El día que decidí volver a la casa de Mario, Brody se enfadó muchísimo conmigo repitiéndome una y otra vez todo lo que me hizo pasar, pero yo aún amaba a Mario y estaba segura de que, si le daba otra oportunidad, podría tener la familia que yo tanto deseaba y mi hija crecería teniendo a sus padres juntos. Recogí parte de mis cosas de casa de Brody ayudándome Mario a trasladarlas a su casa. Nada más llegar deje a mi hija con María para bajar lo que me lleve de la casa de Brody, escuchando de pronto un grito asustándonos Mario y yo. Corrimos hacia dentro de la casa, viendo a mi hija andar sola y al ver mi hija a Mario, escuchamos como decía ""PAPA"" cogiéndola en brazos su padre, besándola mientras le caiga alguna lágrima por sus mejillas. — Gracias cariño por volver conmigo y darme esta maravillosa hija, os amo mucho Erika — me dijo Mario Aunque dormíamos separados todavía, cada vez que nuestra hija lloraba por las noches, me levantaba viendo a Mario con su hija en brazos acunándola
MARIO La fiesta estaba siendo un éxito un éxito, y yo estaba contento de como los invitados disfrutaban de mi hija jugando con ella, aunque me faltaba lo más importante, mi mujer, pero cuando vi el semblante que tenía la cara de María toda mi felicidad se vino abajo, temiendo que algo pasaba, así que decidido me acerqué a ella para preguntarle si pasaba algo. -— ¿Qué pasa María? ¿Dónde está mi mujer? -— le pregunté -— No lo sé Mario, ay mi niña ¿Dónde estará?, vino un hombre que quería hablar con ella y Erika salió de la casa para ver que quería, pero no la encuentro por ningún sitio. — ¿Por qué no me lo has dicho antes, voy a buscarla -— le dije — Mario es mejor que llamemos a la policía, — me dijo Llame a mi amigo que era teniente en la policía, tardando unos minutos en llegar a mi casa, aunque a mí me parecieron horas. — Gracias por venir Robert, mi mujer ha desaparecido, según nuestra niñera vino un hombre a mi casa preguntando por ella, tienes que encontrarla por fa
MARIO Estaba teniendo pesadillas, veía a Erika muerta llamandome, me levanté de la cama asustado y empapado de sudor, me di una ducha y fui a la cocina a por un vaso de agua cuando de pronto empecé a escuchar mi móvil , lo cogí enseguida, sintiendo que algo malo habia pasado — Mario soy Robert – me dijo — ¿Has encontrado a mi mujer? – pregunté enseguida — Si, la han dejado tirada cerca de la puerta de urgencias en el hospital, pero tengo que decirte que no son buenas noticias — — Voy enseguida, luego me cuentas – le dije terminando la llamada Me fui a mi dormitorio, vistiéndome muy nervioso, me acerque al dormitorio de Maria sobresaltandose ella cuando la desperté. —¿Qué pasa Mario? — me preguntó — Han encontrado a Erika, está en el hospital, cuida de Lidia por favor – le dije Sin esperar a que Maria me respondiera, salí de mi casa, subí al coche y apretando el acelerador lo más que pude me marché a la clínica donde se encontraba mi amor, mi mujer. Cuando llegue y aparque el
Después de hablar con mi amigo, entramos en la clínica, cuando llegamos a la UCI, Maria se puso a llorar al ver a Erika con los tubos y las máquinas que tenía en el cuerpo, se acercó a ella besándole la frente y hablándole, después me acerque yo con mi hija, acerque carita a la mejilla de su madre manchandola de babas, Maria le cogió la mano a mi mujer hablándole mientras yo sentaba a mi hija en el regazo de su madre, moviéndose mi pequeña y chillando mientras se reía y fue cuando me pareció que Erika abría los ojos.saliendo Maria de la habitación corriendo para llamar al doctor, quedandome yo con Erika mirándola, porque deseaba que lo primero que viera cuando abriera los ojos era a nuestra hija y a un hombre que la amaba con locura.el doctor entró en la habitación dirigiéndose a la cama donde estaba mi mujer, le miro los ojo, le tomó el pulso, la examino y se dirigió a nosotros para hablarnos.— Parece que va saliendo del coma, dejenla descansar y si hay alguna novedad les aviso – n
MELISA Me desperté en la madrugada, sola en la cama, me levanté para ir a la cocina a por un vaso de agua, vi una luz tenue en el salón, abrí la puerta para ver si había alguien viendo a Mario con una botella de whisky y un vaso en ambas manos. Me acerqué a él mirándonos los dos a los ojos. — ¿Qué estás haciendo? — le pregunté — Ya lo ves, emborrachandome en casa, por no buscar a una puta de la calle y follarmela — contestó — Si quieres por mi no te prives, si tan infeliz te hago en la cama – le dije viendo de qué forma habría Mario los ojos, asustandome — ¿Erika? tu siempre me has echo feliz en nuestra cama,y en todo lo hemos echo juntos — me dijo — Mario estoy embarazada y no puedo hacer muchas cosas, pero si puedo hacer que me ames aún más – le dije Dejó el vaso y la copa en la mesita acercándose a donde yo estaba,puso su mano en mi nuca acercando despacio sus labios a los míos, besándonos los dos con deseo. – Has vuelto, ¿eres tú mi mujer? – me dijo llorando mientras me abr
Me llamo Erika, tengo veintidós años y hace un año que me quede completamente sola, ya que mis padres murieron en un accidente de coche. Gracias a los ahorros que tenían mis padres pude seguir adelante unos meses más, pero todo se acaba si no tienes quien te ayudé o un trabajo. Tenía que pagar el alquiler del piso, la Universidad y comer. Con la ayuda de mi amigo Brody empecé a trabajar en un Club muy selecto, ya que él trabajaba en ese local me consiguió ese trabajo, sirviendo bebidas en la barra a los clientes. Ayudándome así a salir adelante, siendo el sueldo y las propinas muy buenas, aunque lo clientes siempre intentaban que saliera con algunos de ellos, pero yo sabia para que, la mayoria. eran CEOS multimillonarios y siempre buscaban una cara bonita para una noche, aunque yo no era de esas mujeres. Yo soy morena y de una estatura no muy alta, pero mis ojos son de color verde llamando mucho la atención a los clientes, que el más lanzado me pedía relaciones, aunque la mayoría e
Un año despues Adelina cayo enferma, llevándosela Dios, pocos días despues. Volví a vivir con Brody, pero con lo que ahorré nos podíamos mantener mi hija y yo, ya que mi amigo cada vez que quería darle dinero me lo rechazaba. Un mes despues de morir Adelina, estaba en el salón jugando con mi hija cuando escuché como tocaban al timbre de la casa, abrí la puerta viendo a un hombre con traje muy caro en la puerta. — ¿La señorita Erika Williams? — me preguntó — Si soy yo, ¿Quién es usted — pregunté — Soy del bufete de abogados Grant asociados, le traigo una notificación para que mañana a las diez, se presenté en el bufete — me dijo dándome la hoja de la citación — ¿Para qué tengo que ir? — pregunté preocupada, pero se giró marchándose, dejándome dudosa Cuando vino Brody al medio día para comer se lo dije. — No te preocupes Erika, seguro que han cogido a los sinvergüenzas que te violaron y quieren llegar a un acuerdo contigo — me dijo — No lo sé Brody, estoy preocupada— — Mi
La ceremonia se celebró en el juzgado a las diez como me dijo Mario, siendo como testigos de la boda, mi amigo Brody y el abogado de Mario. Fue muy cortita, pero cuando nos intercambiamos los anillos y el funcionario nos dijo que nos podíamos besar, yo no sabía que hacer siendo Mario el que se lanzó a mis labios, dándome un beso que me dejo casi sin poder respirar. Cuando la ceremonia termino y me despedí de mi amigo las lágrimas se hicieron presentes en los dos. subiendome con mi hija despues, a la limusina con Mario, llevándonos el chofer a la casa donde vivía su madre Adelina. Nada más entrar en la casa, Maria la sirvienta me reconoció enseguida dándome un abrazo cogiendo a mi hija en sus brazos, besándola en sus gorditos mofletes. — Que alegría Erika, que seas tú la que se ha casado con Mario, ya temía que hubiese una de sus — Mario no la dejo terminar de hablar — María, no me gusta que hables así — le dijo Mario muy serio — Ya conoces la casa, acomódate donde quieras, yo ten