Capítulo 127

Al día siguiente los periodistas y paparazzis me hicieron muchas fotos y videos en el mirador del Empire State, en Manhattan. Acudí con un vestido verde agua, muy entallado, llevando el trofeo y acompañada de todo mi séquito. Ellas vestían los buzos que exigían los patrocinadores.

La rueda de prensa se hizo con mucho orden, sin empellones, por turnos. Yo les mostraba a los reporteros el trofeo sin despintar la sonrisa. Lucía mis pelos sueltos, aleonados y me sentía muy hermosa, sexy y sensual. Disfrutaba de la velada.

-¿Dejarás el tenis?-, me preguntó un reportero adivinando mis intenciones después que Marcial me pidió casarme con él.

-Sí, jugaré algunos torneos, me casaré con Marcial y dejaré el tenis-, anuncié. Eso ya lo había pensado toda la noche luego de una intensa y tórrida velada romántica, en brazos de mi ahora prometido en matrimonio.

-Se retira siendo la número uno del mundo-, dijo otro.

Eso también lo sabía. Ganar el Gran Slam de Estados Unidos, me catapult
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP