Epílogo

3 Año después. 

—¡Mami! —grito en llanto mi hijo Aaron.

—¿que paso cariño? —pregunte acercándome a el.

—mi helado se me cayo. —dijo llorando mientras que señalaba el helado que estaba en el suelo.

—no llores amor, te traeré otro. —dije con voz dulce mientras que acariciaba su sedoso cabello. 

Que mas puedo desear, mi hijo es una copia de Leonardo, lo único que sacó de mi fueron mis ojos grises pero en lo demás es idéntico a su padre. 

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP