Las palabras de Ren le causaron más dolor “La vida es una mierd4 ¿Cómo no puedo enamorarme de un ser tan perfecto? No solo es un bombón por fuera, sino que también lo es por dentro, es la persona más maravillosa que he conocido”.Ese día se negó a hablar, necesitaba tiempo, por eso dejó que los días
—Lo siento Ren, no está en mí, no hay nada que puedas hacer para cambiar lo que siento por Mike, por mucho dolor que me causó, no puedo sacarlo —por eso se mantuvo firme ante la rabia de Ren, sosteniendo su mirada mientras las lágrimas corrían por su rostro—. Lo único que siento, es haber perdido a
Carlotta se limpió la boca luego de comer el último bocado, no podía de dejar de sentirse un poco triste por su hermano, y como era muy expresiva, Katy se dio cuenta de que algo le pasaba y creyó que la estaba juzgando por haberse acostado con Ren y por eso se lo preguntó.—¿Me estás juzgando porque
—No Ren, ya es suficiente, creo que he abusado mucho de tu hospitalidad.—¡Déjame hacerlo! Te prometo que, si me permites que te envíe a Los Ángeles, no te buscaré más ni insistiré en estar contigo, permíteme hacer esto por ti.Ante la insistencia de Ren, dejó que la enviara a Estados Unidos, además
Katy no pudo evitar la expresión de sorpresa, al verlo en la puerta sintió un vuelco en el estómago, incluso antes de que hablara por segundos esperó la explosión del hombre y hasta se imaginó que en definitiva la boda no iba a ir, pero escucharlo decir esas palabras nunca se lo imaginó, pese a ello
Desesperada por sentir el placer de la pasión, Carlotta empujó a Sandro sobre la cama, montándolo y comenzando a cabalgarlo lentamente. Con sus ojos cerrados, disfrutaba del momento único que compartían mientras su corazón palpitaba con fuerza en su pecho. Lentamente, los dos amantes se unieron en
Al despertar, Katy sintió un peso en su pecho y la cabeza de Mike acomodada en su hombro. Era evidente que ambos habían caído dormidos luego de tanto éxtasis, y ahora que se encontraban en silencio, sus cuerpos entrelazados podían transmitir toda la pasión que sentían el uno por el otro. Katy se lev
Cuando él tocó su mano, un atisbo de reconocimiento se dibujó en su rostro. —¿Pasa algo? —interrogó ella. —¿La conozco de antes? ¿Es que su tono de voz me pareció familiar? Ante sus palabras Kate abrió los ojos asustada, pero enseguida reaccionó, se aclaró la garganta y respondió. —No lo creo… p