POV. DANTE.“Phillip me enseñó eso, me mostró todo lo que puedo ser… Sin tener que pensar en ti”Esa última frase de Mila, tallaba en mi cabeza, se hizo un silencio profundo entre los dos y yo no quería decirle nada más.Estaba molesto, confundido, dolido, pero sobre todo, sabía que aquello era cierto. Sabía que ese policía se le había metido hasta lo más profundo, la seguí en cada movimiento, en cada paso, en cada cita, cada sonrisa, cada noche que se quedó junto a ella, cada mañana que salía con el rostro pintado en sonrisas y sus ojos brillantes.Y sin embargo no hacía nada.¿Por qué?Simple. Yo la tuve y la perdí.La deje ir, la dañe y ahora ella estaba frente a mí aún más dañada porque el policía bonito y bueno había sido asesinado y yo la trate de traidora en frente de toda la familia.— Lo siento — dije con voz fuerte y acercándome a su camilla.— De acuerdo — dijo y sonrío.— Mila, de verdad lo siento.— De acuerdo — dijo de nuevo y se limpió las lágrimas mientras miraba por
POV. LAILA.Mi mente está dando vueltas, cuando sucedió el ataque estaba sentada en la gran sala de estar de la casa de Michael, su abuelo me miraba directo a los ojos, cuando una empleada muy graciosa, con pelo rojo y ojos verdes enormes entro corriendo y sin pedir permiso ni nada encendió la tv, se sentó junto al abuelo de Michael y suspiro.— Algo grave está pasando — dijo la mujer y todos prestaron atención a la pantalla.Y sí, allí estaban mis queridos primos en primera plana, Tom y Dante, luego la enorme casa de mi tío Seb y la familia entera siendo rodeada por helicópteros, policías y todo era un caos como si fuéramos alguna especie de mafia. Y bueno, yo no era tonta, sabía que el tío Bryan lo había sido, sabía que el tío Oli y el tío Eli ahora estaban más limpios, pero también sabía que mis primos no eran precisamente unos santos o unos chicos correctos, tal vez por eso seguía sin entender porque Mila suspiraba tanto por un chico como Dante. — Laila — sentí la mano de Micha
POV. LAILA. — ¡OTRO! ¡OTRO! ¡OTRO! La música estaba muy alta, las luces de colores casi me dejan ciega, mis piernas se movían al ritmo de la música y nunca antes había sentido tanta atención sobre mi como hasta ahora.Sí, todos los ojos de los allí presentes estaban sobre mí, yo estaba desinhibida claramente por la cantidad de alcohol que había bebido, pero no estaba ebria, cantaba a todo pulmón y la gente pedía una y otra vez que bebiera otro shot de tequila.Sonreí al hombre que me estaba vigilando desde el suelo y pude ver como tan sensualmente se mordía los labios al verme.Algo se calentó en mi interior.¿Por qué? No tengo idea, si mi mente estaba tan destrozada por lo que había visto de Michael, esa rubia, las palabras que dijo ella, su actitud…¿Cuál fue su actitud? Ni siquiera lo recuerdo, ahora solo sé que me entregaron otro chupito que bebí muy muy rápido y todo me dio vueltas, levante la mirada y todo volvió a ser igual.Estaba saltando sobre la barra y agitando mis br
POV. LAILA.— Laila — la voz de Will era un completo susurró. Lo mire fijamente y sus ojos verdes penetrantes, estaban clavados en los míos, mi espalda estaba pegada al frío auto que aguardaba por nosotros y sus manos sobre mis hombros.— Laila, háblame — dijo nuevamente.— Y-Yo… ¿Me pego? ¿Michael me pegó? — parecía que por alguna ilógica razón yo no podía creerlo.— Laila, te prometo que estarás bien, lamento no poder protegerte a tiempo, yo…— Me pego Michael, no tú. No es tu obligación…— Sí lo es, mi obligación es protegerte y ser tu…A medida que daba cada una de sus palabras, yo sentía como algo se iba rompiendo poco a poco, sentí como mis ojos se quebraban y mi garganta se ponía dura y dolorosa, mis piernas empezaron a temblar, mi estómago dolió y sentí miedo.— Shhh, Laila, cálmate — dijo Will nuevamente y su voz llenó mis oídos.— Sácame de aquí — dije titubeando y suplicando.— Sí — Will abrió las puertas del auto y me ayudo a subir, esta vez al frente a su lado, dio la vu
POV. LAILA.Mi mente estaba en otra parte, algo así como una nebulosa, un poco en blanco pero también llena de estrellas brillantes y de colores, mi cuerpo se sentía muy liviano, tanto que si el viento soplara yo estaría varios metros lejos del suelo.Sí, así me hizo sentir Will durante la noche y ahora que al fin abrí los ojos y me doy cuenta mirando el celular que son casi las 9 de la mañana, que nunca antes nadie me había tocado de esa manera, ni me había llevado a tal punto de placer como lo hizo él.No, ni siquiera Michael cuando sentí que él me estaba dando todo lo que yo deseaba o necesitaba. Me senté sobre mis codos porque sentí el vacío en la no tan grande cama de Will, la sabana se resbaló más abajo de mis pechos quedando debajo de mi ombligo y vi una marca un tanto morada con rojiza sobre la delicada piel de esa zona, reí, me mordí los labios y cerré los ojos con una expresión de felicidad que no podía comprender.— Buenos días — dijo Will entrando y torpemente yo intenté
POV. TOM.Esta vez creo que si me excedí. La piel me arde un poco más de lo que había esperado, pero es que el golpe había sido muy fuerte contra el asfalto, la sangre siempre había sido escandalosa, pero esta vez la manga de mi camisa estaba completamente empapada.Eran apenas las 5 de la mañana, así que el turno aún no cambiaba, faltaban 30 minutos, sabía que era el tiempo preciso para entrar por la sala de urgencias, pero aún no la veía llegar. Ya me sabía su horario, estaba perfectamente sincronizado con él, venía aquí cada dos o tres días buscando ver sus ojos y que no se me olvidaran, pero hoy por alguna razón parecía diferente, de pronto la puerta trasera por la que siempre ingresa se abrió y ella salió cayendo de rodillas con el rostro lleno de lágrimas y el perfecto vestido que tanto me gusta verle puesto rasgado y abierto violentamente en la botonadura, sentí que la ira cubría mi mente, que todo estaba mal.Corrí en su dirección y la ayude a levantar, la tome entre mis braz
POV. TOM.Dos semanas.Luego de Tres meses y dos semanas, Bianca había sido la primera mujer en decirme que NO, en ignorarme y en enviarme al demonio.— Hola — Bianca se sentó frente a mí, encendió un cigarrillo y bebió del café que yo le había pedido previamente.— ¿Cómo está Piero?— Siendo un dolor de cabeza como siempre — dijo mi adorada prima luego de que soltó el humo del cigarrillo.— ¿Por qué pelean tanto? — pregunté inquieto y reí.— Amor, supongo. Además de que siempre quiere lo que yo ya tengo.— Y tu lo que es de él.— También — río mientras bebía café y me miraba. Sí, así era mi querida prima Bianca, la hija del tío Antonio y de la tía Marie, ella y su hermano Piero tenían una relación de lo más extraña y por favor no me malinterpreten, pero siempre estaban peleando, aunque en el momento en el que se necesitaban eran demasiado leales y fieles, dispuestos a dar su vida el uno por el otro.La verdad era algo que no podía entender, además de que personalidad naturalmente reb
POV. BIANCA (ENFERMERA).— ¿Cómo te sientes? — le pregunté a Nani cuando empezó a cabecear y a abrir sus ojos.— Mi cabeza, siento que va a estallar.— Es por el azúcar, vas a estar así un par de días más.— Las odio — dijo mientras empezaba a llorar.— Nani, ¿qué pasó?— Esas chicas, de nuevo, ellas no… No soportan que algunos chicos de la escuela se me acerquen, dicen que soy muy pobre y fea para tener la atención de los chicos, así que… Bianca — me llamo como resignada —, te amo y eres mi hermana, haz hecho lo mejor por mí, lo haz hecho todo, pero quiero volver a la escuela pública.— Nani tu educación allí no…— Prefiero tener una educación promedio y cuidar mi salud mental, casi me matan, de no ser por ese tipo que sacó el arma y las asustó, yo… Nadie más me hubiera ayudado y lo sabes. — ¿Arma?— Sí, el las espanto, el problema es que m e soltaron y caí desmayada a la fuente, casi me ahogo y mi cabeza.— Recibiste 6 puntos.— ¿Seis? ¡Carajo! — Iré al colegio, pediré los videos