CAPITULO 58

Familia en ese momento tenía muchas preocupaciones por Francisco la verdad es que lo último que hubiera querido era hacerle daño, una buena persona como él era muy difícil de conseguir en la vida.

Francisco le había ayudado a salir de la calle donde lo habían dejado Raquel y su nuera Juliana, había estado con ella para los momentos más críticos y se había convertido en un padre para su hijo.

Lo último que hubiera querido en el fondo de su corazón era perder todo lo que había logrado durante todo este tiempo y que parecía volver a en un círculo que nunca pudo entender.

Lo único que quería en ese momento era tomar su mano y decirle que le tenía un gran cariño y que lamentablemente aunque el amor no llegó entre los dos y siempre iba a existir un cariño mutuo.

— Se que a nadie me va a amar como tú me amaste, pero te agradezco que hayas tenido la madurez de entender los predicamentos en los que me encuentro — Amelia le entrega el anillo de compromiso que en algún momento simbol