¿Cuántas personas podían desmayarse en un evento social? Para ese momento, muchas y podía establecerse un récord. Dietrich se arrastraba con su ropa de comando y una pistola de tinta y Brenda no salía de su asombro.

—¡El muerto vino por mí! Hermana, no dejes que me lleve.

Apolo vivía uno de los momentos más incómodos de su vida. Su madre era reanimada por su hermana y Rodri estaba congelado sin poder echar a correr al ver a Gastón frente a él. Su padre era mirado con terror por todos y tuvo que tomar el control.

—Podrían calmarse, mi padre no es un fantasma y no está muerto.

Todos hicieron exclamaciones de horror y Úrsula se levantó y al ver a Gastón gritó abrazando a su hija.

—¡Es él! ¡Es él!

—Calma, mamá. Sí, es papá, está vivo.

Otro desmayo. Eva los contaba y eran muy seguidos. Su novio tomó el control.

—Calma, calma. Mi padre fingió su muerte y ahora volvió.

Úrsula volvía en sí y Eva para calmarla le dijo.

—Suegri, alégrese, tiene a su esposo de vuelta y me tiene a mí.

Úrsula grit