Aron MorganMi teléfono repica cuando Elizabeth está tratando de comer lo que le prepara, no soy el mejor cocinero pero lo que le prepare lo hice con todo el amor del que soy capaz, la veo masticar sin quitarle mirada de encima, pero el teléfono repica de nuevo y es mi hija por lo que respondo.—Hola. — Pienso que tal vez se entero de que saque a su mamá de la cárcel—Hola buenas noches, lo llamo porque estoy muy emocionada y no se a quien más llamar, para avisarle, ya le avise a mi novio. —Me dice ella.— ¿De qué se trata?— Pregunto y Elizabeth, levanta su mirada del plato, se que esta haciendo un esfuerzo sobrehumano por comer algo, es difícil comer cuando sientes que se te cerro el estomago, lo se no porque haya pasado hambre, pero si he tenido que rescatar a otras personas en esas condiciones no pensé jamás que me tocara rescatar a Elizabeth.—El investigador privado que contrato mi madre ha hecho muchos avances en la investigación y probo que todas las pruebas incriminatorias con
Aron MorganEl día pasa demasiado lento para mi gusto, me presento a dirigir en grupo Coleman como siempre pero solo estoy pendiente de las horas del reloj, casi no dormí en toda la noche, pensando en este día, en volver a tener a mis hijos frente a mí.Ellos y Elizabeth son lo más importante en mi vida, el motivo por el que hago todo lo que hago.Mi asistente no se presento a trabajar hoy, porque supuestamente se sentía muy mal, no puedo creer que se ponga a dramatizar por un simple rechazo, no quiero nada con ella, ¿Por qué no me busco hace un mes cuando tenía aun el rostro desfigurado?Odio a las mujeres como ella, es solo una interesada, pero de mi parte no lograra encontrar nada, fijo sus ojos en el objetivo equivocado.¿Está seguro de darme la noche libre?— Cuestiona por enésima vez mi guardaespaldas, es un puto grano en el culo, no entiende que quiero estar solo.—Sí, estoy seguro. — Respondo sin levantar la vista de los documentos, se como es se quedara al frente de mi casa cui
Elizabeth MorganSé que el hombre que estuvo en mi mesa, me salvo la vida, pero lo extraño es la interacción que tuvo con mis hijos el día de hoy, ellos generalmente no son tan abiertos con nadie, he sufrido tantas decepciones con la gente que tengo miedo a las intensiones de este hombre.Siempre soy cuidadosa de las personas que me rodean, el ha sido un apoyo incondicional para mi, desde que apareció en mi vida, pero cualquiera podría ser ese apoyo por interés…Incluso Christian que lo primero que hizo fue confesar por mi unos sentimientos inexistentes.Me miro al espejo y no veo en él la mujer atractiva que me dicen que soy, solo veo una vieja aburrida vestida de negro, me quito la ropa buscando algo que me guste de mi, y ahora hago una mueca, y me pregunto frente al espejo ¿Por qué insistes en hacerte daño?—La juventud se fue hace tiempo ya, mi piel no es la misma, estoy un poco flácida después de bajar tantas libras y además tengo celulitis, soy una mujer tan corriente, que no e
Elizabeth Morgan—No firme eso. — Dice la asistente de Christian, entrando abruptamente en mi oficina, donde estamos a cargo de la presidencia del grupo mi hija y yo de nuevo, ella como dueña y yo como su representante, o CEO.— ¿Por qué no puedo firmar?, es una propuesta de negocios increíble. — Le respondo.—Y es falsa, la empresa con la que firma el acuerdo es una empresa fantasma una vez firme usted paga una cantidad tan exorbitante que mandara a la quiebra al grupo Morgan, no se le ocurra firmar eso. — Dice ellas con la cara mortificada—.— ¿Quién fue el autor de esto Christian?— Pregunto con asombro jamás pensé que llegara a tonto—Sí. — Me responde ella, aun de pie y mirando hacia atrás como si alguien la estuviese siguiendo.— ¿Por qué haces esto?— Le pregunto.—Por venganza, el me trata como si mi hijo y yo no valiéramos nada, a mi me encantaría que usted tuviese una forma de mandarlo al diablo así yo quede sin trabajo. — Me responde.—Gracias. — Respondo agradecida y por lo
Elizabeth MorganEntro al restaurante antes de la hora, envió a todo el personal del restaurante a casa, después que tienen listas las comidas, mi equipo asume el puesto de ellos.—Me siento en la mesa y me sirven una copa de vino para calmar mis nervios. —Todo saldrá bien. — Me dice mi guarda espaldas, cuando hace su entrada mi cuñado, vistiendo elegante con un traje de Armani que le queda como un guante, debo reconocer que él es guapo, se parece físicamente a mi esposo, pero a mí me asquea todo lo que me ha confesado recientemente que siente por mí, para mí el es algo como un hermano desde siempre, no podría verlo de otra forma.Lamentablemente uno tiene que hacer lo que tiene que hacer, la esta estorbándome en el camino y tengo como quitarlo de en medio.—Buenas noches, mi reina, no tenias que hacer todo esto, eso me correspondía a mi. — Me dice dándome un beso en la mano, sonrió antes de darle las buenas noches.—Estas preciosa.— Me dice al tomar asiento a mi lado y viéndome de ar
Christian MorganMe siento entre la espada y la pared, pasan las horas de la tarde rápido, cuando quisiera que el tiempo se detuviese para buscarle una solución a mi problema.Estoy en las manos de Elizabeth, su ella quisiera me envía a la cárcel por fraude, no se me ocurre nada, me voy del grupo a las cinco de la tarde, y me meto a un bar cuando apenas el personal está limpiando para abrir en la noche.—Señor aun no abrimos. — Me dice la chica de mantenimiento, limpiando la barra.—Dame una botella de whiskies, del más caro y tomas tu propina. — Le digo entregándole tres billetes de cien.—La chica de inmediato asiente, toma el dinero en el delantal y coloca una botella, de licor frente a mí, con un vaso, lo destapa y me sirve, necesito relajarme para poder pensar con claridad, mi próximo movimiento.— La miro de arriba abajo y no está nada mal, ¿Cuánto me cobras para acostarte conmigo?— Pregunto, tomandome un trago.—No soy una prostituta. — Me responde entre dientes, apretando con f
Elizabeth MorganApenas se va, Christian, entran mis hijos a la casa en compañía de Jean Carlo y Amanda quien finalmente comprendió que entre su esposo y yo no hay más que una hermosa amistad.Abrazo a mis amigos y los invito a cenar, estoy feliz de haberme librado de una vez por todas del toxico de mi ex cuñado, no puedo creer lo mala persona que es, gracias a Dios mi esposo murió sin ver en la clase de cerdo que se convirtió.Por fin todos sonreímos en la mesa, por fin siento algo de paz, pero no puedo descuidar nada, solo porque Christian no este, hay muchas porquerías como el dentro de la empresa, aun el tiene aliados dentro, por lo que debo seguir alerta.Sin embargo después de una hora, me doy cuenta de que hay una persona que no sonríe, hablare con el después, medito, mi hija comienza a mandar mensajes por teléfono y sonríe, no tengo ni que preguntar con quien, la miro fijamente, hasta que se da cuenta que la estoy observando y guarda el teléfono apenada uniéndose de nuevo a la
Aron MorganEs muy difícil para mí estar en esta piel, que mi familia desconoce, verlos sufrir por mi muerte estando presente, han pasado casi cuatro meses ya y me rompe el corazón ver a mi hijo y a mi hija sufrir por mí.—Te extrañe.— Pronuncia mi hijo y me abraza, sin importarle el que diran, la sensasion que tengo de dicha es indescriptible, un abrazo era algo común y cotidiano antes entre nosotros, ahora después de este proceso valoro cada instante, cada gesto, cada detalle…Suspiro con el simple roce de las manos de mi mujer, cuando antes tenerla a mi lado era algo a lo que no le daba la debida importancia.´Pensaba erróneamente que no había algo que pudiese separarnos, y ahora estoy aquí, en mi casa como un invitado.—Quiero mostrarte algo.— Me dice el, como si fuese un secreto, tiene las mejillas completamente rojas.Mi hijo creció de tamaño, pero sigue siendo un niño muy inocente, ¿Qué será?.— Cuestiono interesado, debe ser muy importante para él como para no compartirlo con na