—¿Cómo puedes decir que me amas?— Gaspar estaba lleno de incredulidad, —Celia, tú eres incapaz de amar a alguien. No sientes amor ni nada por el estilo.—Yo te amo y quiero que volvamos a empezar, ¿Qué te parece si nos vamos lejos y nos olvidamos de todo? ¿Qué te parece si empezamos una buena vida?—¿Te estás escuchando? Tú no eres capaz de amar a nadie... ¿Por qué no eres capaz de entregarte? —No me puedo entregar y si soy capaz de delatar a los verdaderos culpables.— Celia se sentía orgullosa de sus palabras, —Tan pronto caiga, ellos caerán conmigo.—¿Quiénes son ellos? ¿Son de la familia o allegados?— Insistió él, dando dos pasos al frente con total normalidad. Celia estaba confundida, sin embargo, estaba confundida, —Dime sus nombres y puedo quitar cargos en tu contra.—No creas que eso es tan fácil. Gaspar, si delató a esas personas, es probable que me maten o busquen manera de poder silenciarme.— Celia apretó los labios, —Vamos. Tenemos que huir juntos y vivir nuestro amor por
—Primero necesitamos que te calmes, ¿Qué está pasando, Ángela?—Esa mujer está acá en la mansión. Al parecer tiene un arma de fuego...— Ángela se quedó en silencio, —Ahora mismo la estoy viendo desde la ventana de mi habitación. Ella es una mujer rubia.—¿Te sabes su nombre? ¿La conocemos?— Gaspar estaba angustiado.—Nunca la he visto en mi vida. Además es primera vez que le veo la cara.— Contestó Ángela, —El caso es que creo que ella fue la que mató a Tania y Erika.—Ya vamos para allá, Ángela. Necesitamos que te encierres en tu habitación y si es posible, métete bajo la cama.— Le ordenó Adam. Michelle finalizó la llamada telefónica y dejo su celular entre sus piernas, —¿Creen que esa sea la madre de la que nos hablo Celia?—¿Una rubia? ¿Qué relación tiene esa mujer con la familia?— Gaspar ahora estaba confundido y su ceño cada segundo más fruncido, —Ni siquiera tiene nada que ver con Erick Jones.—O tal vez ellos dos si están relacionados.— Dijo Adam. Michelle sintió un mareo que
—Me parece una fabulosa idea que mi tío Adam y su esposa Michelle asuman el cargo de presidentes de Choco Lombardi.— Ángela estaba sonriente. Ahora se notaba más calmada, después del hecho que acababa de experimentar, —Es momento de que usted abuelo ponga las fichas en sus lugares correctos.—¿Eso quiere decir que después de su decisión, Scarlett ni Álvaro tendrán derecho de reclamar nada?— Michelle estaba confundida y al mismo tiempo interesada.—La respuesta es que no. Ellos no tienen derecho de reclamar la sucesión ni mucho menos las posesiones de Choco Lombardi.— Contestó Gaspar, —El embarazo de Scarlett ya no le será favorable para su plan.—Al que le va a pesar la noticia es a Ezequiel. Ese hombre es ambicioso y nunca le gusta perder.— Comentó Adam.—No todas las guerras se ganan. Pero ese infeliz debe entender que mi decisión está tomada...— Gaspar probó su café y los miró a todos, —No tengan miedo. Ezequiel puede cometer acciones peligrosas. Pero eso no nos afectará.Adam habí
—Y vas a seguir con tus cosas.— Michelle miraba a Bruno de manera aburrida, —¿No te cansas? ¡Acepta de una vez que quedaste fuera de toda posibilidad de adquirir las posesiones de Choco Lombardi!—¿Qué es lo que vas a hacer?— Ángela ladeó la cabeza, —¿Planeas matarnos a las dos con tal de quedarte con todo? ¿Ese es tu absurdo plan?—No estaría tan mal llevar a cabo el plan.— Bruno parecía sumergido en la estúpida idea de matar por dinero, —Pero eso tiene demasiadas desventajas.—¡Claro! Ángela y yo vamos a luchar hasta el final. Nuestros gritos se van a escuchar por toda la mansión y todos van a venir hasta acá.— Michelle avanzó dos pasos hacia él, —¿Sabes qué va a pasar? Te van a quitar el cuchillo y te van a meter a la cárcel de nuevo.—Y estando en la cárcel vas a tener menos posibilidades de poder adquirir al menos una décima parte de las posesiones.— Dijo Ángela, —Si yo fuera tú, pensaría bien las cosas antes de cometer una locura.Bruno había considerado la idea y después de uno
—Yo no creo que ninguna de ella haya venido hasta acá para cometer algún delito.— Dijo Ángela, mirando a las Leggett sentadas alrededor de una mesa del interior del restaurant.—No. Pero necesito saber qué están haciendo acá.— Comentó Michelle, —No creo que ellas hayan venido hasta acá solamente para comer. No olvides que Scarlett es demasiado exigente y no creo que haya seleccionado comer acá por simple casualidad.—¿Crees que quieran hacer algo en contra de Candy? Es una teoría que estoy dudando demasiado.—No. Ellas están acá para planear algo o en el peor de los casos, están acá para indagar.—¿Indagar qué?— Ángela frunció el ceño.—No lo sé. Solamente tenemos que observar qué están haciendo.— Michelle se quedó en silencio, mirando a Scarlett hablar con su madre de algún tema grave.Las expresiones de estas dos últimas eran tensas, provocando que la curiosidad en Emma, aumentará cada segundo.—Sus pedidos queridas, amigas.— Candy regresó a la mesa con las órdenes, —¿Esas no son de
—No puedo garantizar que mi puntería en esta ocasión sea tan efectiva. En realidad, no quiero hacerlo.— Dijo Michelle, negando con la cabeza de un lado a otro.—No es que quieras o no. Simplemente es una orden que debes asumir te guste o no.—Lamento informarte que para esta ocasión no puedes contar conmigo.— Le aclaró Michelle, caminando a la salida de la casa y una vez fuera de la misma, agregó: —La venganza es tuya y que mejor ejecutor que tú mismo.—La idea es que nadie de la familia Lombardi sepa que estoy acá. No quiero que nadie sepa que mi nombre en realidad es Erick Jones.—No sé cómo vas a hacer. Pero ese es tu lío, no me quiero involucrar más en actos delictivos.— Dijo Michelle antes de retirarse del lugar.Erick Jones se quedó con la mirada tensa y la mandíbula apretada, observando a su hija Michelle perderse en el camino. Era la primera vez que ella desobedecia a una de sus órdenes.¿Qué era lo que estaba provocando estás decisiones de Michelle? Antes ella estaba dispues
—¿Cómo así que el infeliz de Gaspar Lombardi planea organizar una fiesta?— Scarlett estaba dándole un sorbo a su café y al mismo tiempo miraba a su padre Ezequiel, —Es una perdida de tiempo o es un juego estúpido que tiene en mente.—Lo más seguro es que quiera buscar una manera de crear una reconciliación, ¿No creen? Es que después de todo lo que está pasando, quizás está tratando de buscar la paz.— Dijo Martina.—Gaspar Lombardi es un viejo que me desagrada. Sin embargo, no puedo negar que sea inteligente y no me cabe ni la menor duda de que algo se trae entre manos.— Dijo Ezequiel con seriedad.—Es mejor que no vayamos a esa fiesta.— Dijo Scarlett, —¿Ustedes qué creen?—Negativo. Nosotros tenemos que asistir a esa fiesta.— Ezequiel estaba con una expresión llena de frialdad, —Tengo en mente grandes planes en contra de Lombardi.—Ezequiel, ¿Qué estás planeando hacer?— Martina lo tomo de la mano. Sin embargo, él se sacudió de manera brusca y se retiró de la casa, —¿Qué le pasa? Me da
—¿Quién?— Michelle preguntó en un susurró. Adam apenas logro escuchar la pregunta, sin embargó, como respuesta nego con la cabeza, —¿Quién de ellos puede ser?—No tengo ni la menor idea. Pero créeme que estoy lleno de preocupación por lo que vaya a pasar.— Contestó Adam.—Vamos a confiar de que la policía está misma noche va a capturar a esa persona.— Le dijo ella, dándole un abrazo y después lo miró fijamente a los ojos, —Ya la paz va a ser parte de los Lombardi te lo prometo.Christian apareció junto a ella. Había subido los escalones sin que ellos se dieran cuenta. Llevaba unas gafas de color negra de un color oscuro y una chaqueta de cuero del mismo tono colorido.—Ya tengo desplegados a varios de mis agentes en el área. Es imposible que ese asesinó o asesina intente hacer algo en contra de alguien.—No podemos estar seguros de eso. Recuerda que esa persona es inteligente.— Comentó Adam, mirando hacia abajo la sala llena de invitados que entre risas disfrutaban de la elegante deco