VICTORIANo pude soportar estar un segundo más en el mismo espacio donde este Bastian, a primera hora de la mañana tome el avión que tenían a mi disposición y me marche, me despedí del señor Jackson, Bastian se despido de su hijo, sin embargo, ni se atrevió a verme, si lo hacía, no me iba a controlar, hundo las uñas a mis propias manos.—Es promesa de meñique ¿Verdad?—Promesa de meñique campeón, te prometo que pronto estaré por allá, te llamaré todos los días ¿Está bien? Debo hablarlo con tú ….—Comunícate a través de mis abogadosSiento la rabia invadir mis venas, no puedo evitarlo, no se merece que tenga consideración si ni siquiera es capaz de disculparse, yo sí tengo que agachar la cabeza porque me equivoque y ¿Él?—Entonces que así sea.—Sí, ni la pude ver, pero me escribió. Está bien, dijo que, en unos días, tiene libre.—Qué bueno, después de estar aislada del mundo, un poco de aire merece— Estoy hablando con Valeriy, sobre Charlotte, antes de irme le pedí un favor algo des
BASTIANYo la observo mientras arregla su cabello, siempre ha tratado de lucir perfecta, está acostumbrada a un estilo de vida que yo he ayudado a promover, aún recuerdo cuando la conocí.—Un hombre como tú no puede estar solo en una noche tan hermosa.—Solo viene a tomar un trago.—La soledad no es buena compañera, deberíamos tomarlo juntos, así nos hacemos compañía. Soy Natasha Lemos, vine de vacaciones a la ciudad.—Yo por trabajo.Sus ojos negros y su larga caballera llamaron mi atención, tan distinta a ella y eso buscaba, de un momento a otro me gustaba que alguien me admirara, que se preocupara por cosas de mi entorno, mi estilo de vida, cuando la llevaba del brazo todos la alababan, me decían que era muy afortunado de tener una mujer tan hermosa a mi lado.—Eres un maldito suertudo, tu novia es perfecta, te hará bien una mujer como ella en nuestro círculo.Comentarios como esos, he oído hasta decir basta en las reuniones a las que la he llevado. —¿Cuándo sale tu vuelo?
VICTORIA—Mami, ¿qué hora es?—Las tres de la tarde— Mi niño hermoso, le tiemblan las rodillas, mejor dicho, no las deja de mover ni un instante, mira hacia la puerta de embarque, la verdad no hubiera querido venir, pero mi hijo insistió tanto, yo también estaría temblando, sin embargo, se supone que soy el adulto aquí y no puedo mostrarme tan vulnerable.De pronto mi hijo va corriendo sin olvidar las flores que le trajo a su padre, unas hermosas lilas.—¡Papi, papi!—¡Campeón! — Extiende sus brazos para poder abrazarlo, de verdad que me siento tan conmovida, ver las sonrisas en los rostros de ambos, me deja impactada, llevo una mano a mi pecho, hasta quiero llorar, Ángel lo llena de besos, mientras Bastian lo levanta en el aire, aunque me siento enternecida por la escena, también me siento miserable por haberles robado a ambos una escena como esta.—Hola Victoria.No le contesto, porque de verdad no sé ni cómo comportarme.—Mami, mi papi dijo: hola, es que hace mucho ruido aquí, papi
—Doctor, no puede estar hablando en serio.—Fue en tiempo récord, no hay nada que se pueda hacer, solo usted decide la frecuencia con que su hijo ve a su padre. La juez solo aprobó un fin de semana al mes y con supervisión.—Pero es que sigo, sin entender, las razones que la jueza impuso para una decisión de esa magnitud. Bastian se va a morir.El doctor González me contó todo y no podía creerlo, es imposible para mí creer que Bastian haya consumido algo en los últimos meses, además de terminar preso por haber sido detenido en estado de ebriedad, no me entra en la cabeza, necesito hablar con él.—El niño ya está registrado a su nombre, sin embargo, como le digo, el tema de la custodia es otra cosa, el señor Jackson decidió llevar esto a la corte y tiene que asumir la decisión del juez.Agradezco su trabajo y me siento a pensar qué hacer exactamente, no puedo tomar una decisión a la ligera, se trata de mi hijo, de mi bebé, su seguridad está primero.…—Cariño, déjame un momento a sol
BASTIANEsto es una locura, no me he atrevido a contarle a mi padre, sobre lo que sucedió, quise hablarlo con Natasha, pero no tenía tiempo, decía, había una fiesta muy importante a la que debía asistir, mis amigos ya sé qué me dirían, fui un completo imbécil. Solo me vine a vivir tan cerca por mi hijo y no pensé verla con algún amiguito, la rabia me nublo y no fui consciente de mis actos, ahora estoy pagando las consecuencias de mis actos.—Dudo mucho que la madre te firme un documento para que lo puedas sacar del país cuando tú quieras.Fue lo que me dijo el abogado, si fuera al revés no dejaría que ni se acercara a mi hijo, soy totalmente consciente que el no cerrarme la posibilidad de ver y compartir con mi hijo, es un acto noble de su parte, pero no le quita culpa del tiempo que me perdí sin tenerlo conmigoDecido recoger a mi hijo, mientras las ideas se me aclaran, contrate un chofer, me quitaron la licencia por unos meses, así que no me quedo de otra, cuando pongo un pie aquí,
Una hermosa joven que sueña desde niña casarse con el amor de su vida, el mejor amigo de su padre, pero solo al cumplir la mayoría de edad, deja de soñar para volver su sueño realidad, hacer sacrificios y dejar las ilusiones por su matrimonio, uno lleno de amor y felicidad hasta que la tragedia los golpea, los secretos se hacen presentes y las mentiras piadosas se vuelven pan de cada día, ella es la viuda de su esposo, como enamorarse de alguien prohibido, él le salvó la vida y lo saco en su peor momento, no puede entregarle su corazón, no debe hacerlo, pero es tarde su corazón ya grita su nombre, no es una relación de tres, es un amor que no entiende razones.Ella ama a su esposo y su esposo la ama a ella, pero muchas veces por amor haces sacrificios difíciles de entender, como dejar que otro entre en su corazón para evitarle dolores mayores que una decepción amorosa. En esta historia habrá tanto amor que se tendrá que dividir en tres. Dicen que el orden de los factores no altera el
JAMESConocí a Victoria hace varios años, cuando visitaba la casa de su padre, un gran amigo de mi infancia y un gran amigo a lo largo de los años aunque que por circunstancias de la vida nos separamos, sin embargo, siempre mantuvimos el contacto, la vi con tan solo quince años y podía decir que era como un ángel, su castaña casi rubia y larga cabellera la hacía parecer eso un ángel con una hermosa voz, recuerdo que deseche esa imagen de mi cabeza, porque se trataba de una adolescente además de ser hija de mi mejor amigo adicional a eso le llevaba como treinta años, aún recuerdo cuando la encontré jugando con el hijo de un primo suyo, lo que me dijo.—¿Te gustan mucho los niños?No debí preguntar eso, sonaba escabroso viniendo de un viejo como yo, pero cuando se trataba de ella no sabía cómo actuar con coherencia.—Claro que sí, además, aún soy una chiquilla, por eso les tengo mucha paciencia, así dice mi tía: cuando crezca y sea ya todo una mujer adulta, seguramente tendré muchos ni
—Me gustas, sí, más que eso me encantas, pero … — No espere que ella se soltara el cinturón y se lanzara hasta donde yo estaba, no había ajustado el asiento porque todavía no había puesto la marcha, ni siquiera había regresado la llave al encendido, ella se amoldó tan bien a mis piernas que solo atine a tomarla de las caderas, me sentía como un maldito traidor con mi mejor amigo, pero era la mujer que deseaba con desesperación desde hacía años atrás, la mujer que había tratado de olvidar con otras tantas, estaba ahí sobre mí, mirándome como nunca pensé que lo haría alguna vez en mi vida, como si este fuera uno de los tantos sueños que había tenido en este tiempo, el deseo y el amor que sentía por ella, porque era eso, amor, si fuera netamente deseo ya me hubiera aprovechado tiempo atrás en tantas ocasiones que tuve a lo largo de los años, pero no lo hice, pero ella fue la primera en tomar la iniciativa en perder el miedo que siempre yo tuve, una chiquilla de menos de veinte años me es