Capítulo XLII: Herramienta perdida

El niño dirigió sus ojos furiosos a Caeli. Adair frunció el ceño. No le gustaba esa mirada - Quédate si quieres - Caeli habló tranquilamente. Adair lo volteó a ver, sin poder creer lo que escuchaba.

-Pero será sólo por un rato - la señora le informó para ser fulminada por los ojos del niño - tengo que regresar en un momento. Después te irás conmigo - el niño no respondió - ¿de acuerdo? - dobló la cintura para hablarle más cerca.

La frente del niño estaba sumamente arrugada. Miró al suelo - Está bien - su voz fue baja, conteniendo la molestia expresada por sus gestos.

La señora volvió a su posición - Bueno, entonces, nos vemos en un momento - se despidió. Dio varios pasos cuando se detuvo - oh, mi monedero - recordó - lo dejé en la mesa.

-Iré por él - Caeli

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo