—¿Qué?— Erika estaba llena de incredulidad. Sin embargo, segundos después todo comenzó a hacer click dentro de su cabeza, uniendo cada una de las piezas, —Claro, tú enviaste a Celia Samaniego para enamorar a Gaspar, casarse con él y después robarle todo.

—Veo que eres tan inteligente, Erika.— Daphne le acaricio un mechón de cabello con mucha delicadeza, —Pero también le pedí que se hiciera amante de Bruno. El imbécil no sabía que Celia lo estaba usando para robar toda la fortuna Lombardi.

—Pero sus planes se vieron frustrados cuando lo descubrí todo.— Dijo Erika con una sonrisa. Daphne le devolvió una mirada asesina, —Ahora ninguna de ustedes va a poder tener nada.

—Al menos vamos a vivir muchos años más. Tu ciclo en el globo terráqueo acaba de finalizar.— Daphne sacó un arma de fuego y la apunto al pecho, —¿Alguna última palabra, abogadita?

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—¿No le has comentado a nadie de lo que ha pasado entre nosotros?— Ezequiel hablo con su típica voz llena de frialdad cerca