—Eres una hija desobediente e insolente —dijo finalmente— ¿Acaso tengo otra alternativa? —ella negó con la cabeza—. Entonces acepto con tus condiciones. —Gracias, padre —dijo en voz baja.Se retiró con una sonrisa, pensando en su próximo paso, aunque se quedó viendo lo que hablaba su padre.Cuando
Brenda era una mujer con una figura esbelta y una belleza natural que destacaba por encima de todas. Aunque hubo un tiempo cuando era adolescente que había tenido sus problemas con la baja autoestima, producto de su exceso de peso, pero, ahora, se había convertido en una mujer segura de sí misma, de
Ella por un momento se mantuvo en silencio, aunque ganas de responderle no le faltaban, sin embargo, respiró profundo rogando en su interior que él desistiera de regañarla, pero él insistió en reprenderla.—Eres una exhibicionista, te encanta llamar la atención… no te da vergüenza presentarte ante t
Lo que sintió por ella y que había estado reprimido ahora se desataban sin control. El beso se hacía cada vez más apasionado, mientras sus manos se desplazaban con suavidad por el cuerpo de ella. El universo se derrumbaba a su alrededor, pero él y Brenda seguían ahí, con sus pieles enlazadas. Un ar
Ella lo observaba con una mirada entusiasmada, estaba atrapada en un hechizo de pasión y deseo. Con rapidez, Karl se despojó de toda ropa, mientras Brenda no podía apartar sus ojos de él, al ver aquella visión tan sensual, su corazón comenzó a latir más rápido, todo su ser se movía al compás de su
Así que comenzó a moverse dentro de ella, cada empujón fue una oleada de placer para Brenda, que empezaba a sentir los espasmos de su segundo orgasmo. Karl estaba entregado a complacerla, mientras sus caderas se movían de forma armoniosa y sus gemidos eran cada vez más intensos. El placer se hizo m
Karl llegó al aeropuerto justo a tiempo para ver despegar el avión de Brenda. Estaba seguro de poder alcanzarla antes de que partiera, pero había llegado demasiado tarde. Se quedó viendo cómo el avión desaparecía en el cielo. Sintió que le invadía una oleada de desesperación, no podía ser que cuand
—Mamá no creas en todas esas noticias que lees en la prensa… eso no es cierto.“Lo sé, he vivido situaciones similares cuando tu padre, sacaron los hechos de contexto y provocaron muchos desencuentros entre nosotros, estoy clara que la prensa siempre buscar exagerar todo para vender y obtener más se