"Cada uno de nosotros guarda un pasado, un pasado que nos marca y nos destruye. Ninguna persona no ha pasado por el dolor, el sufrimiento y el temor. Así como todos conocemos la alegría, también todos conocemos la tristeza"Kaiden Warren.Todos tenemos un pasado. Todos hemos experimentado el dolor, quizás de un ser querido o de alguna situación en particular, nadie está excepto de librarse de los dolores de la vida.Gilmore no se mueve y su respiración se torna irregular. De inmediato la agarro en mis brazos para ponerla cerca de la chimenea.—No puedes dejarme aquí solo, Gilmore —digo débilmente. No puedo perder a dos personas en el mismo año. Me niego rotundamente.Paige Gilmore. La novia de mi hermano.Desde niños hemos tenido una mala relación, quizás porque siempre hemos empezado con el pie izquierdo.Ella piensa que la odio, pero no es así. ¿Cómo puedo odiarla?Sin embargo, tampoco es mi persona favorita. Los dos hemos hecho cosas al otro con la intensión de lastimarnos.Ahora p
"El dolor nos cambia, los sentimientos cambian, y nuestro corazón se rompe en varios pedazos, solo si somos resistentes podremos enmendarlo"Paige Gilmore.El amor nos hace querer.El dolor nos hace cambiar.Hay un gran error cuando se dice que el amor es difícil.Complicamos el amor, porque lo vemos como un sufrimiento, cuando entendemos que el amor es paz y calma es amor verdadero.El último recuerdo que tengo al despertar es "he sobrevivido"No recuerdo lo que sucedió ayer. Mis recuerdos se desvanecen desde el momento en el que entré con Kaiden a la cabaña. Miro mis prendas y me doy cuenta de que estoy solo en mi ropa interior.Pienso lo peor. ¿Acaso Kaiden y yo...?Trago en seco, abriendo los ojos tanto al punto que parecen salirse.¿Kaiden y Paige?, ¿haciendo el chiqui chiqui?No.Imposible.Eso es una locura.¿O sí?Hago una mueca de asco.Soy lo peor del mundo.No. No haría eso ni drogada.Debe haber alguna explicación.Al menos me aferraré a ella como mi única esperanza.Obser
"Tarde o temprano, cambiarás. El pasado, el presente y el futuro te harán ser alguien completamente diferente"Paige Gilmore.Luego de que Connor me dejara en las manos del lobo, le dije a mis padres que la profesora Clarise quería hablar con ellos.Papá me dio una mirada juzgadora en cuanto le explique la situación. Los tres estamos sentados en la sala, mamá y papá me miran de una forma distinta, por mi parte, retuerzo mis manos con fuerza.—¿Por qué estás haciéndote esto, Paige?—preguntó mamá.—No lo hice a propósito —murmuré.—¿No lo hiciste a propósito? —repitió, papá enojado. Se levantó de su asiento sin poder contenerse —, ¿Qué crees que haces, Paige?, ¿ahora serás esta persona?Mi padre cerró ambos puños. Nunca lo había visto tan enojado.—Papá —empecé, con voz suave.—No, Paige —dijo rotundo —. Escucha bien lo que voy a decir.—Robert —interrumpió mamá, tocando su brazo. Papá no le prestó atención y siguió. Baje la cabeza.—No, Elise. Hemos aguantado sus faltas de respeto por
"No puedes ser la mujer que necesita a un hombre, sé la mujer que un hombre necesita"Paige Gilmore.Es difícil aceptar lo diminutos y frágiles que somos, partículas tan densas que apenas nos vemos, pero capaces de causarnos tanto daño. Nos arrastramos por la vida, obsesionados con preocupaciones que nos desbordan. ¿Para qué? ¿Al final, no terminamos todos en un ataúd, olvidados? Nos aferramos a lo que no podemos controlar, y así nos va, débiles y desgarrados, como si la vida fuera una guerra sin sentido.Ese día, llegué a casa tan ligera como una pluma. Durante el trayecto en taxi, dejé que el peso del dolor se deshiciera de mí, como si cada gota de tristeza se evaporara por la ventana. ¿Era eso lo que quería Kaiden? ¿Había logrado lo que esperaba de mí? ¿La paz que había anhelado finalmente se había alcanzado?Al entrar, el silencio en la casa me rodeó como una niebla espesa, pero todo se rompió en un instante. El sonido de los sollozos de mi madre bajando las escaleras me golpeó co
"En tus ojos veo mi felicidad y mi condena, porque amarte me consume, pero odiarte me duele."—¿Qué es difícil? ¿Un amigo? ¿O algo más?Oh, iba a matarla viva.—Es el hermano de mi novio fallecido.Las palabras salieron de mis labios con una dureza que ni yo misma esperaba. Zoe sonrió, satisfecha, como si hubiera ganado algo en esta conversación. Pero mi declaración dejó un peso en el aire que ni ella pudo ignorar.Una sombra cruzó el rostro de Kaiden. Duró un segundo, pero fue suficiente para que notara el dolor reflejado en sus ojos antes de que lo escondiera detrás de una sonrisa forzada.El silencio cayó entre nosotros como una losa. Pesado. Insoportable. Miré a Kaiden y vi cómo su expresión se tornaba tensa. Sus labios apretados, la mandíbula rígida, sus ojos evitando los míos como si quisieran huir de la verdad que acababa de soltar.Me sentí mal.—¿Sabes? —murmuró al fin, su voz apenas un susurro—. No es fácil escuchar eso.Su confesión me golpeó como una bofetada. Era evidente
"El amor puede nacer en el momento que menos esperes"Paige Gilmore.Mi vida parece una maldita serie turca.Desgracia por desgracia.—¡Estás loca, Gilmore! ¡Un cerdo es más inteligente que tu terquedad!—¡Deja de gritarme! ¡Estoy lo suficientemente molesta, no necesito más leña, tengo suficiente para despertar el fuego!—¿Qué haremos ahora?—presionó.Saque mi teléfono y apenas lo encendí, se apagó. Mierda, ¿por qué siempre pasa eso cuando más lo necesitas?—Mi teléfono está muerto.Kaiden alzó los brazos al aire, —¡Bravo, Paige! ¡Bravo!—Cállate, Kaiden.Escuche que dejaba escapar un suspiro.—¿Puedes decirme que demonios sucede contigo?Miré a Kaiden y su expresión de enojo era inconfundible. Su mandíbula estaba apretada y sus ojos centelleaban con frustración. No había sido mi intención quedarnos atrapados, pero la verdad era que me enojé mucho.—¿En serio, Paige? ¿Puedes creer que esto esté sucediendo?— Kaiden rompió el silencio, su voz tensa y cargada de irritación.—No fue a pro
"Un simple roce o una simple mirada dirá más que mil palabras al aire"Paige Gilmore.Había hecho las paces con Warren.La tensión acumulada durante años finalmente había quedado atrás. No éramos mejores amigos, ni mucho menos, pero al menos podíamos compartir un espacio sin que las palabras se transformaran en cuchillos. Para mí, eso ya era un gran logro.Sin embargo, después de nuestra última conversación, no podía dejar de preguntarme si había hecho algo mal. La duda se había instalado como un huésped incómodo, recordándome cada palabra, cada gesto.Saber que Chris había pensado en mí hasta el último latido de su corazón me destrozaba. El amor es tan fuerte, tan denso, que a veces te hace perder el rumbo, como un faro cegador en medio de una tormenta. El corazón no piensa; simplemente actúa.Por otro lado, Adrián seguía intentando juntar los pedazos de sí mismo. Mamá lo llevaba a terapia, y, aunque trataba de ser fuerte, a menudo la escuchaba llorar en las noches, ahogando sus soll
"Cuando una persona muere, mueren millones de corazones"Paige Gilmore.La brisa nocturna soplaba suavemente, arrastrando el crujido de hojas secas que caían de los árboles cercanos. El fuego chisporroteaba, enviando destellos dorados y anaranjados hacia el cielo estrellado, como si intentara establecer un diálogo silencioso con el infinito. Me acomodé en la silla plegable, disfrutando del calor que emanaba de las llamas, un abrazo invisible que me hacía sentir cálida y en paz.A mi lado estaba Kyle, con su risa contagiosa y esos ojos vivos que parecían reflejar cada chispa de luz. Hablaba con una energía desbordante, gesticulando como si cada historia fuera una obra de teatro improvisada.—Y entonces el oso... ¡El oso simplemente se detuvo y nos miró!— exclamó, con una expresión exageradamente dramática que hizo que no pudiera evitar sonreír.Kyle tenía ese don especial para convertir incluso los momentos más mundanos en relatos épicos, y en ese instante, su voz era todo entusiasmo y