo mi control.— Mmmm… su majestad es una chupa testículos profesional – gruñe y me sigue hablando sucio, ordenándome en este juego de seducción donde ambos ganamos— Ven, comprobemos si también eres u
RAVEN— Ssshhh su majestad… sus pensamientos son mmmm tan lujuriosos, más rápido, ssshhhh más Raven, más…Sus caderas aceleran al igual que mi mano, tengo la sensación de que me toma por dos lados.Su olor frío me enloquece y el fuego ruge dentro de mi coño, que se derrama salpicando entre mis muslos, en un delicioso y arrasador orgasmo que me hace gritar de placer.Cedrick saca su miembro de mi garganta, permitiéndome respirar agitada y gemir con los ojos cerrados, apoyándome con la otra mano en su pierna para no caer hacia delante debilitada.Siento su caricia sobre mi cabello y mi sien, inclino la cabeza disfrutando de esta perfecta intimidad.— Lo lamento, se suponía que este era parte de tu regalo – abro los ojos y lo miro sentada en el suelo, su polla bien cerca de mí y aunque toda baboseada por mi saliva, aún muy en firme.— ¿Quién dijo que todo este excitante espectáculo no fue igual un regalo? – me responde, respirando también entrecortado, sin dejar de mirarme sexy y seducto
RAVEN “Yo quiero lo mismo que tú, sin Raven, tú mueres y yo, moriría también sin mi compañera, unámonos los dos para protegerlas” le dijo, mirando de frente a sus ojos ardientes, encendidos en fieras llamas. Fue la primera vez que vi a mi lobo de fuego ceder tan fácilmente y ser tan sumiso, más con otro Alfa. “Raven, amé que me tatuaras en tu piel, como amo todo de ti, nunca dejamos de buscarlas, de anhelarlas, de arrepentirnos. Déjame ser tu Alfa pequeña, deseamos protegerte y a nuestros cachorros. Queremos preñarte mi hembra y esta vez, estaremos ahí para ti, para siempre. Solo danos la oportunidad de ser parte de tu mundo, porque para nosotros, mi amada Omega, tú lo eres todo” Escondí la cara entre mis brazos y varias lágrimas de felicidad se escaparon Mi mano subió hasta su peluda cabeza mientras lo acariciaba en su suave pelaje blanco y él lamió mi mejilla, tan tierno y esponjo, hasta que sentí como algo bien duro y enorme, se clavaba entre mis nalgas. “Mmmm, cuando te mar
RAVEN Cedrick se ha parado en el sitio menos profundo, pegado a un borde redondeando de la poceta. Me hace descender y me encanta que el agua se siente tan fría contra mi piel en llamas. Nos llega apenas por los muslos en esta piedra plana donde estamos parados. — Te quiero ahora mismo apoyada en el borde y de espaldas a tu macho. Muéstrame ese coño real, que me lo voy a coger hasta el fondo – me hace promesas calientes y obedezco cargada de lujuria. — ¿A este coño real te refieres? – lo provoco inclinándome hacia delante, con los codos apoyados en el suelo de piedra y empinando las nalgas hacia él, abriendo más las piernas a su mirada pervertida. Llevo una mano hasta mi vulva y la abro por completo dejando la suave entrada rosada vulnerable. — Raven, después no llores mujer provocadora… — gruñe ronco, pero ya se agarra la polla con fuerza, regando el pre semen por todo el eje y su otra mano me nalguea y me aprieta. Sus dedos me acarician el coño que mantengo abierto, sacándom
CEDRICKAbrazo a mi hembra contra mi pecho, acostados de lado sobre la ropa seca y cerca del fuego creado por ella, que nunca se apaga.Nunca imaginé que la sensación de un lazo se sintiera así, tan pleno, tan satisfactorio. Es como si mi alma incompleta, hubiese encontrado su otra mitad faltante.Olisqueo en su nuca donde mis feromonas agresivas le anuncian a cualquiera que esta hembra me pertenece y es solo mía, mi Raven, mi reina, después de tantas zancadas del destino.Sin embargo, a pesar de esta locura que hemos hecho, no estamos para nada a salvo.Observo a mi alrededor, esta cueva subterránea, en este sitio hechizado que se ha convertido en nuestro refugio, sin embargo, de aquí debemos salir y el peligro, estará de nuevo acechando afuera.Nuestro cachorro nos espera y me preocupa su seguridad.Aunque sé que Raven confía plenamente en la bruja de su clan y sus protecciones, esa mujer me da muy mala espina.Saco mi brazo por debajo de su cabeza con suavidad y la acomodo sobre l
NARRADORA Vincent finalmente respiró aliviado, al ver que todas las locuras esas predictivas, no eran ninguna mala broma. Por momentos incluso pensaba que era algún hechizo de esa bruja para engañarlo, pero decidió apostarlo todo a ese arriesgado movimiento. — Lo soñé, sé que parece demasiado loco, entiendo que no confíes en mí y quizás no me creas, pero llevo noches y noches soñando con todo lo que sucedió – Vincent confesó sin rehuir ni un segundo la mirada de Cedrick, de frente siempre, porque no mentía. Ambos se quedaron en silencio y solo el eco del agua subterránea resonaba en la instancia. — Te creo, yo también tuve una revelación en ese acantilado, la Diosa, creo que solo nos está dando una oportunidad para sobrevivir a tanta maldad – Cedrick le respondió al fin y Vincent asintió, porque él sentía lo mismo en su corazón. Luego prosiguió… — Te vi en mis sueños congelando a esas horribles flores, luego parado en ese acantilado con Raven y al final, caían al vacío, grit
NARRADORA — Esa mujer odia a muerte a las Centurias, no parará hasta exterminarlas y si se obsesionó contigo Cedrick, fue por algo, si tú no estás, ¿a quién crees que trasladará su enfermiza obsesión?— A mi cachorro, pero nadie sabe que es … mío… — Cedrick se quedó pensativo, si ese hechizo embustero no lo engañó ni al él, mucho menos a una verdadera bruja.Sabría enseguida que Aidan era su descendiente y sentiría la magia de invierno en su interior.Estaba convencido de que ella buscaba a su tío y Aidan también era su familiar, obvio que iba a entrar en su radal.Su tío tendría que darle el frente a este enredo macabro.— Además, voy a aprovechar que ella estará concentrando su mente y su fuerza en el palacio, para hacer otra cosa que no me deja dormir - Vincent agregó de repente. — El idiota de Theodor tiene a todas las personas de esa manada, ancianos, mujeres, incluso cachorros recién nacidos, en unas sucias barracas muriendo de hambre, mi conciencia no me permite dejarlos, yo
NARRADORA— ¿Es muy lejos? No puedo irme tan lejos del palacio a jugar – Aidan, a pesar de su inocencia, era un niño muy inteligente.Ya habían caminado un trecho, casi corriendo, por el bosque que rodeaba el palacio y aún se encontraba dentro de las murallas.La doncella se dirigía al paso cerrado de las montañas, detrás del castillo, donde había un sendero secreto y pasaba un riachuelo que le permitiría escapar en una pequeña barca preparada previamente, llevándose a este valioso rehén.Le habían prometido mucho oro por este encargo y no dudó en aceptar.— Ya estamos llegando, chiquillo, solo camina más deprisa— apretó la mano del cachorro con fuerza, haciéndole daño y llevándolo dando tumbos hasta el riachuelo, que ya podía escuchar.— ¡Suéltame, me duele la mano! – Aidan comenzó a forcejear de repente— ¡Ya no quiero ir! ¡No quiero ningún dulce! ¡Suéltame!— ¡Te dije que ya estamos llegando, deja de ser tan mimado y malcriado! – lo jaloneó con algo de furia.Odiaba a este cachorr