— ¡Arran me ha mirado hoy! — comento a su amiga Adhara.— Si, creo que le ha impresionado verte — respondió con sinceridad, era claro que la joven estaba bastante enamorada de Arran, después de aquel impase en la cena, estos se habían relajado mucho más, parecía ser que poner aquellos límites había creado en ellos una forma de respeto.— ¿Que pasará después de esto? — preguntó la joven, era la primera vez que intentaba filtrar con alguien.— Tu solamente lo ignoraras, no quiero que prestes mucha atención a lo que hace, no desvivas por él — le aconsejo, era claro que Arran estaba acostumbrado a las mujeres que siempre estaban detrás de él.— No se si sea lo correcto, he logrado que me mire, no creo que ignorarlo sea la mejor manera — contestó Auba con un poco de temor.— Creeme, los hombres buscan y persiguen lo que se les presenta como un reto, Arran es igual, estará deteas de aquella mujer que no se rinda a sus pies como todas lo hacen, son como cazadores y buscarán la mejor presa —
Arran estaba realmente impresionado por la manera en que la joven le estaba rechazando, la noche anterior, esta se había negado salir un rato con él, solo que ría charlar, pero Auba no tenía intención alguna de hacerlo.Adhara por su lado, había dormido bastante bien y aunque Chaid no decía nada sobre lo que había pasado la noche anterior, tenía claro que también había logrado descansar lo suficiente.— Hola — le dijo en lodo de saludo, Chaid la miró fijamente mientras se desoerezaba, no entendía aquella manera de dormir, era algo nuevo para él.— ¿Dormí mucho? — preguntó curioso, pues el sol se había puesto bastante, queria decir que estaba a casi medio día y aún estaba en cama.La puerta sonó y del otro lado estaba uno de sus hombres, solicitando su presencia en los campos de entrenamiento.— Mi señor, es una pena molestaros, pero tenemos una situación que demanda de su atención — le dijo al otro lado y este se levantó rápidamente y fue en busca de su ropa.— Podrías dormir aquí tod
La naturaleza era mágica, las mujeres habían decidido que estarían un buen tiempo por fuera, se gozarian el momento, antes de que en invierno llegará.— ¿Acá? — preguntó Effie mientras señalaba una montaña pequeña, ahí estarían un momento, desde ahí podían ver todo, era un punto estratégico y estas lo sabían perfectamente a excepción de Adhara.— No podemos estar mucho tiempo aquí, ya sabes como es vuestro hermano con respecto a que salgamos de casa sin su consentimiento — dijo Auba que sabía perfectamente que ese lugar no era demasiado seguro.— ¿Por qué aquí no es muy seguro? — preguntó Adhara con curiosidad, quería saber el porqué había tanto miedo con que se saliera del castillo.— No es algo que se oculte mucho, pero hace algún tiempo, en este lugar, muchas mujeres desaparecían, era algo realmente extraño, estas no dejaban rastro alguno, todos hablaban sobre eso, pero nadie le daba lógica a lo que estaba ocurriendo — contó Auba.Adhara no entendía como pasaban aquellas cosas, per
La forma en que estos se complementaba y sentían era algo que ninguno de los dos había vivido, serían mentirosos el no admitirlo, pues entre ellos había algo bastante fuerte.De aquellas sensaciones que jamás se sentían con cualquiera, ahí estaba viviéndolo, de la forma más extraña.— Me encantas y sé que soy el más idiota de todos, pero espero que jamás te alejes — dijo el en cuando hubiesen terminado, ella no pifia responder a eso, pues con el nada era seguro, todo era como estar en una cuerda bastante inestable y no quería repetir cosas que en su pasado le había hecho tanto daño.— ¿Estarás mañana donde tu padre? — preguntó él y ella Sonrió.— Si, de hecho, iré después de tu clase, primero que todo, necesito que este bastón se vaya en poco tiempo — le dijo y este asintió, debía aceptar que Tania era una de las profesionales más buenas que había conocido y que eso no tenía que ver con lo que pasaba entre ellos.— ¿A dónde iremos después de la recuperación de tu padre?, ¡nunca me dic
Levantar a su lado había sido extraño, esa noche se había decidido por volver a la cama y este se lo había impedido como ando su brazo a su alrededor, Tania había logrado tan solo girarse para poder respirar mejor.— ¿Por qué te ibas a ir? — le preguntó este mientras le miraba fijamente.— No me gusta amanecer con nadie, me gusta mi espacio y ver el rostro lagañoso de alguien no está en mis planes — le contestó y Hans comenzó a reír fuertemente.— No sabía que era algo desagradable verme en las mañanas, antes me decían que era demasiado guapo, quizás un dios del Olimpo — contestó y ahora era Tania la que reía fuertemente, parecía que el buen humor mañanero era algo bueno.Hans pensó en ello, jamás permitía que una mujer se quedara con él toda la noche, estas tenían su propia habitación, la última vez que había llevado a alguien a casa había sido un caos.Contrario a su pensamiento y a su forma de preceder, estaba en casa, en cama de Tania y se sentía a gusto con ella en la mañana, su
— ¿Te acuestas con tu jefe? — le pregunto completamente incómodo, estaba bastante divertido de saberlo y haría un drama en todo el día.— No te metas en algo que no sabes, Michel, no es lo que piensas — le dijo y este comenzó a reír fuertemente.— ¡Solo debes admitir que te coges a tu jefe y ya está! ¡Hermana, es lisiado, déjale sanar, aunque sea la pierna! — le dijo entre risas y esta le acallo.— No digas nada delante de mí madreeee, te mataré si lo haces! — le advirtió, Hans había quedado sin saber lo que pasaba, no esperaba que su amigo se enterara de lo que estaba pasando con Tania.— Me gustaría pensar que no te acuestas con mi amigo, es algo que no me agrada, pero bueno, es tu vida y yo soy el menos indicado para hablar de relaciones, seriedad o casa relacionadas — le contesto, haciendo que Tania respirar a profundo.No estaba preparada para lidiar con su familia inmiscuida con su vida personal, pero tenía claro que aquello había sido demasiado evidente, Michel salió de la habi
Había visto a papá esa tarde, este parecía estar mejor, con la ayuda de Hans, habían logrado que uno de los mejores especialistas le ayudara, pudiese revisarle y darles los pasos a seguir.Estaba claro que se quedaría por un rato más en el hospital, te in que estar seguros de que en su cabeza no hubiese nada que le afectará a futuro, eso había logrado que su madre se preocupara más, nunca la había visto así, era siempre serenidad, risas, pero esta vez no había nada de eso.La entendía, no estaba preparada ni ella para dejar a su padre en tal caso, ahora su madre menos.— ¿En qué piensas? — le pregunto en cuanto estaban en el coche, irían a casa de Hans, aún no se sentía cómoda con su ofrecimiento, pero había insistido.— Si tu papá sale de esto, volveré a casarme, le propondré matrimonio — dijo haciendo que sus hijos le miraran y se miraran entre ellos.— Padre había dicho algo similar — le contó y está se echó a llorar, estaba asustada de que le pasara algo.— No pienso perderlo nuev
La madre de Tania era bastante agradable, sentía como si fuese una madre, algo que no sentía desde hace mucho tiempo.— ¿Mara? — preguntó él en cuanto escucho el nombre de la mujer, esta no estaba feliz con su nombre, pero había decidido nunca cambiarlo, era un dulce recuerdo de sus padres.— Aguas amargas — preguntó él, había escuchado aquel nombre con un significado que distaba de lo grandioso, no entendía por qué sus padres lo habían escogido.— Realmente no lo pensaron por eso precisamente.Mis padres estaban bastante enamorados, cuando nací, fue lo mejor que a ellos le pudo pasar, eso es lo que contaba Margarita, la abuela de Tania.Para ellos el significado iba más allá, sí, uno de ellos era ese, la mujer afligida, en un pasaje de la Biblia, Noemí, al perder a su familia, dijo: "No me llaméis más Noemí, llamadme, Mara, porque Dios me ha llenado de amargura", ellos no lo veían así.Pues el otro significado era de la mujer enamorada, la romántica.Aprecio eso, es que a veces se le