__ ¿y estas cajas mi amor?
Noah preguntó al ver algunas cajas en la sala de su casa, esperó la respuesta de la hermosa pelirroja que estaba sentada sobre el sofá, observando una pequeña muñeca.
__ MI mamá me lo mandó, me dijo que hay cosas mías en estas cajas.
__¿No entiendo?
Ella exhaló un poco de aire.
__ Mi mamá le gusta donar en algunas ocasiones y me dijo que lo que no necesitará lo regresara, a Isabel también le mando algunas cosas.
Noah alzó los hombros, acercándose al fin a Hayami que lo recibió con un dulce beso.
__ ¿Cómo sigues?
Él preguntó un poco preocupado, dejando el tema de las cajas.
__ Ya mejor, mañana podré regresar a la oficina.
__ Pero el doctor dijo ...
Hayami se levantó del sofá un poco molesta, aún tenía el temperamento un poco explosivo.
__ Iré, no estoy muriendo para no ir.
__ Lo sé, pero...
__ Solo es un embarazo, nada del otro mundo.
Él sonrió, en verdad amaba tanto a esa mujer para soportar su explosividad, acarició el vientre de 35 semanas de Hayami que estaba frente a él, ella finalmente sonrió por la acción de Noah.
__ Luces tan hermosa así. Yo sé que no estás muriendo y respetaré lo de ir a la oficina, solo ten cuidado, recuerda que el doctor dijo que el embarazo es un poco más delicado.
Ella hizo un gesto como de disgusto.
__ Prometes que estarás tranquila.
__ Lo prometo.
__ Bien, cuidar a dos bebés no es fácil mi amor, sé lo cansada que estás, sé que lloras cada vez que las náuseas ganan la batalla.
__ Odio las náuseas, ¡las odio!
__ Lo sé mi cielo, pero estamos a pocas semanas, estás haciéndolo muy bien.
Ella se sentó nuevamente junto a él y recargo su cabeza en el pecho de Noah en esos últimos meses, era su lugar favorito, se sentía a salvo con él.
Noah acarició el cabello de Hayami ella dejaba que él le diera amor, amaba esos pequeños gestos de Noah, desde el pequeño beso en la mejilla, hasta como se acariciaba su cabello.
__ Hoy nos toca cena con Isabel.
Ella soltó, después de un tiempo de silencio entre los dos, un silencio que no era nada triste y nostálgico, sino un silencio donde las palabras no existían, simplemente sentirse era suficiente.
__ Si mi amor, lo sé.
Hayami se levantó finalmente del sofá junto con Noah.
__ Vamos a vestirnos.
Ella sugirió.
__ Sí.
__ Necesito que me ayudes con los zapatos y quizás con algunas otras cosas.
Ella sonrió picaronamente, era algo que no había perdido a pesar de que estuviera muy embarazada.
__ Con lo que tú desees.
Ella sonrió aún más cuando notó que él correspondía a la intención que dejó fluir disfrazada en las palabras anteriores.
Caminaron rumbo a la escalera, Hayami tomaba la mano de Noah.
__ Mi amor y¿las cajas?
Soltó mientras seguía el paso de Hayami, pero miraba las cajas que habían quedado en la sala.
__ luego las revisó ...
__ ¡Qué hermosa te ves!
Exclamó Isabel al ver a Hayami.
__ ¡ya sé! Siempre me veo bien.
Isabel sonrió.
__ No cambias hermanita, ¿Cómo la soportas?
Dirigió la pregunta hacia Noah, que solo levantó los hombros, y Hayani hizo un gesto de indignación, pero rápidamente comenzó a reír.
Hugo se acercó con el pequeño Santiago, era muy parecido a Isabel, era un niño hermoso, el pequeño recibió feliz a su tía, Hayami resultó ser una muy buena tía con demasiada paciencia con él, después de tener una buena cena y una plática agradable Noah y Hayami se despidieron de los chicos y regresaron a casa...
Hayami se levantó directamente al baño, nuevamente las náuseas habían ganado, mientras vomitaba sus lágrimas caían, en verdad detestaba las náuseas, las consideraba su peor enemiga, el embarazo era muy cansado, ya que esperaban la llegada de 2 preciosas niñas.
Al salir del baño vio a Noah dormía, el sueño se había esfumado así que decidió ir por un vaso de leche a la cocina, porque el estómago lo sentía inmensamente vacío, al bajar observó las cajas que aún permanecían en la sala, ella suspiró por el fastidio de la tarea que le había encomendado su mamá, como si su embarazo no fuera lo suficientemente complicado para también encargarse de esas cajas, cruzó por su pensamiento el donarlo todo sin revisar, pero los recuerdos dominaron, se acercó a una de las cajas donde sacaba algunos juguetes y reía al recordar su niñez.
Al abrir otra de las cajas le pareció curioso porque no reconocí nada de lo que estaba dentro se sintió confundida, verificó el nombre en la caja y en efecto correspondía a ella, tenía escrito su nombre, sacó algunas fotos y portadas de revista de hombres muy bien parecidos estas portadas lucían ya algo antiguos, río un poco porque parecían póster de alguna adolescente, de este saco varios libros algunas revistas además de un pequeño alhajero, no obstante este estaba cerrado con llave por más que buscó dicha llave dentro de la caja no encontró nada, optó por dejar en paz aquel alhajero, Al vaciar la caja estaba más confundida.
Entonces se centró en los libros, pensó que quizás había buena lectura en estos, revisó algunos hasta que uno en específico le llamo la atención, la portada era un campo de flores, había un título referente a un amor de verano, el nombre de la escritora sobresalía.
Hayami decidió dejar el libro nuevamente en la caja, pero antes de devolverlo le llamó más la atención que las hojas de este lucirán extrañas como si no pertenecieran al dicho libro como si se tratarán de invasores.
Al abrir el libro había lo normal, el prólogo de la historia que a continuación estaba escrita, hojeo un poco lo que era inicio de la historia, pero al pasar a la siguiente página este era un manuscrito.
"Me parece absurdo tener que esconder mi último pensamiento en un libro de amor, para que él no las encuentre, recurrí a esto porque temo por mi vida, sé que esta noche vienen por mí y estoy prácticamente segura que mañana ya no estaré en este mundo, me perdí en esos ojos azules tan hermosos sin saber que pertenecen al mismísimo diablo, me compadezco de la próxima persona que la vida lo lleve a él."
Hayami cerró el libro dándose cuenta de que el escrito que acaba de leer no era parte de la historia de aquella portada.
☆☆☆ Queridos lectores, esta historia estará contada de dos formas en primera y tercera persona, lo que diga los escritos y desarrollada por el narrador. Vale.
Hayami mordía su labio, sentía que al leer ese libro no habría vuelta atrás, además de que la incertidumbre y la curiosidad ya habían entrado en su cuerpo como para no continuar. Abrió nuevamente el libro para posteriormente tomar asiento en el sofá, respiró profundamente antes de colocar nuevamente sus ojos sobre aquel escrito ... "¿Que si tengo miedo? Claro que lo tengo, ¿cómo no temerle a la muerte?, a dejar este mundo sin haber dejado nada en él, es realmente triste marcharse de esta forma y a manos del hombre que amas con la misma intensidad con la que le temes. Para ser lo último que escribiré desearía contar desde un inicio la historia, pero no tengo el tiempo suficiente para hacerlo, para la persona que lee esto quisiera que entendiera que fui una chica amada por mis padres, siempre trataron de darme lo mejor, pero ante la pobreza y el hambre ellos aceptaron la oferta de aquel hombre poderoso, realmente no los culpo sé que lo hicieron por mis hermanos, de igual manera de una
—¿Qué te parece esta?— Está linda.Respondió Aileana al mirar la bolsa color rosa palo que le enseñaba Beth.Ambas miraban las bolsas, se la estaban pasando realmente bien, cuando una chica, alta y castaña, se acercó a ellas de manera desafiante.—A ti te estaba buscando.La chica se paró delante de Beth de manera en que parecía que en cualquier momento le daría un golpe.— ¿A mí?Contestó despreocupada Beth mientras Aileana miraba con tensión la situación.— ¿Quién te da el derecho de salir con mi novio?— A mí me dijo que es tu exnovio.La chica mostró un rostro de molestia.— Bueno, si es mi exnovio, pero eso no te da de...— Él puede salir con quien quiera, y ahora lo hace conmigo.Aileana haló levemente la mano de su amiga.— Vámonos mejor ¿Sí?Beth vio los ojos de Aileana, de no querer problemas.— Si vámonos.Ambas chicas decidieron retirarse, habían dado algunos cuantos pasos cuando la chica castaña soltó la peor palabra para Beth, ya que detestaba que la llamarán así.— ¡Eres
"Mientras caminaba sobre aquel sendero solitario no podía dejar de pensar en los ojos que me vieron tan fijamente, era un hombre que no había visto, por aquí pensé que era extranjero, traté de despejar su imagen de mi mente, no sabía el porqué que él invadía mis pensamientos, después de un largo camino por fin llegué a mi destino este era una construcción abandonada, parecía que sería una gran casa me imagino que alguien de mucho dinero, pero había sido abandonada a medio construir, dejando un lado esto era un lugar hermoso rodeado de árboles, y reinado por el silencio. Este sitio lo descubrimos con Graham cuando iniciamos nuestro noviazgo, era el lugar donde siempre nos mirábamos. Debo decirles que ese noviazgo era un secreto ante todos, simplemente éramos compañeros de clases, la única que sabía de lo nuestro era Beth, casi siempre ella me cubría con mi papá, me imagino que quien lea esto sentirá la curiosidad de saber ¿por qué guardabarros nuestra relación como un hermoso secreto?
__ ¿Hayami estás bien?Preguntó Carolina al ver como Hayami estaba distraída y aparentemente escuchaba la conversación que tenían, pero realmente no era así.__ Si, lo siento estoy un poco distraída.__ ¿En qué piensas?Sonrió Angélica después de preguntar esto, Hayami que tenía la taza de té frente a ella también sonrió.__ No sé, siempre me he sentido preparada para las cosas que suceden a mi alrededor, pero en esta ocasión no sé si lo estoy.__ Hablas de tus bebes.__ No, eso me asusta pero trato de estar preparada...ash... No me hagan mucho caso dime Angie¿ Qué más hace falta para la boda?__ Prácticamente terminamos, muchas gracias por ayudarme chicas.Carolina y Hayami solo sonrieron.En el último año, Angélica plane
Aileana ¿es en serio? ¿ Qué significa ese golpe?El padre de Aileana la reprendió al ver que su ojo color miel estaba rodeado de rojo, el color ligeramente morado al rededor de su parpado estaba cubierto con maquillaje que aunque lograba cubrirlo no era suficiente.__ Me caí.Aileana sonrió traviesamente.Él solo colocó las manos en su cadera acompañado de un gesto de molestia.Después de soltar un suspiro algo largo su padre terminó sonriendo.__ No hay solución contigo, ¡vamos! Ya es tarde.Al entrar en aquel salón con los candelabros elegantes y toda esa gente vestida de manera elegante Aileana supo que sería una noche aburrida, normalmente siempre acompañaba a su padre a las fiestas que era invitado.Ellos no pertenecían a una familia adinera, pero el trabajo que desempeñaba su padre apenas alguno
Aileana estaba viendo hacia aquellos árboles sin decir ni una sola palabra, Graham solo la miraba observando la evidente preocupación que surgía de ella.— Sigues triste por lo de la materia.— No es triste es... frustrada, enojada, estoy muy molesta.— No le des tantas vueltas.—Tú dices eso porque pásate al igual que Beth, yo fui la única tonta, aunque comienzo a pensar que no le agrado al profesor.—No digas eso, además aun no repruebas¿No te dio el profesor un trabajo para aprobar?—Si, pero es lo mismo está muy complicado.—Yo te ayudaré ¿Si?Aileana sonrió por fin.—Mi amor tú no estarás aquí ¿no recuerdas que el lunes te irás con tu mamá a ver a tu tío?Graham hizo un gesto de disgusto.— ¡Ah si!, lo había olvidado... por cierto quiero que a mi regreso hablemos con mi mamá, quiero que ya podamos vernos como novios normales y no aquí a escondidas, estoy cansado de este lugar.— Eso también quiero yo.
—Buenas tardes, señoritas. Saludó Diago con su voz gruesa. —Buenas, tar... — ¿No le parece que esto ya es un acoso? Interrumpió Aileana a Beth que contestaba sonriente el saludo de Diago. Aileana colocó sus manos sobre su cadera y su rostro se tornó molesto. — Además, ¿cómo sabe que yo estudio aquí? Diago sonrió. —Cuando me mudé a este lugar, me dijeron que los escoceses eran muy educados, pero debo decirle, señorita, que usted es la excepción. — Aún no me contesta lo que pregunte. Él resopló. — Estaba dando una vuelta por estos sitios y las vi... En realidad no es acoso, solo quería ser gentil con ambas e invitarles un café. Los ojos de Beth se iluminaron, mientras que los de Aileana se entrecerraron con mucha desconfianza. __ Se lo agradecemos pero... __ ¡Aceptamos! Aileana miró confundida a Beth porque ella había sido clara en expresarle lo que él le provocaba y ella había aceptado sin importarle absolutamente nada, inmediatamente pensó en zafarse de la situación, per
—¿Cómo vas con el proyecto? Preguntó Beth que se encontraba recostada en cama de Aileana hojeando una revista mientras Aileana cepillaba su cabello frente al espejo de su tocador. — Bien, estoy avanzando mucho, además él me está ayudando mucho con la pronunciación. Beth se levantó de la cama, se acercó a Aileana y la miró a través del espejo. — Dime amiga ¿Cómo es él? —¿Cómo que como es él? Pues ya lo conoces, no entendiendo por qué me preguntas eso. —Sí, sé que lo conozco, sé que es muy atractivo, pero me surgen más preguntas en cuanto a él, tú llevas viéndolo dos semanas, dime ¿A qué huele? Aileana comenzó a reírse por la pregunta tan extraña de su amiga. —¿Cómo que a que huele? A nada, en serio, con tus preguntas extrañas. Aileana continuó cepillándose el cabello, su mente se perdió en un par de días atrás, cuando mientras estaban transcribiendo un texto, él se acercó a ella y el olor a su loción invadió sus fosas nasales, era un aroma increíblemente delicioso, claramente d