Era comprensible, se dijo Ryan. Rosa estaba guapísima: alta, rubia. Hacían una buena pareja. Sin embargo, pensó, parecía cansada al lado de Amelia Justo en ese momento Amelia lo miró. Con el ceiío algo fruncido y el mentón desafiante, parecía que le echaba a él la culpa de algo. Se acercó a ella, mejor era firmar una treugua o tratar sus mejores amigos se casaban y ellos no debian de arruinarles su gran momento.
-¿Qué? -preguntó -Eso era lo que iba a preguntar yo. -Estabas ahí contra la pared como si fueras un semáforo, pero no sé qué tratas de decir. -Sólo me preguntaba si todo estaba en orden. -Todo perfecto, no podría ser mejor. Estoy a punto de ver cómo mi mejor amiga se casa sin que estén sus padres presentes, que ni siquiera lo saben. No sabemos como reccionaran cuando se enteren, sali corriendo de mi casa, llame a una de mis colegas para que se hicieran cargo de mi trabajo y solicitaran un permiso para mi, tome un vuelo, luego tuve que esperar en la terminal por otro, llevo mas de diez horas de camino. Y si a eso le añadimos que los pies me estan matando y que no he dormido nada, asi que si todo esta perfecto. -Las parejas se fugan y se casan constantemente. ¿Cuál es el problema? -Está claro que tú no lo comprendes -dijo dándose la vuelta y mostrando las orquídeas y las rosas en su cabellera rizada. -Al final te has puesto mis flores. Te quedan muy bien en el pelo. Amelia se dio la vuelta para mirarlo ruborizado pero manteniendo un gesto de desaprobación. -Ha sido idea de Rosa, no mía. Ella es la romatica de las dos, la de veces que he tenido que sacarla de ...- dejo la frase sin concluir comocallendo en cuenta de algo - ¿ Qué quieres decir con eso de mis flores? -Le ayudé a Jeff a prepararlo todo. -¿Así que fuiste tú quien escogió esta capilla, de estilo tan romatico? ¿Y por qué? ¿Es que acaso la capilla no cerraba en invierno? -Sí. Ya sé que no es una catedral pero a ellos no les importa, así que no veo por qué te preocupa a ti. Ella pareció dispuesta a lanzarse al ataque otra vez, de modo que él levantó una mano y dijo: -De acuerdo, no me lo digas, no lo entendería, ¿no? -Exacto -dijo elevando el mentón y enseñando el cuello. La verdad era que tenía un cuello extraordinariamente largo. O quizá era que con el pelo recogido lo parecía. Y algo en su piel, blanca y cremosa, unida a ese pelo rojizo invitaba a darle un mordisco y a besarla. Un momento, se dijo a sí mismo, que estaba pensando. Tratar de ligar a la dama de honor, acaso habia perdido la cordura, ella tenía un carácter tremendo. Era una gata, y justo en ese momento parecía dispuesta a arañarlo, aunque en realidad no sabía por qué, esta reacciones que ella tenia hacia el lellamaban la atencion y hasta le gustaba un poco. -¿A qué estamos esperando? -preguntó -. Hace un momento ibas a tirar la puerta para que saliéramos, y ahora estamos aquí parados. -Se nos ha pasado el turno, pero el pastor ha dicho que los casará enseguida -contestó Ryan mirando su reloj-. Y debe de ser ya. Como si hubiera estado planeado, justo en ese momento comenzó a sonar la marcha nupcial y se oyeron voces y risas. Ryan se dio la vuelta y trató de bajar a los novios de las nubes. -Ha llegado el momento. -¿Es la hora? ¿Estamos listos? ¿No falta nada? Pobre Jeff. Siempre había sido un gran abogado, tenia una buena reputacion y era un poco temido por sus adversarios cuando se enfrentaban en los tribunales Manejaba un montón de casos al mismo tiempo. Y sin embargo en ese momento no podía ni con su boda. Ryan buscó en su bolsillo. -Aquí tengo el anillo. Seguimos, nos toca abrir la marcha -dijo volviéndose a Amelia y ofreciéndole el brazo. Ella se quedó mirando su brazo y luego puso una mano sobre su puño con solemnidad. Aún parecía enfadada. No, no era eso. Estaba triste. Le dio unos golpecitos con la mano que le quedaba libre, contrastando su piel morena con la blancura de la suya, y le dijo al oído: -También tengo pañuelo por si te hace falta durante la ceremonia.- tratando de animar un poco, sabia que esa frase haria que ella reccionara y trataraia de plantarle cara. -No seas tonto. ¿Por qué iba a llorar? No soy yo la que se casa.De pie junto a Rosa observó cómo la esposa del parroco se levantaba del órgano para dirigir la ceremonia entre cestos de flores. Parecía que lo iba a hacer todo ella sola pero al final junto al altar la estaba esperando un señor, con solo una mirada Amelia vio el amor que la pareja de ya avanzada edad se profesaba. Debía de haber estudiado en el mismo colegio para expertos eficientes que Ryan, ese ridículo pensamiento se instaló por un segundo en su mente, era evidente que eso resultaba imposible por la gran diferencia de edad. Si torcía la cabeza hacia la derecha lo vería, pero prefirió centrar su atención en la mujer del parroco y luego en el hombre que estaba por comenzar la ceremonia de su mejor amiga. Ryan tenía algo que la hacía sentirse incómoda. Ni en un millón de años reconocería que él podía llegar a llamar su atención tenía esa cualidad de ser mandón y ella tenía problemas con las personas así. Sobre todo cuando dejaba su mirada fija en ella con esos ojos negros. Parec
-Por fin -dijo -. ¿Por qué habéis tardado tanto? ¿Podéis creerlo? ¡Estamos casados! Se acercó a Jeff y lo besó de lleno, Jeff le devolvió el beso. Amelia sonrió y esperó a que terminaran. Miró su reloj. Probablemente querrían ir a comer a algún sitio, aunque era muy tarde. Si se daban prisa podría tomar el último vuelo de vuelta a casa y no tendría que quedarse a dormir en Reno. Quería volver a su apartamento, se sentía rara y algo fuera de lugar necesitaba estar en casa para dar riends suelta al gran nudo que estaba conteniendo no queria que su amiga la viera llorar, hoy era su gran dia aunque no como ella lo habia imaginado pero la vidaes asi. Por fin dejaron de besarse. -Tenemos que ir por los abrigos -dijo- dirigiéndose al salón femenino.De pronto Rosa se volvió y le tiró el ramo de flores. Antes de que pudiera contestar Amelia lo cazó al vuelo instintivamente. -¡Amy ! ¡Te toca! -rió -Querrás decir que me has atrapado -respondió Rosa sabia muy bien que Amelia nunc
Ahora sólo tendría que asegurarse de salir a tiempo hacia el aeropuerto y tomar su vuelo de regreso a su casa, rogando de que los padres de Rosa no la llamaran preguntando por su hija. Sacando cuentas tal vez tuviera cinco dias o una semana para inventar una escusa creible para eviatar encontarse con Mary o Vince, porque sabia bien que desde el momento que hablaran frente a frente descubririan todo. -Este lago y estas montañas son increíbles. Nunca había visto nada tan bonito -dijo Ryan. -¿No habías estado aquí nunca? -preguntó Creía que eras de San Francisco. -No, vine a vivir a San Francisco hace sólo un par de semanas. Sólo he visto la ciudad, no he tenido tiempo de ver el resto de California. - El camino que da a la cabaña es el siguiente en la tercera interaccion gira a la izquierda. Solo quedan diez minutos en coche y veremos los grandes pilares de piedras ... -Se dio la vuelta y le preguntó a Rosa-: ¿Estás segura de que no iba a venir nadie a pasar el fin de semana? -
Se quedó boquiabierta, mi cerebro no estaba procesando nada de la que siguiente que mi mejor amiga estaba diciendole a su madre. Tenía que decir algo, pero era incapaz. Sin darse cuenta mi mejor amiga le había hecho daño a su madre, justo lo que nunca hubiera deseado, Y todo en un abrir y cerrar de ojos.¿Cómo podía haber hecho eso Rosa? se preguntó. Mary se recobró y se apresuró a abrirle los brazos, y trato de recomponerse haciendo lo que mejor siempre ha hecho.-¡Querida mía, qué felicidad! -exclamó abrazándola y besándola-. Pero no osquedéis ahí en la puerta. Entrad y contádmelo todo. ¿Dónde está el novio?-Se ha ido con el padrino a comprar comida -volvio a responder Rosa-. Queríamos hacer una pequeña celebración en la cabaña.-¿Quién es el novio? ¿Lo conozco?-Se llama Rya, y acaba de raptarla ahora mismo. Es un hombre terrible.Espera a conocerlo. Amelia seguía inmóvil, Rosa era capaz de hablar y hablar aparentando inocencia aunque hubiera hecho cualquier barbaridad. En esa o
En eso tenía razón, Mary no creeria que ella se caso, habian varios factores la falta del anillo y el hecho de que ella nunca habia sido una entusiasta del matrimonio desde siempre y Mary sabía bien su opinión y lo que ella quería en la vida. Tenían que analizar bien la situacion loca en la que estaban metidas, le habia pedido a Rosa que no se casara apresuradamente porque temia que algo asi pudiera ser perjudicial para su mamá. Y si por algun motivo Mary llegara a sospechar la verdad el shock sería tremendo con consecuencias catastroficas. No sólo porque la pequeña de la casa s se hubiera fugado para casarse, sino porque además no la había avisado a nadie de la familia, solo ella y aunque sabía que la consideraban un miembro más del clan Saggari ella no llevaba ni gota de su sangre. Pensar solo que los progenitores de su mejor amiga se enteraban de que ella sabia y no les habia contado ... mejor no seguía con esa linea de pensamientos. Las ideas y escenarios locos que le pasaro
Entonces vieron como Rosa y Amelia salieron por la puerta principal. Mientras tanto Jeff continuo diciendole a Ryan-No, no son hermanas. La familia de Rosa la recogió cuando la madre de Amelia murió. Rosa no me conto mucho pero al parecer Amelia siempre estuvo muy unidqa a su madre y cuando murio estuvo devastada. Los padres de Rosa estuvieron muy preocupados asistieron a terapia con ella durante alguno años. Ellas se sienten como hermanas y los padres de Rosa la quieren como a una hija mas. Y qué, no me digas que ¿te gusta?Ryan quiso negarlo pero no tuvo tiempo de responder a su mejor amigo para ese momento Amelia y Rosa se acercaron corriendo poniéndose delante del coche. Ryan paró en seco.-¿Qué diablos ... ?Apagó el moto, Amelia abrió la puerta. Él salió y la tomó por los hombros.-¿Qué clase de locura es ésta? ¿No te has dado cuenta de que hay hielo? Elcoche podía haber patinado, te podía haber atropellado.Amelia no le respondió. Deslizó los brazos por su cuello, cerró los
-Enseguida vamos para allá, tengo que decirle algo a Ryan, espero que entiendan -gritó Amelia, lo último lo dijo de manera algo pícara, sugiriendo demasiadas cosas y a la vez nada Los Saggari volvieron a saludarlos sonriendo y se dejaron llevar adentro. Entonces ella se volvió para mirarlo, sabia que para que el plan loco de Rosa pudiera salir bien, Ryan tenia que colaborar y no estaba segura de que el quisiera hacer algo asi, ni ella misma estaba muy contenta como se estaba desarrollando todo pero no queria que Mary sufriera una recaida. Lo principal aquí era la salud de aquella mujer que se había ganado su corazón a pulso cuando penas compensaba hacer una adolescente. Ella era la que había estado allí en sus momentos mas oscuros y quien nunca se habia rendido cuando decidio cerrarse al mundo tras la muerte de su madre. Era lo mas cercano a una figura materna por lo que estaba dispuesta a seguir la loca idea de su amiga y tratar de salir de alli en el menor tiempo posible -Por f
Amelia se dio la vuelta para mirar a los Saggari alli de pie, sonriendo. Sabia que todo dependia de Ryan, respiro hondo rogando a todos los Santos que la farsa continuara. -Éste es Ryan Croos. Ryan, me gustaría que conocieras a Mary y Vincen Saggari los padres de Rosa. Y quienes son para mí la familia más cercana que tengo en esta vida Mary dio un paso adelante para saludarlo con una calurosa sonrisa de bienvenida, mientras mira a Amelia con lágrimas en los ojos por la emoción de lo que ella habia dicho. Mientras que Vincen se quedó un poco atras mirando a Ryan y midiendo su aptitud. Ryan encontro un poco divertida la actitud del hombreton tal parecia que el estuviera robandole una hija, pero bueno mejor se concentra su atención en la encantadora mujer que le estaba sonriendo. No podía negarse a estrecharles la mano y saludar a la señora, pero tambien tenia que mostrarle a Amelia que ella desde luego no iba a manipularlo. -Señora, es un placer conocerla -dijo estrechando una man