—Entra, Miguel. Con una mueca, Miguel subió y se deslizó por el asiento de cuero negro nuevamente ,contento de haber podido estar al aire libre, por un breves momentos. En el tiempo que estuvo afuera de coche, Val estuvo en el teléfono todo el rato después de colgar le instaló a subir al coche de manera rapida. Una vez abordo Valentino le puso al tanto del incidente de la salida del aeropuerto, había sido una banda local quien ejecuto la acción. Pero durante el interrogatorio no habían obtenido ninguna informacion útil mas allá de que su contratación se habia realizado a traves del mercado negro por un valor de más de cien mil dolares americanos. Cincuenta porciento se habia depositado en las arcas de su organización y el otro cincuenta restante se entregaría cuando el trabajo estuviera hecho. Había dispuesto tres grupo para matarlo y solo uno los habia emboscado, así que todavía estaba en un peligro mortal. No ocurrirían más paradas inprevistas como esta hasta llegar a su desti
Roman tenía que haberlo sabido también. Valentino nunca había visitado el pequeño apartamento donde Roman habia estado viviendo esporádicamente durante casi veinte años, a pesar de que se encargo de su seguridad y sabia toda las cosas necesarias y veía grabaciones con regularidad, nunca se atrevido a poner un pies alli. Todavía recordaba cuando Roman le informo su desicion de quedarse en esa ciudad para vigilar y cuidar de Miguel. Ahora estaba seguro que el astuto viejo habia sabido que Miguel era su compañero por esa razón nunca le presionó para que fuera directamente con el y le facilito las cosas cuando organizaba la seguridad durante el periodo que iba a estar fuera de la tierra del clan, jugo con el a lo largo de los años dejando saber cosas del chico aquí y alla. Y pidiendole que comprara cosas que el le llevaria cuando regresara alli. Todavía recordaba el día que se paso escogiendo un libro para el chico al final no habia podido decidirse y le regalo la saga completa. Gracia
Valentino sentía que lo que iba hacer era malo, era como si fuera un ladrón tomando algo precioso para si mismo por un breve instante miró al frente del vehículo antes de permitirse un pequeño toque, acariciando con el dedo la parte superior de la mano del chico, una descarga le sacudió, su dragón se agito en su interior, miro al frente temiendo de que el guardia que conducía o el copiloto se diera cuenta de la anomalía en su comportamiento. Cuando vio que Miguel se inclinaba hacia el, rápidamente retiró su mano. No se le permitía a si mismo tocar a Miguel mas de lo necesario y solo cuando sitio que estaba en peligro, el no era tan noble quería más y no se podía dejar que su instinto lo dominará. Temia que el chico luego de saber la verdad descubriera el secreto de su corazón, ya sabía que eso iba a volver a Miguel loco, pero las leyes eran leyes y estaban ahí por una razón, incluso las antiguas que no se habían movido al siglo actual. Sin embargo, no pudo evitar devolver la sonri
—Mi nombre nunca a sido Aguilera o Grnezdo, al final es el mismo resultado no soy parte de tu clan. Solo soy alguien a quien Román escogió ...— Valentino deseaba poder tener a Roman ante él, qué rayos pretendía al dejar a oscuras a Miguel. No le había dejado ni siquiera una simple pista, nada estaba en una total oscuridad sobre quién y lo que era. Val sonrió al chico, tenía que contenerse se repetía mentalmente así que solo le espantó sin darle margen a refutar su afirmación.—Ahora lo eres. El ceño de Miguel se profundizó, arrugando su frente aún más. ¿Qué quería decir aquello? —¿Estás seguro de que así es como funciona? — Miguel no quería complicaciones — Heredé el dinero de Román, no su familia. Oh, si solo él lo supiera, Pensó Valentino ... se estaría trepando por las paredes. Llegado el caso no podía descartar que eso ocurriera los dragones les encantaba escalar cuando cambiaban entre más alto mejor, así sus vuelos eran más salvajes y desafiantes con los vientos.— Román te h
El estómago de Valentino se anudó al darse cuenta de que también guardaba cosas al hombre que poseía su corazón, pero no tenía elección. Había jurado guardar el secreto hasta que llegaran a casa. El peligro para Miguel estaba siempre presente y no queria cometer ningun error. Hasta que estuviera detrás de los muros de la finca, Valentino tendría que contenerse la lengua para no revelar nada que pudiera alterar el curso de las acciones trasadas. Un vehículo se estrelló de repente contra el lado del coche. Valentino debería haber estado preparado para eso, debería haber estado preparado para cualquier cosa. Estaba consciente que la vida de Miguel valía una pequeña fortuna y que los asesinos no decidiría en su empeño tan facil. Su mente estaba en lo que Miguel le decía y en como evitar hablar de más, para un dragón negarle a su pareja las cosas era algo imposible y el estaba luchando en todo momento para no hablar y decirle todo. Valentino todavía fue capaz de agarrar a Miguel y en
Valentino no se espero que atacaran de esta manera si bien sabia que los ascesinos contratados no se rendirian, el ataque fue inesperado mas aun por la cercana al primer anillo del portal. Empezó a preguntarle a Miguel otra vez si estaba bien, ya que eljoven habia demorado en responder y la respuesta que le dio aunque indicaba que estaba bien, Val nose la habia creido del todo pues a este le habian intentado quitar la vida dos veces en menos de nada.Se volvió hacia el otro lado de la pequeña zona abierta donde estaban. Y comenzo analizar con presicion sus proximos movimientos. Apreciaba el hecho de que Yuno estuviera interrogando a los que los golpearon en el otro lado del vehículo. Había algunas cosas que Miguel no necesitaba ver hasta que todo le haya sido explicado en un entorno calmado y seguro. Como el hecho de los poderes latentes en cada uno de ellosLas técnicas de interrogación de Yuno era una de ellas era indagar en las mentes haciendo que las personas revivieran sus ma
— Buenas tardes, ¿Estoy hablando con el señor Torres de Aguila? —Preguntó una voz en el teléfono Miguel parpadeó, hacia solo dos horas que habia llegado de su trabajo nocturno y estaba hecho polvo, habia ido directo a su cama sin cambiarse la ropa, solo queria caer en la superficie plana y dormir doce horas seguidad. Su cerebro aun no estaba del todo despierto cuando volvio a escuchar la voz repitiendo la misma pregunta. ¿Cuándo fue la última vez que lo escuchó de esa manera? Ya ni se acordaba. —¿Sí? —Me llamo Dimitri Vitali y soy el abogado acargo de los asuntos del señor Aguilera, Vitali y Asociados, somos un bufete de abogados en Man... —Ya sé quienes son— dijo. No podía pensar en nadie en la isla de Manhattan que no hubiera oído hablar del prestigioso y misterioso bufete de abogados. Representaban a algunos de los clientes más grandes del país y existen rumores de que tambien tenían clientes muy poderosos y con mala reputación al rededor del mundo. Simplemente no entendía por
Cuando llegó el coche para llevarlo a su reunión, Miguel era un manojo de nervios. Por su vida, no podía entender por qué un bufete de abogados elegante tendría la necesidad de hablar con él, habia analizado cualquier esenario posible elmotivo que podia tener Roman para contratar un abogado pero le era imposible encontar una razon en concreto. No era como si tuviera familiares perdidos que de repente iban a dejarle un montón de dinero, la sola idea era un chiste y una broma de mal gusto. Era hijo único y sus padres habían sido hijos únicos de eso si estaba seguro. Miguel no tenía ni idea del resto de su familia, los pocos recuerdos que conservaba de su Pá el nunca mensiono un pariente y despues de que su padre fallecio y tuvieron que sobrevivir a duras penas durante varios años estaba convencido que solo su madre y el. Bueno hasta que Roman aprecio en su vida ocupando un lugar importante. El conductor estaba esperando a Miguel en el coche cuando salió del apartamento. El hombre de