Zoé suspiró al ver a su padre con los ojos abiertos. Habló poco, se movió lo menos posible debido al dolor en sus articulaciones, pero le dió una mirada llena del amor que tenía por su hija. Qué ciego había sido al creer que su hijo lo ayudaría, que tonto se vió pensando que Gerard defendería a su hija cuando él no estuviera. Siempre lo creyó de esa forma, pero su venda se cayó cuando lo vio incluso con una sonrisa de regocijo en su rostro, cuando Zoé estaba siendo atacada. Ella lo defendió incluso más que él mismo. Más fortaleza que esa no había ni siquiera en Santiago y no disimuló su satisfacción de que su hija sabía defenderse.Pero no era intocable como desearía y eso hizo que se fijara en el hombre que la acompañó hasta la puerta, sin verse con intenciones de irrumpir en ese espacio.Vio a su esposa, Silvana le dio miradas a Rafael que su esposo conocía a la perfección. No estaba de acuerdo con la relación que su hija tenía con él y la comprendió. No era para nada fácil pensar
Rafael movió a su gente cuando a Santiago le dieron el alta. Sabía que llevarlos al mismo apartamento era un riesgo y causarle preocupación a Zoé por ello no lo haría. Cómo conocía también la poca disposición de Silvana porque él estuviera cerca, entonces la única opción fue darles un sitio acondicionado para que ellos tuvieran espacio y las atenciones necesarias. No pudo acompañar a Zoé por la reunión que tenía con Logan Santini y Maximiliano Turner, pero se hizo cargo de que los trasladaran con todo el cuidado necesario para no causarle más daño al hombre que se sintió bien ver a su hija descansada. Fueron casi una semana en la que ella vio por él y su madre en un sitio que ya no quería quedarse. El solo olor era despreciable para él. Por lo que acostarse en una cama que no tuviera el aspecto de un hospital fue un alivio. Zoé se encargó de cocinarles, mientras Silvana la veía desde la distancia cuando buscó la maleta de su esposo. La dejó en el dormitorio y se encaminó a la co
__ Sabía que esa desquiciada tenía algo en mente. - dijo Rafael solamente. Miró a Zoé de entre los tres pares de ojos que lo enfocaron. - Te juro que...__ Lo sé todo. Me enteré de cómo fueron las cosas en realidad en el momento en que sucedieron. - cortó su explicación. - Pero me enoja que haya sido tan...esa mujer es una basura.__ No sé con qué intención lo haga, pero supongo que lo hará saber. - mencionó el hombre pasando la mano por su barbilla con ofuscación. Vio a Silvana lanzar una mirada de no creerle aún, pero sabía que una conversación con ella, en lugar de arreglar las cosas empeoraría todo. Se enfocó en Santiago, el cual solo lo vió.__ No soy de traicionar. Eso que ve ahí solo fue una segundo o tal vez menos, pero muestran un ángulo muy conveniente para ellos, no le que sucedió en verdad. - ya que Zoé tenía plena confianza en él, le daría la cara a su padre. - No pido que me crean un santo, sino que mi fidelidad no sea puesta en duda, porque con hechos demuestro que no
Para Rafael fue muy inesperada la noticia de que Samantha había muerto, la sensación fue atroz y su ánimo se volvió prácticamente nula. Todo decayó a un nivel que ni siquiera él mismo podía saber si estaba o no respirando. Buscó noticias y no fue capaz de ver las imágenes tan esplicitas. Había visto muertes claro, pero la de la mujer que esté creyó que podía estar mejor sin él en una posición tan...fue mucho. No quiso y lo evadió porque sabía cuan maldita podía ser su cabeza, como jugaría con él y eso fue comprobado cuando estuvo al límite luego de verlas. Sobre todo con las palabras que tenían escritas al reverso. Pudo respirar al fin. Se aferró al volante y después de varios minutos pudo salir del vehículo para desabrochar su camisa, tomó bocanadas de aire y se recordó que nada era tan fuerte como lo era su voluntad de no caer en lo mismo.Tomó una de las botellas de agua y la ingirió hasta que le faltó el aire. Sí caía en eso de nuevo, no sería lo que le prometió a su hija, s
__ ¡Me golpeó, Rafael! - Amanda se agarró de eso para hacer ver lo indignada que estaba por lo que pasó.__ Porque la golpeaste primero. - le hizo ver que presenció eso también. - ¿Te encuentras bien? Zoé hablaría, sin embargo fue Amanda quien lo volvió a hacer.__ ¿Le preguntas si está bien a ella y no a mí que soy tu madre? - la ofuscación le llegó.__ No la provoqué. - exclamó Zoé. - Vino a mí con una oferta de dinero, le dije que no y me trató de lo peor solo porque no acepté la propuesta de dejar a su hijo por cinco millones. Los ojos de Rafael se volvieron contra su madre, Amanda se removió y lanzó llamas contra la chica que tampoco le quitó los ojos de encima. __ No fue esa la forma en que dije las cosas. - se defendió aferrada a su bolso. - No puedes...__ ¿No lo tengo que creer, Amanda? - ironizó con lo que sabía iba a decir. - ¿Es mentira que le ofreciste dinero para que me dejara? __ Entiéndeme, Rafael. Es una mujer que lo único que quiere es tu dinero, si le das lo que
Para Rafael no había nada más fastidioso que una persona con tan poca dignidad como para querer atención de quien fuera. Bufó al solo bajar del auto, apenas iba llegando al casino esa mañana y ya tenía alguien tan indeseable. Menos mal Zoé le dijo que llegaría diez minutos más tarde, pues iría a visitar a sus padres antes de ir al trabajo. Tomó su móvil buscando el contacto que tenía agendado.__ Vengo en son de paz. - dijo Greta elevando las manos. __ No me interesa. - se llevó el teléfono a la oreja. - Yan...__ Rafael, es por mi padre. - se le pegó atrás, en lo que él siguió su camino. - Está muy mal de salud. El médico dice que no pasará mucho tiempo antes de...- pasó saliva. - Pero quiere verte. Dice que...__ Yan, saca a Greta de mi casino, no tiene permitida la entrada por ninguna circunstancia. - cortó la llamada pasando de largo.__ Rafael, por favor. No puedes ser tan maldit0. - se le pegó al brazo intentando detenerlo.__ ¿No? Nací siendo un maldit0 en una familia lleno
__ ¡Eres un maldito! - dijo Gerard apenas con el dolor en cada articulación mientras Rafael se limpió las manos con la sangre que bañaron sus dedos. - Le diré todo esto a la policía.__ Me gusta el optimismo, pero el tuyo por creer que saldrás con vida de aquí me asombra. - exclamó con frialdad. - No sueñes, gusano. Para mí vales menos que las ratas de aquí. Gerard trató de levantarse, pero los golpes habían sido demasiados. Lo atacó con puños contundentes directo a su cabeza, destruyó prácticamente la habitación entera con él al lanzarlo sobre cualquier mueble que hubiera cerca. De seguro tendría fracturas graves, pero a Rafael menos no pudo interesarle. Le dijo a Zoé que lo intentaría, no que lograría quitarse la determinación de asesinar a su cuñado.__ Alejando te va a matar. - escupió sangre. - Al igual que todo lo que tú quieres.__ Eres un imbécil, Gerard. - se acercó con la cuchilla que incrustó en su muñeca liberando los gritos de terror y dolor en el tipo a quien le metió
Zoé no pudo hablar, tenía la lengua adormecida y los latidos de su corazón fueron muchos para evitar no verse demasiado nerviosa.Escuchó un click de la puerta al ser cerrada con seguro y cuando se volteó, Rafael pasó a su lado para revisar lo que había en la esquina de su oficina. Al ver que de seguro su muerte fue instantea, se alejó del cuerpo para ver Zoé.__ Yo no quería... Rafael, yo solo quise que no me...__ Tranquila, nena. No pasa nada. - la llevó a su pecho sin importar el desastre. - ¿Estas bien?__ Rafael, yo la maté. Si todos se enteran...__ Nadie se va a enterar. - aseguró. - No me cuesta nada desaparecerla. No pasa nada, solo mírame. - la hizo elevar el rostro. - Lo hiciste por defenderte. Que tú cabeza no juegue contigo, si tú no te defendías, te iba a dañar a tí. __ Pero yo...__ Limpiaré todo, cariño. - la besó sutilmente. - Me encargaré de todo ¿está bien? __ No me dirás qué fui muy...__ Hey, hey. Nena, no escuches tus pensamientos ahora. Escúchame a mí. - la n